Diez años después
Han pasado diez largos años desde que llegué a esta familia y me aceptaron como a otro m*****o de su hogar, tengo que admitir que siempre me han dando amor y protección, mis hermanos y mi padre me adoran a tal grado que todos estuvieron de acuerdo para cambiarme el apellido, la realidad era que ahora ellos eran lo único que tenía, y que él pasado se tenía que quedar en donde estaba, en el pasado.
Mi hermano William se acababa de graduar de la universidad, y todos estábamos muy contentos por el, así que decidimos hacerle una fiesta sorpresa por su más grande logro, Emeth se encargo de avisarle a todos sus amigos y mi padre y yo nos encargamos de todo lo demás, se suponía que la reunión se llevaría acabo a las siete de la noche pero no sabíamos si William llegaría más tarde.
Todos estábamos reunidos en el jardín esperando que el festejado llegara a la reunión, cuando de pronto se abrió la gran puerta de la sala de estar.
-¡Sorpresa!- todos gritamos en un solo tono al ver a William en las escaleras
Cada uno de los invitados lo fue felicitando personalmente, todos estábamos muy felices.
- Estoy muy orgullosa de ti, hermanito. - Se lo decía mientra lo abrazaba con fuerza.
-Gracias hermosa, espero que muy pronto tu y Emeth terminen sus licenciaturas. - Me decía al oído mientras me abrazaba.
- Hijo muchas felicidades, espero que este sea el primero de muchos logros- Mi padre miraba muy orgulloso a William.
-Lo sé papá, lo sé.
Pronto todos estábamos bebiendo y disfrutando de la fiesta hasta que de pronto entró un hombre alto de cabello n***o y ajos azules.
- Muchas felicidades, pensaste que me iba a perder este momento. -el hombre le dio un fuerte golpe en el pecho.
- Hermano del alma, que bueno que estas aquí. - William lo miraba con mucha alegría.
-Jamás me perdería este momento,lo sabes, oye y ¿donde esta Emeth?.- pregunto arqueando una ceja.
-Mi hermanito menor está en la barra, como siempre. - William rió a carcajadas mientras los dos caminaban hacia donde estaba Emeth.
Al mirar aquella escena un recuerdo vino a mi, el primer día que vi a ese muchacho en la casa el cual no me había dejado conocer mi hermano, pero eso no importaba, lo que realmente importaba era ¿por qué no lo había vuelto a ver desde ese día?, era algo muy raro que haya desaparecido por diez años y que ahora este aquí con nosotros. Me atraía mucho aquel hombre, no sabía porque pero algo en su personalidad hacía que me estremeciera por completo. Quite esos pensamientos de mi cabeza al ver que la gran mayoría de los invitados ya se había ido, y solo quedaban mis dos hermanos, mi padre y el hombre misterioso, así que decidí irme a dormir y descansar.
Al siguiente día me levante tarde y mire a mis hermanos con mucha resaca de la noche anterior.
- Si que se la pasaron muy bien anoche. - le dije a Emeth mientras me sentaba a su lado.
-Si que fue una noche especial. - Emeth solo se acariciaba la cabeza.
-Ayer estaba con ustedes un chico de cabello n***o, ¿quien era?. - le pregunté mientras lo miraba.
- Es un amigo de William, se llama Jace, regreso de Italia.
- Y... ¿Cuántos años tiene?
- Recuerdo que era dos años más grande que William, me parece que tiene 27 años.
- Es muy atractivo. - le dije mientras acariciaba mi rodilla.
-Que no te escuche William, porque vas a tener muchos problemas con el.
Me quede pensativa un rato por lo que me había dicho Emeth, ¿Porque William se enojara conmigo por fijarme en un chico? ¿A caso el sabia cosas que yo desconozco? No sabía a ciencia cierta las respuestas pero segura estaba que las iba a descubrir.
Al poco tiempo Emeth y yo terminamos nuestros estudios, no quisimos hacer una fiesta, solo queríamos irnos de vacaciones a la playa, pero William no tenía mucho tiempo para tomar unas merecidas vacaciones así que nos había prometido hacer lo posible para cumplir el deseo de irnos de viaje.
Los siguientes días encontré en r************* el perfil de Jace, era como una página donde exhibía toda su vida privada, desde sus innumerables novias, hasta sus viajes, entonces entendí que Jace era un hombre mujeriego y de poco compromiso, pero no le tome importancia, ¿quien diablos se iba a fijar en mi?, a todo chico le gustaban las mujeres hermosas y con personalidad, y... Seamos sinceros, yo aun no sabia nada de mi, aun me estaba conociendo a mi misma como para pensar en hombres.
Me encontraba empacando mi ropa para irme de vacaciones con mis hermanos, cuando de pronto entró a mi habitación William.
- Hola hermosa, tengo algo que decirte.
-Si dime, ¿que pasa?. - lo mire a los ojos.
- Irán con nosotros unos socios míos para arreglar unos asuntos en Cancun, ¿esta bien?. - me tomo de la mano mientras analizaba mi rostro.
-No tengo ningún problema, además voy a ir a la playa, no pienso estar con ustedes. - le dije mientras me reía.
- Eso me parece perfecto.- Al instante William se dio la vuelta y mientras salía de mí habitación me dijo en tono burlón. - Apúrate, porque si no, te dejo.
Solo sonreí y baje las escaleras con mi maleta. Afuera de la casa se encontraba una camioneta Ram de ultimo modelo color n***o, no sabía de quien era pero me gustaba, al poco tiempo Emeth subió mi equipaje en la batea de la camioneta y me lanzó unas llaves.
-Niña novata, te toca conducir tu maquina, así que ponte el equipo. - Mi hermano se rió entre dientes.
- No soy ninguna novata, se perfectamente lo que hago.
Tome mi equipo, mi casco y me subí a mi moto deportiva, al estar arriba de ella, me percate de que alguien me miraba, y en efecto, su mirada se clavo tanto en mi, que me incómodo mucho, pero al saber de quien se trataba me erizo la piel, el hombre de la camioneta era Jace y estaba acompañado de su novia, me molesto mucho pero no sabía porque.