¿Por qué su hermano pasaba horas encerrado con su jefe? ¿Qué tanto hacían? Eso no estaba bien, no daba una buena imagen a, ¿a qué? Por más que quisiese poner en tela de juicio el trabajo de Calvin, no podía. Su hermano se desenvolvía de una manera ejemplar, siguiendo cada orden de su jefe. Pero lo cierto era que toda la semana había sido testigo de los “encierros” y cuando su hermano salía de la oficina, siempre lo hacía con una sonrisa y un ligero rubor en las mejillas, como ahora, acompañado de su jefe, el guapo y sexy empresario Maddox Alexander. Mariana hizo todo lo posible para no rodar los ojos y soltar un bufido. Oyó la despedida del empresario dirigida solo a su hermano y Mariana frunció un poco el ceño. ¿Por qué el hombre no la notaba? Era una mujer hermosa, elegante y sofistica

