Por contrato

Capítulo 2

¿Pensar en que? si en mis planes no tenía pensado casarme nunca.

Quería morir soltera así al morir tendría gracia que en mi lápida pusieran.

Devuelta sin usar

¿Que deudas tenía mi padre? ¿porque ese chico quería casarse con una de sus hijas en concretó?

El chico ese podría tener a la mujer que el deseara, pero escogió a alguien de mi familia cosa que lograba entender.

Pase la noche sin dormir pensando, estaba cansada pero, después de tanto pensar encontré la solución con la cual todos estaríamos felices.

En ese momento me levante me duche, me vestí, para ir a la empresa de el y sorprenderlo, el me dijo que vendría a verme por la tarde, pero no me gusta hacer lo que me dicen y mucho menos obedecer las órdenes de un desconocido.

Me puse un vestido n***o con unas deportivas blancas, siempre cómoda nunca se sabe cuando una tendrá que salir corriendo, me maquille y salí, estaba elegante pero casual.

En ese momento pase por una joyería y compre un precioso anillo de compromiso, era sencillo pero moderno, con un diamante blanco en el medio, era de colección, tenía un plan y sabia bien que era lo que quería.

Entre a la empresa de el, al llegar al piso de arriba hable con su secretaria.

—Lo siento señorita, pero si usted no tiene una cita con el dudo que pueda dejarla pasar—dijo ella mirándome de abajo hasta arriba.

—¿perdone? Pero no creo que yo necesite una cita, para ver a mi prometido— ella se quedo asombrada.

Sin dejar que ella diga algo más, entre directamente al despacho de el, ella intentó impedir que entrará pero yo entre en ese momento el se quedo mirándome.

—hola cariño, creo que aun nuestro compromiso no lo has echo oficial ya que tu secretaria no me había dejado entrar, no puedo creer que no hayas informado a tus empleados de tu compromiso, me siento ofendida—dije como si estuviera dolida, el me miraba con asombro y confusión

—señor la se...—comenzó a hablar su secretaria pero el la interrumpió

—Puede retirarse no pasa nada—dijo el

ella salió sin decir nada, solo asintió con la cabeza en el momento que ella salió cerrando detrás de ella la puerta yo me acerque al sofá que estaba allí y me senté.

—¿cariño? ¿prometido? ¿A que juegas?—dijo el

—yo a nada, me dijiste que querías casarte conmigo y yo he aceptado ¿qué es lo que estas jugando tú?—dije algo curiosa

—ayer mismo te negavas a casarte conmigo ¿que te hizo cambiar de opinión?—dijo él ignorando mi pregunta

—bueno es que me he dado cuenta que me he enamorado de ti, suena absurdo pero fue amor a primera vista—dije pero en eso momento me recorrió un escalofrío por la espalda de asco, como iba a enamorame de alguien como el

—¿es broma no?—dijo el

—si, tranquilo nunca podrías estar en la lista de hombres que me gusten o de los que podría enamorarme—

En ese momento entro una mujer, parecía estar bastante cabreada, si no me equivocaba diría que ella es alguna Ex-novia resentida y loca de el.

—te aprovechaste de mi, me dejas por esta mocosa, por dios que ves en ella—dijo ella con tono alterado

—Wow no quería meterme en vuestros problemas pero ha que me has mencionado, pues bueno mírame y mírate, soy mas joven de cuerpo esbelto, con unos ojos hipnótisantes, cabello natural, tu eres pues rubia de bote, incluso tus labios diaria que son pinchados ¿tus pechos son naturales?—dije veía que el estaba asombrado por mis palabras y ella estaba que echaba humo.

—zorra desgraciada, es lo que eres una maldita idiota, eres una perra—dijo ella acercándose a mi pero yo nunca me dejaba intimidar por nadie.

—Ya sabemos que soy solo una, no hace falra que repitas tanto el uno,sabes te iba a llamar puta, pero ambas sabemos que nadie pagaría por ti, ya que andas ofrecida de gratis, no soy una zorra desgraciada me gusta decir que soy una zorra empoderada —dije podía ver que ella estaba ya muy cabreada el solo nos miraba parecía que le divertía la situación

—COMO TE ATREVES MOCOSA—dijo ella mientras me daba una bofetada, la cual no pude esquivar

El se metió en medio rápido y la agarro de la mano para sacarla.

—Te has rebajado demasiado, pero está vez no diré nada solo porque sé que eres una mujer resentida, acéptalo solo fuiste una aventura no tienes nada que ofrecerle a un hombre aparte de tu cuerpo, sexo es para lo único que te buscan además sale más rentable acostarse contigo ya que te ofreces de gratis, en cambio yo tengo más potencial—

—Te dejará después por otra, como lo hizo conmigo, ni te creas especial —

—la diferencia que a mí me dejara y tendrá que indemnizar una gran cantidad de dinero, porque nos vamos a casar—Dije enseñándole el anillo que llevaba puesto—Sabes en un principio quería lanzarme sobre ti y devolverte el golpe, pero siento demasiada pena por ti—

El había llamado a los de seguridad para que la echarán, dejándonos otra vez a solas.

—¿Porque te presentaste en mi despacho como mi prometida? ¿acaso eres imbécil?— dijo el idiota directamente

—No dejare que mi hermana se case con alguien como tu, además creo que contigo lo pasaré demasiado bien, en cambio ella contigo no—dije

—¿te refieres al sexo?—

—No, me refiero a que no dejaré que se case contigo bajo ninguna circunstancia—

—¿En cambió tú si te casaría conmigo?—

—Claro que si, sobre todo porque tienes algo que me interesa—