Isa salió de la casa cuando ya todos estaban dormidos, con unos pantalones cortos y una camisa negra que cubría asta debajo de su trasero, corrió hacia el coche que se encontraba estacionado.
Ben miraba como el cabello de ella bailaba por sus movimientos, se sentía confundido, había una parte de él, que quería estar con ella y otra que le decía que tenía que parar.
—Perdón, mi hermano no se dormía. —Dijo ella entrando al auto.
Ben no dijo nada, solo la miro y busco las palabras de poder terminar con el intercambio, Isa no espero a que él dijera algo, solo se lanzó a sus labios.
Sus labios eran como una droga para ella tan adictiva.
El día de ambos había sido un relajo, solo quería distraerse de todo lo que había pasado, los sentimientos de Isa estaban revueltos, aún tenía las ganas de
