Capítulo 21. *Plan en marcha. De inmediato, Cristian corre a la escalera, subiendo a su habitación, donde entra sin tocar. Está dormida, de manera que Cristian se mueve de espacio hacia ella. Al ver sus mejillas tan rojas con marcas que se han ido borrando, la venda en su frente con marca de sangre lo incomoda. Al sentarse a su lado, su corazón lo incita a bajar la cobija para ver cómo ella abraza su vientre, el cual Cristian siente la necesidad de tocar; necesita sentir que su hijo aún sigue vivo, así que no lo piensa y la acaricia, de manera que su bebé se mueve con intensidad, calmando su angustia. Vanessa puede sentirlo y al abrir los ojos confirma que es él. Cristian la mira a los ojos y ella a él, sintiendo esa conexión que crece en ambos y que ninguno puede evitar. —¿Qué te pasó

