A ti no te Esperaba.

1. La importancia del destino.

"Lo importante no es lo que nos hace el destino, sino lo que nosotros hacemos de él.”

Florence Neightingale

Violet subió corriendo las escaleras de su casa hasta la recámara de sus padres, esta mañana no había sido muy buena para ella gracias a las dificultades económicas que su familia había experimentado desde hace más de 3 meses, si bien los Heiden eran una familia adinerada las recientes circunstancias los habían obligado a realizar diversos ajustes a su estilo de vida que hasta cierto punto le resultaban tolerables, sin embargo, para ella esta mañana se había cruzado cualquier limite pues no le fue posible ocupar sus tarjetas bancarias en la salida semanal con sus amigas.

Y eso la había puesto de mal humor, de muy mal humor, sobre todo porque tuvo que inventar una absurda historia acerca de como sus padres la habían castigado por no querer trabajar en el negocio familiar, fue algo ridículo para ella pero no tenía alternativa o se arriésgaba a ser la burla de sus amistades y la comidilla de la alta sociedad.

Así que iba muy dispuesta a reclamarle a su padre su incapacidad para poder sostener la economía familiar de forma adecuada, pero justo antes de tocar a la puerta escuchó una interesante conversación que definitivamente podría darle un giro muy benéfico a su tambaleante situación.

- Estás loco?!- cuestionó muy alterada Virginia, la madre de Violet.

- Piénsalo mujer, es una buena alternativa.....al menos recibiremos una buena indemnización- respondió William, padre de Violet.

- Por vender a nuestra hija?!..... jamás!!!, ni siquiera sabes que clase de enfermo es ese hombre.....y vienes a proponer esa aberración!!!!

- Es uno de los más famosos escritores del mundo....tan solo ahora 5 de sus obras son Bestseller.

- Ay, discúlpame, es escritor?!..... porque no lo dijiste antes?, todos los artistas son tan rectos e intachables!!!!!!

- No todos son Capote o Hemingway!!!

- Aún así no es correcto y lo sabes!!!- increpo Virginia muy molesta.

- Solo es por 1 año.......Violet solo tendría que casarse con él por un año, un año..... es todo y recibiremos una cuantiosa indemnización, lo suficiente para salvar a la familia además publicará con nosotros al menos dos obras.

- A cambio de qué?

- No lo sé......

- No lo......de verdad.....eres increíble.....no sabes ni siquiera que planea ese hombre y vienes a proponerme esta aberración, él puede ser un enfermero o un degenerado o peor un maltratador, y tú estás dispuesto a correr ese riesgo solo por dinero?!

- Estamos a pasos de la ruina total, la editorial no está dando los ingresos de antes y necesitamos liquidez para contratar nuevos editores y agentes que nos traigan más y mejores escritores......si no hacemos algo en un mes a lo mucho tendremos que vender un par de revistas y eso solo nos serviría para liquidar a los trabajadores, después esto....todo esto..... tendrá que venderse y todos tendremos que trabajar!!!

Esa no era la respuesta que Violet deseaba escuchar, si bien ella sabía que había problemas nunca se imaginó que llegarian a tanto y no estaba dispuesta a perderlo todo, no, su estilo de vida, sus viajes, sus compras, su carro, era inaceptable, no se iba a convertir en el hazme reír de la alta sociedad y peor aún, no pensaba perder a Stephen Wescott, su adinerado novio con un prometedor futuro en la política.

Y no es porque él no pudiera con la situación, en realidad era un hombre muy considerado, pero desgraciadamente no podía decir lo mismo de la madre de Stephen, Beatrix, quien haría hasta lo imposible por separarlos si se enterase de las precarias y tambaleantes condiciones económicas de la familia, ella era una odiosa y orgullosa mujer que la toleraba solo porque era muy rica, al menos eso era lo que creía, pero si la ruina los alcanzaba terminaría por despreciarla y alejarla de su hijo, después de todo se sentía muy orgullosa del linaje de su familia que se remontaba hasta la llegada del Mayflower, así que no había muchas alternativas, de lo contrario Violet perdería no solo su holgado presente sino también su prometedor futuro.

Ahora solo tenía que corroborar de quien se trataba para poder aceptar el riesgo, a pesar de su necesidad no estaba dispuesta a terminar cuidando a un viejo amargado e incontinente en sus últimos días, ella no estaba hecha para eso, para ser honesta, se consideraba a sí misma como una criatura delicada y merecedora de todo tipo de cuidados, ósea una mujer de alto valor.

- Debe haber alguna otra alternativa!!- refutó Virginia.

- No la hay, los bancos no quieren invertir porque creen que las editoriales son un negocio en extinción y no quieres que hable con nuestros conocidos.....que más podemos hacer?

- No, eso jamás......no podría soportar la vergüenza, te imaginas?!- Virginia expresó mortalmente dolida, como si se estuviera enfrentando a la peor tragedia imaginable- y Violet.....dios santo.....no, ella no lo soportaría!!!

- Entonces, qué sugieres que hagamos?!, ya hemos empeñado gran parte de tus joyas, dejamos de ir al club y vendimos el yate.......las alternativas se están agotando, esto puede ser una gran oportunidad, al menos lo será si podemos negociar alguna cláusula.

- No sé si mi hija acepté.....

- Tendremos que decirle toda la verdad.

Pero a Violet lo único que le preocupaba era lo que pensaría Stephen de todo esto, él era un hombre noble y comprensivo pero un hombre al fin, y qué hombre podría soportar vender, porque eso es lo que haría, vender a su novia?, sin embargo, ante el panorama era lo único que le quedaba y esperaba que el lo entendiera.

-Y quién es ese hombre?!- cuestionó finalmente Virginia, aparentemente resignada.

- Person Galloway.

- Qué?! y ese nombre de dónde salió?.... seguro que es su verdadero nombre o es su alías?

- Es su verdadero nombre..... solo que es escocés y viene de una antigua y muy adinerada familia, de hecho un antepasado suyo fue Lord o Conde, no recuerdo muy bien.

Violet sacó de inmediato su teléfono, si era tan famoso habría algo de él en las r************* o en internet, no tenía idea como se escribía ese extraño apellido pero supuso que el buscador se encargaría del resto.

Y efectivamente, Person Galloway no tardó en aparecer en primer lugar de su búsqueda, era un hombre un poco mayor, según su biografía tenía 47 años, si era una diferencia de edad de 24 años, pero aún podía moverse y eso era lo único que le importaba, era un hombre atractivo, nada que a ella le gustara pero tenía su galanura.

Pearson era un hombre varonil, eso Violet no lo discutía, a pesar de su cabello color castaño claro ligeramente largo, sus ojos eran de un color verde claro un tanto grisáceo, labios delgados pero bien marcados y una mandíbula prominente pero definida, en general tenía ese aspecto de hombre rudo que ella imaginaba en un escocés.

- Y por qué quiere una esposa con tanta desesperación?- Virginia volvió a preguntar mientras Violet seguía navegando tratando de conocer lo más posible sobre Pearson para poder tomar una decisión.

- No lo sé.....lo que te he dicho es lo que escuché en la reunión del viernes, al parecer tu hermano sabe más al respecto.

- Esta deforme?!- cuestionó la mujer intentando comprender la necesidad que lo obligaba a buscar una esposa bajo esas condiciones.

- No.....de hecho es un hombre relativamente joven, he escuchado de él porque es el autor del momento.

- Qué edad tiene?

- Cuare.....cuarenta y siete años- repuso William un poco cauto porque sabía que su esposa pondría el grito en el cielo.

- Qué?!- y no se equivocó- es mayor que tú..... podría ser el padre de Violet....no...no....esto....no.....por supuesto que no!!!- aclaró muy molesta, y bueno solo era un par de años mayor que su esposo y tres más que ella.

- Y qué propones que hagamos?!- William estaba ya un poco cansado y muy frustrado de la situación que los había estado agobiando los últimos 12 meses, algo que tanto Violet como Virginia ignoraban pues él trató de resolverlo solo para no preocuparlas pero llegó un punto en el que no pudo ocultarlo más.

Pero simplemente ya no había más opción que casar a su hija o terminar en la ruina total y absoluta, y de haber tenido más alternativas no hubiera recurrido a algo tan cuestionable, sin embargo conocía a su hija y a su esposa, y sabía que no iban a tolerar un cambio de vida tan radical.

- No...no....no....esto....no.....debe haber algo más..... entiende, además Violet.....ella nunca.....no.....

- Perderemos todo!- aclaró William para que su esposa fuera consciente de la situación.

- Entonces..... tendremos que.....aceptarlo!!- repuso Virginia no muy convencida.

- Lo haré.....me casaré con ese hombre!!!- Violet entró abruptamente a la recámara de sus padres, no había tiempo para más consideraciones y no había más alternativas.

Ella sabía que su padre tenía razón y perder su estilo de vida no era una opción, al menos no para ella, así que haría lo necesario pero no arriesgaria lo poco que les quedaba y peor aún, no se arriesgaria a perder a Stephen o ser la comidilla de sus amistades.

- Lo hare!!!- repitió dejando perplejos a sus padres.

- Violet, por qué entras de ese modo?!- cuestionó Virginia intentando ignorar lo que su hija acababa de expresar- olvidaste tus modales?!.......sal por favor!

- No me trates como una niña...... escuchaste lo que dije, lo haré......me casaré con ese hombre.....me casaré con Pearson Galloway!!!- expresó Violet con tanta determinación que verdaderamente dejó sin palabras a sus padres.

- Violet, no sabes lo que estás diciendo...... además no deberías estar escuchando pláticas ajenas, ahora por favor sal!!- indicó Virginia con mucha seriedad.

- Sé perfectamente lo que estoy diciendo..... acabo de decir que me casaré con ese hombre!!!

- El matrimonio no es un juego cariño, es algo serio y muy difícil, imagínate si es así cuando estas enamorada, cómo crees que será cuando te cases con alguien a quien no amas?!, esto no es como comprar una bolsa, no hay devoluciones!!!- sentenció su madre para hacerla caer en la complicada realidad que acarreaba un matrimonio.

- Lo sé, estoy consciente pero no podemos perderlo todo, y si ese es el camino que nos queda......lo tomaré!!- Violet caminó hacia donde se encontraba su padre- arreglalo todo lo antes posible......habla con ese hombre y dile que acepto su propuesta!!

- Princesa- William conocía a su hija y sabía perfectamente lo testaruda que era cuando algo se le metia en la cabeza y aunque se alegraba que Violet estuviera dispuesta, antes tenía que hacerla ver la realidad-debes entender que esto no es solo decir acepto y ya, hay que saber que condiciones esta poniendo ese hombre y si nos convienen a nosotros...... además y más importante aún hay que conocer qué tipo de matrimonio esta buscando y que es lo que quiere que pase en el lapso pactado!

- Pues averigualo!!!- respondió Violet con suma determinación.

- No te vas a casar con ese hombre!- sentenció Virginia intentando controlar los avances de su hija y su esposo.

- Entonces prefieres que lo perdamos todo?, porque yo no......yo no pienso ser la comidilla de mis amistades o terminar viviendo bajo un puente cuando tenemos una gran oportunidad frente a nosotros!!!!

- Y ya has pensado si acaso ese hombre quiere tener un matrimonio normal?!, estas dispuesta a asumir tu papel de esposa con todo lo que implica?!- aclaró Virginia y era cierto, Violet no había considerado la posibilidad de que Pearson quisiera acostarse con ella.

La joven guardó silencio, sus arrebatos y desesperación la orillaron a aceptar una propuesta cuya verdadera naturaleza desconocía pero aún así no pensaba asumir el riesgo, si tenía que acostarse con Pearson Galloway un par de veces lo haría, ante la posibilidad de perderlo todo, dormir con un perfecto extraño no parecia tan malo, aunque claro eso no pensaba decirselo a Stephen y mucho menos aceptarlo frente a su madre que enloquecería.

- No....no lo consideré pero podemos averiguarlo- aclaro fingiendo sentirse contrariada y un tanto ofendida a pesar de que ya estaba decidida.

- Ves, deberías pensar mejor las cosas!- sentenció Virginia creyendo que su hija estaba siendo razonable.

- Y mientras nosotros pensamos a ese hombre alguien más ya le dijo que sí.......habla con mi tío y que te de toda la información- pidió la joven a su padre.

- Violet, no!!!......debemos pensar que.....

- No hay nada más que pensar mamá, me voy a casar con ese hombre si el trato me conviene......y entre más pronto lo hagamos mejor!- sentenció Violet muy firme.

Su padre asintió y tomó el telefono, obviamente su esposa no estaba nada convencida pero al menos deberían considerar la posibilidad de que esto pudiera ser un salvavidas a sus alarmantes problemas economicos.

- William, no!!!!- Virginia estaba muy ansiosa, la decisión que tomaba su hija no era tan mala si la pensaba friamente pero no dejaba de sentirse incómoda, para ella era como venderla, y en cierto punto tenía razón, así que tomó la ultima posibilidad para hacer cambiar a Violet de opinión- ya pensaste qué va a decir Stephen?.......no creo que él este muy de acuerdo con esto!!!

Violet volteó a ver a su madre y William se detuvo antes de marcar el ultimo digito, este era un punto de quiebre pues toda la familia sabía del amor de esos dos y de lo profundo que era, así que si la joven no se retractaba con eso nada la haría cambiar de opinion ya.

- Yo me encargaré de eso.....además solo estamos averiguando sobre un posible trato!- repuso Violet con mucha firmeza aunque por dentro el miedo de perder a Stephen la atormentaba.

Virginia se quedó sin palabras, y efectivamente ya no había nada que hacer, Violet ya estaba más que decidida así que William continuó con la llamada, el tío Scott, hermano de Virginia, no sabía más que ellos, lo único que pudo proporcionarles fue el número de contacto del abogado del hombre en cuestión pues fue gracias a él que se enteró de la propuesta.

- Tendremos que comunicarnos directamente con un conocido, amigo del abogado de Pearson.......así que estas segura?!- cuestionó William y su hija guardó silencio por un instante, vió el semblante de sus padres, vió a su madre que con la mirada le rogaba que no lo hiciera y vió a su padre aparentemente impasible, aunque el hombre ya no se sentía muy cómodo.

Violet simplemente asintió con una abrumante calma, a pesar de que se estaba muriendo de los nervios y la carcomía el temor por la actitud de Stephen, pero le aterraba más perder su vida como la había conocido hasta hoy, por lo que William no tuvo más alternativa que marcar el número del abogado, amigo de su cuñado quien le había comentado al respecto, solo esperaba que algo bueno saliera de todo eso porque ya ni siquiera se podían dar el lujo de hacer tantas innecesarias llamadas.

Las mujeres aguardaron expectantes, Virginia y Violet no le quitaban la vista de encima a William, todo dependía de esa llamada y de que nadie más hubiera sido seleccionada, afortunadamente por los gestos del hombre supieron que había una posibilidad, pero antes de festejar necesitaban saber bajo que condiciones sería viable.

- Y bien?!- Violet se apresuró a cuestionar apenas su papá colgó el teléfono.

- Al parecer aún sigue buscando esposa.....- Virginia negó con la cabeza a pesar de saber que era ya su única alternativa, en cambio Violet se mostró muy complacida- pero él no sabe más al respecto.....

- Y entonces?!- preguntó muy alterada la joven.

- Me prometió averiguar más con el buffet del abogado en Glasgow y en cuanto sepa algo al respecto prometio llamarnos......por ahora solo queda aguardar!!!

William respuso algo desanimado pero no había más alternativa que esperar lo mejor, después de todo ya no podía hacer nada más y su situación ya no podía más que empeorar.

Afortunadamente para la familia, Person Galloway seguia buscando una esposa con premura, tenía menos de seis meses para poder encontrar a una mujer adecuada que le ayudará a resguardar su fortuna de la avariciosa familia de su difunta esposa, y no es que le importara mucho el dinero en realidad, lo que en verdad le preocupaba era que terminaran dilapidando todo y que su patrimonio fuera reducido a cenizas.

Y como suelen decir por ahí, a situaciones desesperadas, medidas desesperadas, así que no le quedó más alternativa que tomar muy en serio la propuesta que su mejor amigo, abogado y esposo de su editora, Edgar, le hizo una tarde de copas.

Edgar había bromeado con la posibilidad de que se casara con alguien y así evitaba que las hienas de su familia política terminarán quitándole todo, algo que inicialmente fue solo un chiste que provocó la risa de ambos hasta que en medio de la broma comenzaron a considerarlo seriamente.

Después de todo no era algo tan descabellado si se aseguraban de mantener ciertas cláusulas claro esta, así que la broma rápidamente se convirtió en una necesidad.

- Person!!- habló Edgar llegando hasta el elegante jardín del majestuoso palacete dónde el hombre tomaba su whisky de la tarde, él volteó a verlo de inmediato con esa penetrante y enigmática mirada que lo caracterizaba.

- Me preguntaba por qué no habías llegado a verme...- respondió de lo más tranquilo levantando su copa hacia su amigo.

- No sabía que necesitabas verme con frecuencia pero si ese es el caso, descuida, estaré aquí más seguido- repuso Edgar mientras se sentaba frente a Person.

- En realidad una vez a la semana es más que suficiente para mí.

- Deberías ser más agradecido, si no fuera por mí o Pamela, vivirias aquí completamente solo y aislado del mundo.

- Eso me funciona perfectamente.

- Diablos Pearson!, en realidad esa aura enigmatica y melancólica esta bien para vender libros pero vivir como un ermitaño, no te parece que es llevar esto demasiado lejos?!

- No es una pose....no para mí, hay escritores que lo hacen para sentirse a nivel de Poe, pero yo prefiero esto- expresó tranquilamente señalando a su alrededor haciendo notoria la abrumante calma y silencio del palacete.

- Y aún así no es sano.....pero hemos tenido esta conversación por más de 10 años y nada te hace cambiar de opinión......no tiene caso!!!

- Efectivamente, no tiene caso.......así que no creo prudente seguir con esta conversación!!!- aclaró Pearson sirviendole a su amigo una copa de whisky.

Edgar no dijo más al respecto en realidad ya le había cansado intentar convencer a su amigo de tener una vida social más activa pero como todos los escritores tenía sus manías así que era mejor continuar con lo que era su interes principal.

- Como digas, en fin......en realidad vine a verte porque tengo a una excelente candidata.... investigué y cumple con todas tus exigencias, creo que si podemos llegar a un acuerdo ella sería tu mejor alternativa- indicó Edgar en un susurro, esperando que finalmente Pearson se decidiera.

- Por qué hablas tan bajo?......estamos solos por si no lo has notado.

- En este lugar......nunca estamos solos, siempre hay alguien que vigila, tú mejor que nadie debería saberlo.

- Como quieras......pero sigues con eso?- cuestionó tomando un trago de whisky.

- Fue lo que pediste!

- Pero no has encontrado a la indicada...... después de tres meses!

- En realidad tú no has encontrado quien satisfaga tus exigencias, pero hay muy buenas opciones que podrían serte de utilidad.

- No hables de ese modo, por favor- exclamó Pearson con seriedad- no hables así.......no estamos comprando un automóvil!!- en realidad él se sentía muy incómodo pero dadas las circunstancias no había encontrado otra alternativa.

Edgar volvió a negar con la cabeza mientras se sentaba frente a su amigo, en realidad no entendía por qué Pearson seguía tratando de disfrazar el asunto, si, probablemente no se trataba de un automóvil pero lo que hacían era una transacción finalmente.

- Bien- aceptó pues quizás eso haría más fácil su trabajo- un contacto de Glasgow me llamó para avisarme que había unas personas interesadas en el trato y creo que son una gran alternativa, en realidad de todas las candidatas que hemos revisado esta es muy viable....... averigüé un poco más de su familia y resultaria bastante benéfico para nosotros si logramos negociar a nuestro favor.

- Y de quién se trata?!- cuestionó Pearson sin mucho afán.

- Es una mujer de una buena familia, una familia rica de Estados Unidos, mejor dicho de California.

- No.....no......no, será mejor que sigas buscando- repuso Pearson interrumpiendo a su amigo- no es una opción..... definitivamente no lo es!- aclaró enfáticamente.

- Qué?!..... por qué?!- cuestionó sumamente confundido.

- Es estadounidense y no pienso casarme con una estadounidense.

- Pediste que no fuera de Escocia ni de Inglaterra y ella no lo es.....de hecho vive suficientemente alejada de esto.

- Lo sé, sé donde queda Estados Unidos pero no pienso casarme con una americana.

- Técnicamente es norteamérica- Pearson volteó a ver a Edgar por su evidente sarcasmo pero así era su relación.

- Y eso no cambia en nada..... será mejor que sigas buscando porque no me voy a casar con una norteamericana...... no....... no pienso tener aquí a una arrogante, malcriada y mimada americana..... prefiero sufrir con la cirugía.

- Y ese es todo tu argumento?

- Es suficiente, no te parece?....... ya es demasiado para mi este absurdo y repulsivo trato como para tener que aguantar los desplantes y berrinches de una mujer que se cree superior a los demás solo por el lugar donde nació....... así que no deberías seguir perdiendo tu tiempo y mejor ponte a buscar.

- Podrías dejar de comportarte como un estirado e intransigente escocés y escuchar lo que tengo que decir.

Pearson sabía que nada que dijera su amigo lo haría cambiar de opinión pero era mejor dejar que el hombre dijera lo que tuviera que decir, tal vez así le daría algo de paz, por lo que simplemente hizo un ademán con la mano mientras se giraba hacia el jardín y tomaba su whisky.

- De acuerdo.....hum......esta mujer proviene de una familia acomodada, de hecho tienen una importante editorial sin embargo han tenido problemas economicos y aparentemente nadie ha querido invertir con ellos, se enteraron de este trato por un contacto y se comunicaron para averiguar más al respecto.....creo bajo sus circunstancias podemos negociar las cláusulas y sería benéfico para nosotros.

- En primera ya te dije que no hables de ese modo, no estamos comprando algo, no importa los motivos que la estén orillando a hacer esto, sigue siendo un ser humano!!- exclamó Pearson un poco molesto y asqueado por ser parte de algo que lo incomodaba de sobre manera- en segundo lugar......no es necesario que continúes.....no voy a aceptar, por supuesto que no.....no.......no!!!- sentenció con firmeza al sospechar a dónde se dirigía la conversación y no estaba dispuesto a que lo obligaran a publicar con ellos, eso se sobre entendía de inmediato al ser una editorial y él uno de los más reconocidos autores tratarían de aprovechar su situación usando su fama y obtener reconocimiento, era una criatura de hábitos y le agradaba poder decidir que hacer con su trabajo, sin imposiciones y exigencias.

Edgar miro con cansancio a su amigo, en verdad no importaba que usará palabras elegantes para referirse a este asunto, al final si era una transacción de negocios aunque a Pearson le pesara admitirlo.

- Será mejor que sigas buscando!

- Llevamos tres meses buscando y ninguna parece complacerte, mejor admite que no quieres hacerlo y evitame perder mi tiempo, no eres mi único cliente Pearson.

- Y si esa es tu mejor alternativa, quizas sea preferible morir!

- No digas idioteces.....no vas a morir y lo sabes!

- Acaso no escuchaste lo que el médico dijo, claramente expresó que esta cirugía tenía un de 55% de riesgo de muerte.

- Si y un 45% de éxito, no lo olvides, además en tu caso particular la expectativa fue mayor..... así que no seas dramático!- repuso Edgar con cansancio.

- De cualquier modo hay un riesgo!!- refutó Pearson- y eso en realidad no importa, no estás aquí para discutir sobre mi salud.....lo único que quiero saber es qué vas a hacer para resolver este inconveniente.

Edgar se dejó caer en su silla mientras tomaba la licorera de Pearson para servirse otro trago

- Nada- dijo muy tranquilamente el abogado.

- Qué?!- Pearson cuestionó deteniendo su vaso frente a sus labios- cómo que no piensas hacer nada?.... entonces para qué te pago?

- Como escuchaste, no pienso hacer nada......ya hice todo lo que podía como tu amigo y abogado, no hay nada más que yo pueda hacer así que ahora todo depende de ti- Edgar dió un sorbo a su trago dándose el tiempo de disfrutar el incomparable sabor del licor- ahora tendrás que resolverlo tú, y como un último favor te aclaro que lo único que puedes hacer es dejarlo todo a la beneficencia y esperar, en el mejor de los casos, que la familia de tu difunta esposa no impugne el testamento para recuperar lo que por derecho les corresponde..... según ellos- Edgar puntualizó girando su vista hacia el tranquilo jardín iluminado con los últimos rayos del sol- solo recuerda que el tiempo no es tu aliado en este momento.

Pearson sabía que Edgar tenía razón, tenía menos de seis meses para realizarse la necesaria cirugía, tiempo que él mismo solicitó para dejar en orden sus asuntos por si algo más llegase a ocurrir, pues aunque los pronósticos estaban a su favor no quería confiarse y que todo aquello que le perteneció a su familia por generaciones y por lo que él mismo trabajó arduamente, terminará reducido a simples recuerdos.

Y fue justamente eso lo que lo obligó a tomar una decisión tan drástica y cuestionable, la familia de su difunta esposa seguía exigiendo que se les restituyera lo que según ellos les correspondía por derecho, creian tener poder sobre la fortuna de Pearson por el simple hecho de que ella no había dejado un testamento, aunque en realidad no hiciera mucha falta, sobre todo porque no poseía absolutamente nada, todo lo que alguna vez disfrutó fue por cortesía de su esposo y lo que llegó a obtener por mérito propio no eran más que mínimas propiedades que quedaron a nombre de Pearson como viudo, lo que por supuesto no le agrado a su familia.

De todo era consciente Pearson y era consciente también de que si llegaban a siquiera sospechar lo que estaba ocurriendo con su salud no tardarían en correr como buitres, ya lo habian acusado de suficientes atrocidades como para que si llegara a fallecer impugnaran su última voluntad, enfrascado a Edgar en un largo y costoso litigio que terminaría consumiendo gran parte de sus bienes, así que si, no tenía más alternativas.

- Esta bien......habla!- repuso Pearson sin más opción.

- En realidad ya no importa lo que pueda decirte......de cualquier manera no prestas atención- aclaró el abogado tomándose el último sorbo de whisky- ahora solo quiero disfrutar de un poco de paz- Pearson suspiro derrotado pero efectivamente el tiempo no era su aliado y no quería tener preocupaciones innecesarias cuando tuviera que internarse.

- Edgar- el hombre se giró hacia su amigo- te juro que tienes toda mi atención.....por favor!

El abogado lo miró de reojo pero tenían muchos años de amistad como para negarse a ayudarlo, además él estaba convencido que esto era la mejor opción para su amigo.

- Hum......de acuerdo......como te decía la familia esta pasando por un crisis económica y están muy interesados en este trato- Pearson volvió hacer una mueca de desagrado ante las palabras de su amigo pero no volvería a aclarar ese punto, al final, ya no importaba como le llamaran- creo que aceptaran lo que sea con tal de salvar su negocio y poder mantener su estilo de vida, así que la negociación será mucho más fácil que con alguien que no tiene nada que perder.

- Realmente crees que acepten así de fácil?- cuestionó Pearson incrédulo.

- Probablemente no, pero tampoco se pondrán muy exigente quizás solo......solo.....solo te pidan publicar con ellos- puntualizó Edgar un poco temeroso de que eso hiciera retroceder a su amigo- aunque bajo sus circunstancias con un libro.....se conformarán, qué opinas?

- No lo sé......no lo sé, me parece muy arriesgado, no creo que sea tan buena idea.

- En realidad no tienes que firmar nada aún.....podemos empezar averiguando que es lo que podrian pedir, solo es cuestión de hablar con ellos y sondear el terreno.........y si no nos conviene, no accedemos y ya.......no se pierde nada.

Edgar parecía muy confiado y seguro, lo cual le daba algo de tranquilidad a Pearson aunque en realidad él no quería hacer esto, se sentía muy incómodo consigo mismo, pues él no tenía planeado casarse de nuevo y mucho menos en estas circunstancias, sin embargo, la avaricia de su familia política era muy latente en su vida, en realidad todo se reducía a, o aceptar este matrimonio o a arriesgarse con la familia de su esposa.

Pearson lo consideró, y en realidad como Edgar decía, no haria daño averiguar un poco más al respecto, de cualquier modo el trato se llevaría a cabo en Escocia y aqui las leyes lo beneficiarían, además en este momento caminaba contra reloj, retrasar cualquier avance solo actuaba en su contra.

- Bien...... hagámoslo!