La playa ese día estaba pacífica, con un sol muy brillante. - Primero deberíamos desayunar. - Keelan ya tenía preparado un lugar para desayunar, los sirvientes habían puesto ya una mesa, con muchos alimentos frescos. El lugar a donde fueron a desayunar, era un gran salón con ventanales enormes pero de color verde y otros azules, para evitar los rayos de sol directos. La comida en su mayoría eran frutas con jugos frutales y la mesa imitaba al gran comedor del palacio. - En esta zona del reino es propio que ocupes vestidos sin manga larga, solo era cuestión de que tuvieras cuidado con el sol. – Le dijo Keelan a Gyda. - Lo sé, es solo que las marcas de mi brazo no han podido ser borradas aún. Keelan había olvidado por completo ese detalle, se sentía mal no solo del daño causado, sino t

