Luego del reencuentro de las amigas de toda la vida, en el bar-café de los encuentros y reencuentros de Don Alvaro, pasaron muchas cosas. Entre la llegada de los nuevos amores, los encuentros con las entidades del mal, que, aún no entendían del todo, la aparición de la Reina de las Hadas a algunas de las chicas, la existencia de la fuente mágica de cuarzo rosa y, en momentos, la incredulidad de las razones por las que estaban viviendo todo esto, llegó el momento de revelarles a las cinco luces, por qué lo eran y cuál era la misión exacta, con la que llegaron al mundo.
Debido a esto, los Dioses de la Dimensión Perdida, hicieron una nueva reunión con Danu, La Reina de las Hadas, quien ya tenía los grupos formados para la gran batalla contra el mal, y, de ésta manera, enterarlas del rol que desempeñarían en dicho enfrentamiento.
- Danu, ¡El día ha llegado!, debemos hacernos presente ante Constanza, Regina, Denisse, Caridad y Agatha, con la finalidad de, desvelar el secreto, acerca de las misiones para las que han sido elegidas, desde mucho antes de nacer.
- Lo sé, Morgano, solo que aún no concibo la manera de hacer frente a las preguntas que me hará mi pequeña Constanza.
- Ha llegado el momento preciso, Danu, no nos podemos retrasar un día más. Denisse, hará un viaje laboral hacia las montañas de Firenever. Tú más que nadie sabe, que la batalla se acerca.
- Sé que hará ese viaje, de hecho, le di a Agatha, unas indicaciones para que les hiciera amuletos a ella y a las personas que han de acompañarle. Debe tener conciencia que es muy peligroso.
- Eso era precisamente lo que iba a solicitarte, que le hicieras protecciones mágicas con polvo de hadas. Las entidades del mal, están a la expectativa, en todo el camino, hacia el complejo de las montañas de Firenever.
- Morgano, debemos decirles que era allí, el lugar donde vivíamos felices en nuestra Tierra de La Eterna Juventud, hasta que llegaron los invasores y destruyeron nuestro paraíso.
- Poco a poco, Danu, antes debes mostrarte, para que tengan toda la confianza de apoyarse en ti y, por ende, en nosotros.
Los Dioses y Danu, se preparan para aparecerse, frente a las luces, quienes, en ese momento, iban camino a encontrarse con Agatha y Denisse, en la tienda de ocultismo, para, que luego que, ésta última retirara los amuletos, dar un paseo por “Las Murallas de York” y conversar un poco más acerca de cómo decirles a sus enamorados, lo que se avecina, aún las cinco luces, tienen dudas, acerca de ello. Pero, en ese momento, en que se disponen a salir, ocurre una revelación ante Danu, todo el lugar se torna totalmente oscuro, desaparecen los rayos y destellos de estrellas, que, adornan su espacio mágico, se escuchan lamentos de las almas cautivas en la lejanía. Danu, sabía que dichos lamentos, no provenían de las almas en cautiverio de la Fuente Mágica Sagrada, porque de alguna manera, están protegidas, sino de “Fairy Folk”, por lo que a ésta, se le van los colores del rostro, su tranquilidad se desvanece y comienza a hablar en Irish Gaélico, intentando, a través de su subconsciente, calmar el dolor, que, expresan desde aquél lugar.
- Danu, ¿qué ocurre contigo?
- Morgano, los están maltratando, están azotándolos. Los dragones, los trolls, están en las sombras, haciéndoles daño a sus criaturas hermanas. El poder del mal y sus secuaces, se han apoderado de su alma bondadosa, se están matando entre sí, hay fuego, mucho fuego alrededor. Los orcos, están acabando con lo poco que queda, así como los lich, atemorizando nuestras pequeñas criaturas escondidas. Y ellos, ellas, nuestras hadas no pueden defenderse, no tienen la fuerza para hacerlo, se han debilitado cada día más, así como los unicornios, han caído en arenas movedizas, tratando de escapar, a los pegasos, les han quemado las alas con sus antorchas malévolas. Nuestro hogar, se está hundiendo en las sombras de la oscuridad, está siendo abrazado por el miedo y el temor. Se les está apagando la luz.
Danu, termina de decir éstas palabras y rompe en llanto, preocupada por la situación que están viviendo, los habitantes de su pueblo mágico. Cayendo desplomada, desde su nube flotante, con los ojos en blanco, sin poder hacer nada por ellos, ni por ella misma, a quien también, se le va deshojando la flor de su vida mágica y terrenal.
Morgano, actúa inmediatamente, buscando alguna solución entre los otros dioses, si Danu, sigue el camino hacia otro destino, todo acabará, ella es el pilar de las luces, los hilos de ellas, las hadas y los elfos cautivos, así como de, las sirenas, las quimeras y todas las criaturas, condenadas a morir en vida.
Mientras tanto, en las Montañas de Firenever, en el bosque verde, las criaturas mágicas que, aún, vivían allí, y que, de alguna manera se habían escondido, en ese lugar, durante muchos siglos, estaban corriendo un peligro inminente, en manos de los trolls y los gigantes, que se habían volteado a sus hermanos, sirviéndoles a Abalám, el malévolo príncipe de los infiernos, quién hubo regresado del inframundo, para terminar de destruir la Tierra de la Eterna Juventud y a todas las criaturas, que quedaran en ella, pues, los soldados infernales, que había enviado a la tierra, le hubo informado, acerca de su existencia en unas montañas lejanas y a las que era casi imposible, acceder. Pero, para las fuerzas del mal, no habían imposibles, a la hora de destruir todo lo que estaba a su alrededor y de conseguir su propósito, harían hasta lo imposible por verlo logrado, sin importar a quién o a quienes, se llevaran por el medio, aparte que, desde hace mucho tiempo atrás, guardaba un tesoro; el más preciado de la colección, que aguardaba, en la octava paila del inframundo y, del que no se separaría jamás. Tratándose, nada menos que, del Talismán que le hubo robado a Danu, en aquel fatídico día, para las criaturas de "Fairy Folk", pero magnífico, magnánimo, para él, quien concentró todo el poder mágico de la Reina de las Hadas, y, su poder maligno, en el interior de dicho talismán y, que ahora, está siendo custodiado, por un dragón Cuélebre, el cuál, ha sido adiestrado para hacer daño a todo aquél, sea humano, hada o criatura fey, e incluso, otro dragón de su especie, que intente rescatar el Talismán de Danu.
Si alguno de los Guerreros de la Luz, se acercase a él, corre el riesgo, de desaparecer de la faz de la tierra y de los recuerdos de quienes lo conocieron, así como las almas de familiares cautivos, de la fuente mágica de cuarzo rosa.
Aún Danu, no se estabiliza del todo, se mantiene preocupada por la situación que visualizó hace un momento aunque ya recuperó el color de su rostro, por su parte, Morgano, le lleva un poco de agua mágica sanadora de manantial, para lograr que se calme un poco y, de ésta manera, pensar en frío, la mejor manera de actuar ante las entidades malignas.
Por otro lado, las cinco amigas, se encuentran en la tienda de Agatha, donde, ya reunidas, conversan acerca de los amuletos que ésta ha preparado para Denisse y las personas que la acompañarán en la aventura, hacia el complejo de las Montañas de Firenever.
- ¡Wow!, Agatha, te quedaron fenomenales, al final, ¿qué les pusiste? Pregunta Denisse, con una de las bolsitas en sus manos.
- Pues, no fue sencillo, pero están bastante completos, hasta polvo de hadas, tienen. Responde, Agatha.
- ¿Polvo de hadas?, y ¿cómo hiciste para conseguirlo? Pregunta, Caridad, asombrada.
- No es polvo de hadas, de un hada original, Caridad, es un polvo de hadas que me trajo el distribuidor, es llamado así, porque está elaborado con elementos de la naturaleza.
- Entonces, no tienen nada de magia, en ese caso, no surtiría el mismo efecto, o ¿me equivoco? Dice, Regina.
- A ver, chicas, si creen en esto y le dan la energía requerida, ¿por qué no habría de funcionar? Exclama, Constanza.
- Pues, yo no entiendo mucho, Agatha, ¿te podrías explicar mejor?
- Claro, presten atención, En nuestra tradición, las brujas modernas , buscamos llenar nuestras vidas de magia, al acercarnos a la naturaleza, contactando con los seres elementales y redescubriendo el reino de las hadas. (Aun sin saber que nosotras, realmente, lo somos). Tenemos la creencia, que todos los elementos de la naturaleza, las plantas, las piedras, los árboles, etc., tienen un espíritu que los habita y que les da alma: a este espíritu, lo llamamos hada. El polvo de hadas, es una mezcla de hierbas y elementos, que nos es de gran utilidad para hacer contacto con estos seres mágicos, y es también utilizado para pedir deseos.
- ¿Hasta para pedir deseos?, ¡Qué maravilla!, y ¿cómo lo preparan? O, ¿lo hiciste tú misma?
- Yo, pedí al distribuidor que me trajera, el polvo como tal, pero, en vista que no lo tenía ya preparado, me trajo los materiales para elaborarlo yo misma.
- Y ¿Cómo lo hiciste?, ¿nosotras también podemos hacerlo? Exclama Regina.
- Les explicaré como lo elaboré y que materiales usé, y, claro, que puedes Regina, es decir, todas, podemos hacerlo y más, siendo hadas mágicas. Escuchen bien, debe prepararse preferiblemente, en fase de Luna Nueva o Creciente, los elementos que utilicé, son los siguientes: Verbena, flores de manzanilla, capullos de lavanda, estos, si quieren, yo los usé, ehh pétalos de rosa, diamantina o purpurina de colores y un mortero, cada una de las hierbas, deben estar secas por completo para preparar nuestro polvo de hadas. Antes de comenzar a trabajar, encendí un velón blanco e incienso, éste puede ser floral o con aroma a pino o alguno con aroma a bosque, recuerden que ese es el lugar, donde por lo general, habitan las hadas. También se puede tocar una campanita, pues es la mejor manera, de atraerlas.
- O sea, que, si nos quieren atraer a nosotras, nos tocan una campana y ahí ¿estaríamos nosotras como unos claveles? Pregunta Regina
- Pues, tanto así, no, porque recuerda que nosotras somos hadas humanas. O hadas personificadas, si estuviésemos en el bosque y sólo fuéramos eso; seres mágicos, irremediablemente, sí, pero déjenme continuar, una vez hecho lo anterior, vamos a ir colocando, poco a poco las hierbas en el mortero, y con unos movimientos que llamamos, en deosil, o en el sentido de las manecillas del reloj, las vamos a ir pulverizando, hasta integrarlas todas, el machacarlas en deosil, estaríamos generando la energía y de ésta manera, haciendo que, las propiedades de las hierbas se despierten. Ya cuando tengamos la mezcla de hierbas, lo más fina y molida posible, procedemos a agregar la diamantina o la purpurina de colores, y seguimos mezclando, siempre en deosil. El fin de usar la diamantina, es precisamente para llamar la atención de estos seres; ya que las cosas brillantes, suelen gustarles mucho.
- ¡Ay!, con razón a mi me encanta todo lo que brilla. Comenta Constanza, emocionada.
- Eso lo sabemos, te conocemos casi desde que naciste, mi querida luz.
- Bien, como les iba diciendo, al momento de ir agregando las hierbas, vamos a decir el siguiente decreto tres veces sin dejar de moler:
"Yo, su nombre de bruja, si es que lo tienen, o en su defecto, su nombre propio; pido a los espíritus elementales, que despierten el poder y la magia de la verbena, para poder contactar, con el mágico mundo de las hadas". Este decreto debe repetirse, tres veces para cada hierba, así que lo decimos tal cual, nombrando a la lavanda y a la manzanilla; al terminar de hacerlo, se agrega la diamantina o la purpurina de colores y decimos lo siguiente: "Con la bendición de la Diosa y el Dios, por el poder de tres veces tres; así es y así será".
Una vez hecho esto, nuestro polvo de hadas está listo y podemos guardarlo en un frasco o recipiente de vidrio, cerámica, madera, barro o metal; nunca debe ser en uno de plástico.
- ¿Y ya?, ¿es todo? Pregunta Caridad.
- Sí, Cari, es todo. Les recuerdo que, el polvo de hadas, nos es de gran utilidad para poder contactar con estos mágicos seres, y, se usa en rituales para presentarse ante ellas o para invocarlas; aunque su uso más frecuente, es para pedir deseos.
- ¿Y cómo hacen los seres humanos normales, por decirlo de alguna manera, para pedirnos deseos a nosotras, o bueno, a las hadas? Indaga, Denisse.
- Para pedir un deseo solo se debe tomar una pequeña porción, con el índice y el pulgar, no con otros dedos, ni cucharillas, ni otros utensilios, y colocarla entre nuestras manos, concentrándonos en nuestro deseo; una vez que lo tengamos bien claro, vamos a soplar el polvo al viento, visualizando que nuestro deseo se cumple. También se puede soplar en nuestras plantas, para atraer a estos maravillosos seres mágicos y podemos colocar una porción, de nuestro polvo de hadas, en una botella pequeñita y usarla como dije, en un collar, si le ponemos una cadena o un cordón. También, podemos llevarlo en nuestro bolso, por si surge alguna situación en la que sea necesario usarlo, así como, también puede ser un lindo regalo para un ser querido, que como nosotras, crea en la magia. Y listo. Está hecho.
- ¡Wow!, ¡Santas Hadas!, no pensé jamás que diría esto, pero, me encanta lo que nos has mostrado el día de hoy. Ya que, soy un hada humana y no tengo polvo de éste en mis alas, que, por cierto, tampoco tengo, me fascinaría hacer el mío propio. Vas a tener que venderme unas hierbitas de esas. Comenta, Regina.
- Claro, con todo el gusto mi querida lucecita. Ahora bien, Denisse, volviendo al tema, cada amuleto, es diferente, el tuyo, es el más completo, esto, en vista de ser un hada verdadera, pues también, es necesario que te cuides el doble, por todo lo que hemos venido pasando en los últimos días, por cierto, te diré un secreto que no debes revelar a nadie, ni siquiera al muchacho con el que viajarás, sé que confías en él, pero, no debes decirle, que tu amuleto aparte del polvo de hadas, elaborado por mi, también tiene polvo de hadas original, el cual, me facilitó, Danu, la Reina de las Hadas, precisamente para protegerte, en todo el sentido de la palabra.
- ¿Hablas en serio, Agatha?
- Por completo, no tendría por qué mentirte, aparte que ella personalmente, puso en mis manos, el recipiente que lo contenía.
- ¿Podemos verlo?, Por favor, Agatha, muéstranos.
- No solo pueden verlo, he aquí unas bolsitas para cada una de ustedes, recuerden que no deben usarlo, a menos que sea estrictamente necesario, y, sin que esté a la vista de ningún humano, ni siquiera de sus enamorados, pues, ellos aún no saben nada de sus ancestros ni de lo que son. ¿De acuerdo?
- De acueeeeerdoooooo. Responden todas al unísono.
Cada una de las luces, recibió y abrió su bolsita, quedando maravilladas con el contenido. Agatha, terminó de explicarle a Denisse, como usaría el amuleto, tanto ella como su jefe, quién a estas alturas, no había aparecido.
- Por cierto, Denisse, ¿Qué sabes de tu jefe?, ¿Apareció?
- Nada, amiga, es como si se lo hubiera tragado la tierra, muy extraño, porque sus pertenencias están en la oficina, su móvil, su sombrero, el abrigo y hasta las llaves de su casa y del auto.
- Y, ¿cómo harían en ese caso?, ¿iría igual el viaje para le fecha pautada?
- El departamento de administración, dice que, con o sin él, el viaje debe realizarse, si no aparece, entre hoy y mañana, pues seré yo, quien lidere el viaje.
- Me parece perfecto, aunque, si no conoces muy bien el camino, deberías apoyarte en el muchacho, Ehh, Andrew, ¿es su nombre, ¿no?
- Sí, Andrew, él conoce como llegar, y, qué bueno que hiciste varios amuletos, pues, es probable que otros compañeros del diario, vayan con nosotros, para tomar fotos, grabar vídeos y escribir en sus columnas acerca de todos los misterios que aguarda la montaña.
- Ojalá todo se resuelva y puedas salir de todo eso con bien. Como te decía, tu amuleto tiene aparte de los polvos de hadas, un tetragrammaton, algunas piedras de cuarzo, cristales del amazonas, hierbas y mini-cortezas, así como también, una peonía y algunos dientes de león y ojos de gato, entre otras cositas, muy efectivas, para esas situaciones.
- ¡Oh, Gracias!, Agatha, no sé qué haría sin ti.
- Tranquila, que para eso estamos.
Las cinco amigas, continuaron conversando acerca de las emociones, que vibraban en ellas, desde que supieron que, eran hadas mágicas y, para celebrarlo, decidieron darse un paseo, por “Las Murallas de York”, un lugar, al que querían visitar juntas, desde que se reencontraron, una vez más.