Por la mañana como Dalton prometió recogió a las chicas muy temprano por el rancho donde vivía Gayla… el viaje contaba de una hora y media así que lo mejor era salir temprano antes que calentara el sol.
Gayla al salir de la casa con la niña en brazos se fija en el coche de su atractivo vecino. Era una camioneta de dos puertas, no tenía asiento trasero. En pocas palabras, no era acta para llevar a un bebé para un viaje tan largo.
— ¿Qué es eso? — Señala el coche con el mentón.
—¡Mi camioneta! —contesta mirando el coche detrás de él.
—No podemos llevar a un bebé allí, debes estar de broma.
—¿Por qué no? es un coche bastante seguro, un poco vieja pero es muy segura.
—No tiene asiento trasero, es muy peligroso viajar con un niño en la parte de adelante.
—La vía no es muy transitada, te
