Era el día más esperado para Keelan, Alexey y Gyda, reinaban los nervios, ¿Podría su versión ser lo suficientemente solida para convencerlos? Comenzaban a llegar los nobles, no con disgusto, aun no sabían que esperar, pero no en la mejor disposición para entender la situación. - Majestad, fue bastante sorpresivo un evento de este tipo. - lord Daven no tenía un tono de voz amigable. - La situación lo amerita, Lord Daven, pero disfruta de la hospitalidad del palacio. Keelan tenía un traje n***o, con bordados rojos vibrantes en la camisa blanca que resaltaba con el n***o de su traje, su largo cabello estaba peinado y suelto, se veía más pálido que de costumbre y resaltaban sus ojos negros sobre su rostro palido, por otro lado Alexey llevaba un traje gris, casi blanco, con motivos azules,

