UN POCO DE FELICIDAD

1677 Words

—Papi, no te muevas —exige la princesita, con su vocecita mandona—. O, si no, se aluinalan tus uñas. Frunzo el ceño y me remuevo, acomodando mi enorme cuerpo en la sillita rosa, de su mesita para té, en la que estoy sentado, y en la que la princesita me está pintando las uñas y maquillando. La observo detenidamente, mientras embadurna mis uñas con un esmalte lleno de estrellitas y brillantina de colores. No me canso de verla. Es hermosa, vivaz, inteligente y tiene ese mismo carácter mandón de su mamá. Me maravillo, dándome cuenta de que, cada vez, descubro algo nuevo en ella: un nuevo rasgo, un nuevo gesto, una nueva actitud. Me pregunto si todos los padres pasan por lo mismo, o solo soy yo, tratando de recuperar estos tres años que he perdido. Viste un traje rosa, adornado con

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD