Volver a vivir, Sinopsis, capítulo 1 y capítulo 2

5002 Words
Volver a vivir *-. ¿Cómo cuando la vida se empeña en que todo sea sufrimiento? bueno, algo así pasa con Kendra Cooper, graduada, trabajadora y con un futuro prometedor, tiene circunstancias si, pero a pesar de que estas son un poco difíciles continúa, a pesar de todo confía en sus instintos. Kendra tiene unos padres maravillosos, un trabajo que no le agrada mucho por su despreciable jefa pero de igual manera trata de dar lo mejor de sí, tiene una amiga a la cual nunca abandona y viceversa, su amiga Gimena, esta es un poco más alegre que kendra, pero se entienden perfectamente. Kendra es una rubia hermosa, mientras que Gimena es morena con un físico que a cualquiera enamora, ambas tienen unos cuerpos perfectos y rompen corazones a su paso, ellas solo se enfocan en ellas, ir a tomar algo en algún bar o ir de compras, así pasan sus días y sienten que así estan bien, Gimena si tiene algo así como una relación pero aún no sabe si será sincera o no, solo ella tiene la decisión. *-. Kendra tiene que lidiar con un pasado, un pasado el cual quisiera borrar pero es imposible hacerlo si el pasado siempre esta presente, lo que más quiere es volver a vivir, volver a creer que el amor existe, que es real, pero se le hace un poco difícil, su pasado es algo doloroso, le entrego todo a un cobarde que solo jugo con ella, no hizo más que lastimarla y hacer que borrara de su mente toda posibilidad de volver a enamorarse. Ahora solo quiere salir con amigos como lo dije anteriormente, pasarla bien y luego continuar con su vida, sin compromisos y sin ataduras, lo que Kendra no sabe, es que la vida siempre nos depara lo que nunca esperamos y por eso, le pondrá a Stevens Anderson en su camino para demostrarle que a veces si vale la pena volver a enamorarse, darse una nueva oportunidad de amar. *-. Kendra esta a la defensiva, no cree en nada de las proposiciones que le hace Stevens, pero con el pasar de los días se dará cuenta que sí valdrá la pena todo lo que hará con su vida de ahora en adelante. *-. Solo espera no volver a cometer el mismo error que meses atrás, lo que más anhela ella es ser feliz de todas las maneras. Hablemos de Stevens. *-. Stevens Anderson, es el típico hombre empresario, millonario, no voy a decir que con un futuro prometedor porque ya lo tiene, un rompecorazones a su paso, es de buen fisico, alto, delgado y catire, esta soltero, un poco extraño tratándose de él, pero así es, esta soltero, eso si, si se le presenta una oportunidad con alguna mujer no la desaprovecha, dice que así pasa el estrés del trabajo, llevar una empresa no es nada fácil, acaba de regresar de un viaje de negocios y esta bastante agotado, igual debe continuar. Su vida cambiará también cuando conozca a la hermosa Kendra, cree que la tendrá fácil con ella, pero no será así, va a tener que hacer un gran esfuerzo o eso parece, Kendra lo vuelve loco apenas la ve por primera vez, y desde ese momento no parará hasta no conseguir lo que se propone con ella, lo cual es absolutamente todo. *-. Veremos que nos espera esta historia donde sus protagonistas son de mundos totalmente distintos, Stevens Kendra, Kendra Stevens, ¿Qué sucederá con ellos? acompañenme a ver como se desenvuelve todo en: Volver a vivir... Capítulo 1 Londres, Abril 2023 *-. Hoy espero que sea un buen día en el trabajo, cada día soporto menos a mi jefa, no veo la hora de emprender mi propio negocio, —paciencia, solo un poco más—, sí, solo un poco más, hoy me desperté mucho más temprano, tomaré una ducha y me iré a trabajar —ojos en blanco—, espero encontrarme con Gimena en la cafetería de siempre para desayunar, es la única que alegra mis días en el trabajo, como me hace reír con sus ocurrencias. Ya voy camino al trabajo, es relativamente cerca de mi apartamento, en coche es más rápido solo que muchas veces el tráfico no ayuda, veo mi móvil y tengo un mensaje de Gimena preguntando ¿dónde estoy? le doy una respuesta rápida de que ya estoy cerca y dejo el móvil, pasados cinco minutos llego a la cafetería y ahí la veo. - ¿Esperaste mucho? —la abrazo—. - No mucho, pero solo por eso cancelarás ambos desayunos. - Vale, no me cuesta mucho, hoy mis padres me pasaron mi mensualidad, tanto que les digo que no es necesario pero dicen que aún soy su niña pequeña. - ¿Qué haces con ese dinero? - Lo envío a una cuenta de ahorros que tengo, mis padres pensarán que me lo gasto, pero no es así, ese dinero no lo necesito y ellos lo saben, he trabajado bastante desde hace mucho y creeme que puedo vivir bien con lo que tengo. - ¡Oh claro! entiendo muy bien, que bueno eso, ¿Te irás hoy a casa de tus padres? - Claro, me iré de fiesta mañana y quiero descansar todo el día de ser posible. - Me alegro por ti. - ¿Tú qué harás? - Supongo que quedarme en casa, anoche la pase con Jeremy y no creo que nos veamos hasta que el vuelva a tener tiempo y tú no estarás —ojos en blanco, no soporto oírla hablar de ese chico, él no la quiere—. - Claro Jeremy, ven desayunemos y vamos a trabajar, se nos hará tarde. *-. Lo siento por Gimena quizás este siendo un poco injusta con ella, pero escuchar sus historias con ese muchacho ya me aburre un poco, ni cuenta se ha dado que no le estoy prestando atención en lo más mínimo, en realidad solo pienso en las cosas desagradables que me han pasado en estos días ¿Qué más me podría pasar? - Venga, vamos a trabajar o mi jefecita se molestará. - Si vamos ya. Más tarde en la oficina. *-. Estoy pasando todos los reportes que se me solicitan a diario y super concentrada, quiero que el día aquí en el trabajo se acabe pronto, me gusta mi trabajo, solo que mi jefa hace que sea incómodo y no soporto trabajar así... - Hola Kendra, necesito que vayas a revisar la producción y a ver cómo va todo en el área —dice esta sin siquiera dar los buenos días—. - Claro, ya voy —le digo y trato de sonar lo más serena posible—. *-. Algo tan mínimo, no entiendo como no puede hacerlo ella. Este piso es muy ruidoso debido a la maquinaría, cada vez que vengo aquí me estreso mucho y es donde entiendo por qué poco vienen los empleados aquí, no entiendo como trabajan con tanto calor que hace aquí, ¡Oh vaya! ¿Y ese quién es? —concentrate Kendra, estas trabajando y no debes pensar cosas— lo sé, pero ese tipo esta buenísimo, no lo había visto nunca, pero tienes razón conciencia, tengo muchas cosas por las cuales preocuparme en este momento, mejor regreso a la oficina, ya hice mi trabajo aquí. *-. ¿Por qué no puedo dejar de pensar en ese hombre? si ya se que es lindo, bueno, lindo no, esta guapísimo y atrae pero quizás ni me determine, se que a muchos dejo sin respiración pero no creo que este haya sido el caso, creo que lo mejor será que me concentre en mi trabajo y terminar estos reportes antes de que mi hermosa jefa venga a pedirlos, cada día la soporto menos de verdad. - Kendra, ¿Me acompañas un momento? - ¿A Dónde Gimena? - A la oficina de Reclutamiento, necesito llevar unos documentos. - ¿No puedes ir sola? - Si, pero no quiero, siento que al pasar esas mujeres me destruyen solo con la mirada y es intimidante, si voy contigo será diferente. - ¿Soy tu escudo? —pregunto alzando una ceja—. - No tonta, pero es mejor si voy contigo, anda ya, vamos. - Bien, vamos —salimos de la oficina y subimos al siguiente piso, mientras esperamos veo pasar nuevamente al guapísimo hombre que vi hace un rato— me gusta. - ¿De quién hablas? - El hombre que acaba de pasar —digo mirando mi móvil—. - ¿Ese? - Si Gimena ese mismo. - Si, ese que viene nuevamente hacía aca. - Me muero, ¿Es enserio? - Pues muerete, presiento que te escucho —me dice entre susurros—. - Hola guapas, ¿Qué las trae por aquí? - Vinimos a traer unos documentos pero como siempre se tardan para recibirnos. - ¿Qué tanto se tardan? —pregunta achinando un poco los ojos—. - Aquí fácilmente perdemos hasta quince minutos —continúa Gimena—. - ¡Que mal! —abre mucho los ojos—. - Así es, ¿Y tú quién eres? Mi amiga Kendra tiene curiosidad por saberlo. - Hola Kendra —me dice—, si me aceptas un café te diré quien soy —sonríe de medio lado y se ve más hermoso aún—. - Sí claro —respondo con sarcasmo, le quito los documentos a Gimena y la dejo sola con don egocéntrico, ha de ser que le cuesta mucho decir su nombre, idiota, entro a la oficina de reclutamiento sin volver a tocar, entrego los papeles y me retiro de muy mala manera— ¿Nos vamos Gimena? - Claro —esta muy sonriente con su amigo y siento un poco de irá—, adiós. - Fue un placer Gimena, recuerda lo que hablamos, espero que eso se de muy pronto. - Cuenta con eso —caminamos rumbo a las escaleras, no quiero usar ascensor—. Eso fue muy fácil. - ¿A qué te refieres? - En un rato lo sabrás —me guiña un ojo—. - ¿Qué hiciste? - Nada, sigamos trabajando. *-. Horas después aún no se a que se refería Gimena, ya que no quiso decirme nada más, no dejo de pensar en ese hombre, aún ni se quién es, nunca lo había visto aquí en el edificio y es lo que más me intriga, bueno, ya lo sabré. Ya es hora de irme a casa, anhelaba este momento. - Vamonos Gimena, es hora y mi camino es largo. - ¿De verdad te vas a casa de tus papás? - Si, ¿Cuántas veces te lo voy a decir? - Pensé que bromeabas. - No, no lo hacía, vamos ya. - Me alegra que vayas a distraerte, lo necesitas. - Gracias, te quiero tanto. - Pasala bien, y usa protección. - Gimena por Dios. - Aja, te puedo asegurar que te verás con Bastián. - Si pues, posiblemente. - Vamos, ¿me dejas en mi casa al menos? - Claro. *-. Salimos de la oficina y nos dirigimos al ascensor, cuando vamos al estacionamiento recibe una llamada y se emociona, ya me imagino quién es, la verdad no sé qué es lo que le ve a ese chico, tantas veces se lo he dicho y es como si tuviese un hechizo, sólo tiene ojos y oídos para él, –es porque tú no te haz enamorado— si posiblemente sea por eso, y porque ya he pasado por tantas cosas que siento que todo son iguales, todos dicen lo mismo y es lo que me ha mantenido así como estoy, alejada de la mentira de los hombres, igual con Bastián estoy bien. - Jeremy pasará por mí, —me dice guardando su móvil—, gracias de todas maneras, te veo el lunes, pasala muy bien, saludame a los viejos. - Así lo haré, te quiero, cuidate mucho y piensa en todas las cosas que te he dicho. - Vale, lo pensaré, adiós. - Es lo que siempre me dices y nunca lo haces, ¿hasta cuándo tendrás esa venda? sabes que no te lo digo por nada malo, pero él no te quiere como tú lo quieres y bien lo sabes. - Déjame disfrutarlo ¿sí? - Vas a salir lastimada y lo sabes. - Trataré de que no sea así. - Te quiero como una hermana y lo sabes, no quiero que eso acabe mal. - Espero que no, yo te quiero aún más tonta. - Anda, no vayas a hacer esperar a tu príncipe. - Sarcástica. - Siempre. *-. La abrazo y me despido de ella, subo a mi coche y arranco de una rumbo a mi casa, lo bueno es que no hay tráfico, es extraño hoy viernes pero mejor, así llegaré más rápido a casa, suena mi móvil, no tengo idea de quién podrá ser debido a que no tengo el número registrado, dudo en contestar pero al final lo hago, contesto y uso el manos libres del coche. ¿Bueno? ¿Kendra? Si, ¿Quién es? Tu jefe —esa voz, pero no, tengo esa voz metida en la cabeza—. Yo no tengo jefe, tengo jefa. Pues tienes un jefe y soy yo, me hubiese gustado presentarme de otra manera, pero eres muy odiosa al menos tu amiga es más agradable que tú —no puede ser—, mucho gusto preciosa, Stevens Anderson, dueño de Empresas Anderson —no puede ser—. ¿No me diga qué...? Así es, tu amiga me regalo tu número —la matmataré mataré—. No me parece correcto. Por favor, culpame de todo lo que quieras, Gimena solo quiso colaborar conmigo. Ya veo. ¿Aceptas un café conmigo? No lo sé, es fin de semana y voy saliendo de la ciudad. Cuando regreses, no tengo problemas en esperar, ó también puedo llegar a donde vayas a estar si deseas. No, cuando regrese a la ciudad sacaré tiempo, todo depende de mi jefa. De ella me puedo encargar yo. Claro, me imagino —ojos en blanco—, estaré de regreso el lunes, quizás entre semana podremos tomarnos el café. Me parece bien, esperaré con ansias ese momento. Okey, ahora si me permite señor Anderson, voy al volante. Te llamaré luego preciosa. Vale señor Anderson adiós. *-. Respiro, esa llamada si que no la esperaba, estoy totalmente sorprendida y con ganas de matar a Gimena, con razón tantas sonrisas con él y ahora resulta que es el dueño de la empresa donde trabajo, Vamos Kendra, puedes manejar esto okey, de momento, concentrate en el camino y en el fin de semana que tienes, no permitas que nada te afecte tus planes. *-. El camino se me hizo largo pero al fin llegue a casa, como siempre, me olvidaré del mundo y me concentraré en lo realmente importante, como ya es tarde, primero tomaré una ducha, luego hablaré con mis padres y quizás más tarde comeré algo —si, tengo muy mal comer— estoy bastante agotada así que hablaré poco con mis padres y me iré a la cama, me entenderán. Como dije, hablé poco con ellos y mi mismo padre me mando a la cama porque dice que se nota mi agotamiento y pues no lo discutí. *-. El tiempo pasa rápido cuando de descansar se trata, apenas cerre los ojos y al abrirlos resulta que ya amaneció, ¡que fastidio! lo bueno de todo es el lugar donde me encuentro y el maravilloso día que tengo por delante, mejor me saldré de la cama antes de que se haga tarde. - Buenos días. - Hola mamá, papá, buenos días. - Hola hijita, ¿Dormiste bien? ¿Estás menos cansada? - Si papá, creo que descanse lo suficiente como para ejecutar todos los planes que tememos para hoy. - Perfecto, ¿Qué te parece si iniciamos con el desayuno? - Excelente idea papá, pero antes le haré una llamada a Paola. *-. Paola es mi hermana, la veo muy poco por mi trabajo y porque ella vive con su esposo algo lejos de la ciudad, también tengo un hermano al cual tengo mucho más tiempo sin ver ya que esta en otro país, a ambos los quiero y los extraño tanto, después de un rato contesta la llamada, si que se tarda, muy normal. ¿Bueno? Hola hermanita, ¿Cómo éstas? Bien, aquí que voy camino a casa de nuestros papás. Que alegría escuchar eso, yo estoy aquí, nos vemos al rato ¿Vale? Claro, nos vemos al rato. *-. La conversación fue breve ya que me tomo por sorpresa, no tenía ni idea de que vendría a casa. - Bueno papá, ¿Por dónde empezamos? - Empecemos por tí, te noto triste, ¿Aún es por lo de aquel muchacho? ¿Por qué no lo buscas? - No papá, ya es pasado, aún lo estoy superando sí, pero es parte del pasado y no quiero volver a verlo ni saber nada más de él. - Hija por Dios, escucha a tu padre, la tristeza te esta consumiendo, estás más delgada que nunca. - Ya basta mamá, papá, lo superaré ¿Vale? - Esta bien hija, no nos gusta verte así. - Lo sé papá, lo sé, pero ya pasará. - Bueno basta, vamos a la hacienda, hay cosas que hacer —agrega mi madre—. - Si vamos ya que las horas pasan y debo regresar temprano para hacer un par de llamadas, quiero salir a divertirme hoy. - Creo que tendremos que dejar lo de la hacienda para más tarde, tu hermana acaba de enviar un mensaje y dice que ya esta llegando. - Vale mamá, iré a la cama un rato, avisame cuando llegue Paola. - Anda, necesitas descansar. - Te quiero mamá —la beso y la abrazo—. - Y yo a ti, melosa —reímos—. *-. ¿En qué momento pasó tanto tiempo? necesito unas vacaciones urgente, de verdad estoy agotada. - Mamá ¿Por qué me dejaste dormir tanto? - ¡Ay hija! te note tan cansada que no te quise molestar. - Bueno mamá esta bien, ¿Mi hermana? - En su habitación, dijo que la buscarás allí. - Vale ya voy. *-. Camino a la habitación de mi hermana, extrañaba tanto a mi familia, estar con ellos llena ese vacío dentro de mí, existen momentos en los que quisiera ser niña nuevamente, pero bueno, todo es un proceso y crecer y sufrir es parte de ese proceso. - Hermana, que alegría verte. - Estás muy flaca ¿Qué te pasa? - Vaya manera de saludar. - Lo siento —me abraza—, me preocupas. - Estoy bien ¿Vale? —miento—. - ¿Estás así por Tony verdad? - Si, pero ya lo superaré, nuestra ruptura esta muy recién pero ya pasará. - ¿Recién? por el amor de Dios Kendra, han pasado casi seis meses, ya es momento de que vuelvas a hacer tu vida y olvides a ese imbécil. - Lo haré de verdad, pero hablemos de ti, ¿Qué tal tu vida y el nuevo lugar dónde vives? - Es perfecto Kendra, todo es perfecto, tienes que ir, te va a encantar y eso lo sé muy bien, ¡Ah por cierto! estoy embarazada, estoy tan feliz —felicidad plena la que siente mi corazón—. - Nena, me haces tan feliz, al fin algo de alegría para mí. - Lo imagine, nuestros padres estan iguales. - Yo también lo estoy, no te imaginas cuanto. - Bueno, cuéntame ¿Qué tal el trabajo? ¿Aún tu jefa sigue de pesada? - El trabajo genial, sabes que lo único malo en él , es mi jefa, cada día es peor y pues si te contará, conocí a un nuevo chico, el tipo esta buenísimo, pero resulta que es el jefazo. - Esa mujer me cae mal, y ¿Cómo que el jefazo? - Es una historia un poco larga, ya te contaré, solo se que es el dueño de la empresa, y no se por qué, pero se fijo en mi. - ¿Me estás hablando enserio? - Si, es hermoso. - Cuentame un poco más ¿Cómo se llama? ¿Cómo coincidieron? - Se llama Stevens, Stevens Anderson, es guapísimo ya te lo dije, y lo vi en la empresa, Gimena noto que yo lo miraba y le dio mi número sin mi consentimiento y cuando venía de camino para acá recibí una llamada y era él, me invito a tomar un café. - ¿Aceptaste? - Sí, es una historia larga. - Venga, tenemos todo el fin de semana. Capítulo 2 *-. Darle todos los detalles a mi hermana no fue nada fácil, ella saca conclusiones donde no las hay. - Entonces, ¿Te gusta? - No es que me guste, me atrae, es que si lo vieras Paola hasta tú quedarías atraída. - Solo tengo ojos para Damián. - ¡Oh disculpa! - Ve y toma ese café con él y luego que pase lo que tenga que pasar, eso sí, no permitas que te haga sufrir. - Eso no lo permitiré. - Eso espero, vamos con mamá. *-. Sufrir no está en mis planes, no otra vez, pero el destino es tan predecible que no lo sé en realidad, pero evitaré a cualquier costo volver a llorar. - Mamá ¿Iremos a la hacienda o no? —pregunta Paola—. - No sé hijas, decidan ustedes, aún son las tres de la tarde, si vamos solo pasaremos allí un par de horas. - No importa madre, vamos. - Está bien, en cinco minutos nos vamos. *-. El camino a la hacienda es corto y papá se nos adelantó como siempre, dice que somos lentas, este lugar nunca cambia, siempre tan lindo y maravilloso, enamora, estar aquí me hace recordar cuando era niña y junto a mis hermanos corríamos todos los lugares, aquellos tiempos que no volverán. - Recuerdo todo como si fuese ayer cuando las veía a ustedes y a su hermano correr por toda la casa —dice mi madre sacándome de mis pensamientos—. - Vale mamá yo también lo recuerdo y la cara de papá al vernos reír todo el día era para morir —reímos—. - Tan bella mi familia, las amo tanto. - Y nosotras a ti madre. - Su padre siempre fue un gruñón y ahora que cada uno de ustedes se ha marchado como los extraña. - Las escuche, estan hablando de mi. - Sí papá, solo recuerdos —digo—. - Recuerdos que llevaremos siempre presente. - Recordar es trasladarnos nuevamente a esos maravillosos momentos. - Así es Paola, son momentos que no volverán pero siempre estarán. - Bueno, es hora de irnos a casa, hoy habrá una fiesta y no me la pienso perder, ¿Irás conmigo Kendra? - ¿No se supone qué estás embarazada? - Así es, pero eso no me impide ir a fiestas, ¿Vamos? - No lo sé, te avisaré. - Bueno, voy por mis cosas y nos vamos. - Iré por mi móvil que esta sonando —lo busco y contesto—. ¿Bueno? Hola, soy yo otra vez. Señor, ¿Cómo está? ¿Ahora soy señor? Así es. Entiendo, ¿Qué tal tú día? Mejor imposible —grito—. ¿Qué sucede? Nada, solo que a mi linda hermana le gusta hacer bromas. Claro me imagino, cuéntame de ti. ¿Qué desea saber? De ti me Interesa todo y más. ¡Vaya! ¿Eso por qué? Eres una mujer muy linda Kendra. Gracias. ¿Decidiste qué día tomarás el café conmigo? Cuando usted me diga. Soy Stevens Kendra. Vale. Tan pronto llegues el lunes te buscaré. Debo trabajar. Yo me encargo de eso —vuelvo a gritar—. ¿Otra broma? No, me caí —me quejo del dolor— ¡ah duele! Hoy debía ir a una fiesta —vuelvo a quejarme—. ¿Hey calma preciosa! untate algo para pasar el dolor, lo bueno es que no saldrás. Que gracioso. De verdad, así nadie podrá verte. ¿A qué viene eso? A nada, te contactaré luego, me despido. Adiós. *-. Y sin más corta la comunicación, eso sí que fue extraño, ¿Cómo que para que nadie me vea? ¿Qué rayos quiso decir? ¡Ah me duele el tobillo! lo tengo muy enrojecido e inflamado. - ¿Papá? —lo llamo ya que no puedo caminar sola— ¿papá? - Voy hija ¿Qué sucede? - Me caí y me duele mucho el pie. - ¡Oh Kendra! ¿Puedes caminar? - De momento sola no. - Ven te ayudaré —me ayuda a levantarme y me apoyo en él para caminar—, que tonta al caerme. - Esas cosas pasan hija. - Hermana ¿Qué te pasó? - Me caí tonta —ríe—. - Me lo perdí. - Paola, ¿No ves cómo está? - Si padre lo veo, Que tonta eres Kendra. - Tienes razón, no podré ir a la fiesta. - Yo te contaré todo si no vas. - Está bien, bailas por mí. - Seguro que sí. *-. Ya de regreso a casa mamá prepará una rica cena para degustar en familia, me veo el pie y está más inflamado, papá llamó al doctor Will y este acudió enseguida y me puso un vendaje, al menos ya no duele como hace un rato, pensé que me divertiría hoy pero veo que no, bueno me quedaré en casa con mis padres, un pitido de mi móvil me hace reaccionar, es un correo, espero no sea inoportuno. De: StevensAnderson@gmail.com Para: KendraCooper1@gmail.com Fecha: 25/04/2023 06:00 pm Asunto: Caída repentina. Buenas tardes señorita Cooper, ¿Cómo sigue del pequeño accidente? *-. ¡Muero! Leo el correo una y otra vez, ¿Será qué le respondo? Sí, lo haré. De: KendraCooper1@gmail.com Para: StevensAnderson@gmail.com Fecha: 25/04/2023 06:05 pm Asunto: Caída repentina (un poco dramática). Buenas tardes señor Anderson, está fatal, me duele para caminar, allí le adjuntaré una foto y usted deducirá, no podré ir a bailar (carita triste). *-. Envió el correo y siento muchos nervios. De: StevensAnderson@gmail.com Para: KendraCooper1@gmail.com Fecha: 25/04/2023 06:10 pm Asunto: Me encanta el dramatismo. Dejemos el formalismo, ¿Te parece? Ahora, me encanta el dramatismo, como quisquisiera estar allí para darte un masaje y consentirte, si que se ve mal. *-. Sorpresa total, pero que atrevido. De: KendraCooper1@gmail.com Para: StevensAnderson@gmail.com Fecha: 25/04/2023 06:15 pm Asunto: Atrevimiento total. Me parece perfecto que dejemos el formalismo. Es un poco atrevido pero en realidad me hace falta ese masaje. - ¿Muy entretenida? —llega mi hermana sobresaltandome—. - Así es Paola. - ¿Tu jefe? - ¿No puedo mentir? - No —ríe—. - Si es él, me atrae mucho ese hombre, pero solo para que me lleve a su cama y ya, nada serio. - Cuidado con lo que haces. - Confía en mí, todo estará bien. - Solo no quiero verte sufrir. - Eso no pasará. - Vale, me arreglaré para irme a la fiesta. - Vale, te quiero. - Y yo a ti —se marcha y reviso el correo—. De: StevensAnderson@gmail.com Para: KendraCooper1@gmail.com Fecha: 25/04/2023 06:18 pm Asunto: Consentimiento. Me gusta consentir y dar masajes, quiero volverte a ver. *-. ¡Oh no puede ser! —tapó mi boca con mi mano—. De: KendraCooper1@gmail.com Para: StevensAnderson@gmail.com Fecha: 25/04/2023 06:35 pm Asunto: ¿Volverme a ver? Mmmm, estamos iguales, por suerte, eres el dueño de la empresa para la cual trabajo, ya el lunes me verás nuevamente. De: StevensAnderson@gmail.com Para: KendraCooper1@gmail.com Fecha: 25/04/2023 06:43 pm Asunto: El lunes está lejos. ¿No podemos vernos mañana en la tarde? El lunes está muy lejos. *-. Solo esto me pasa a mi. De: KendraCooper1@gmail.com Para: StevensAnderson@gmail.com Fecha: 25/04/2023 06:50 pm Asunto: Grrr Si pudiera con gusto, no recuerdo si te dije que no estoy en la ciudad, estoy visitando a mis padres a los cuales tenía muchos días sin ver, regreso el lunes directo al trabajo. De: StevensAnderson@gmail.com Para: KendraCooper1@gmail.com Fecha: 25/04/2023 06:57 pm Asunto: Ese Grrrr me gusta. Me encanta, se que no estoy perdiendo mi tiempo contigo, y bueno, será el lunes que nos veamos, pero la salida sigue en pie, ¿Te parece bien si salimos el jueves? De: KendraCooper1@gmail.com Para: StevensAnderson@gmail.com Fecha: 25/04/2023 07:00 pm Asunto: Claro que sí. Vamos como rápido, pero esta bien, el lunes igual nos veremos y podremos conversar más antes de salir el día jueves. *-. No debo apresurar las cosas, mejor ir a mi ritmo —tu ritmo es solo un juego y ya— si, pero igual es rápido, bueno, es solo un café y nada más. De: StevensAnderson@gmail.com PPara: KendraCooper1@gmail.com Fecha: 25/04/2023 07:08 pm Asunto: ¡Perfecto! El lunes nos veremos y el jueves saldremos, más perfecto imposible. Bueno preciosa, te dejo descansar, espero que tu pie amanezca mejor, vete a la cama y sueña conmigo consintiéndote. *-. No le respondo ese último correo, pero, soñar, soñar y soñar, estoy soñando despierta con ese hombre desde que lo vi, esta noche será más larga para mí, por primera vez en meses me siento a gusto y no pienso en mi pasado. Mañana llamaré a Gimena y luego de reclamarle le agradeceré —río—, Paola ya está lista para irse de fiesta, pero antes cenaremos en familia, el pie aún me duele mucho y quería ver a Bastián mañana, bueno, lo voy a ver, para olvidarme de mi realidad por un rato. Después de cenar me despido de todos y me marcho a mi habitación donde tomo una ducha y decido ver una película mientras me duermo.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD