UN AÑO

390 Words
- ¿Qué haces? – pregunto a Katrina quien me sigue en su bicicleta rosa mientras corro por el jardín. - Acompañándote – responde ella regalándome una preciosa sonrisa. - Santiago – escucho a Sebastián por lo que nos volvemos a verlo corriendo hasta nosotros tomando en brazos a Katrina besando su mejilla – papá nos necesita. - Yo quiero ir – dice nuestra princesa mientras caminamos hasta la casa escuchándola hablar sobre sus amigos en el colegio. Cuando llegamos al estudio de nuestro padre intentamos dejarla fuera, pero ella nos convence con un puchero por lo que entramos los tres. - ¡PAPI!!! – grita Kat haciendo que Sebastián la baje para correr hasta papá quien la carga sentándola en sus piernas. - ¿Qué haces aquí amor? – pregunta nuestro padre observándola rebosante de amor. - Estaba conmigo cuando Sebastián me dijo que nos necesitabas – respondo sentándome en uno de los sillones que hay frente a su escritorio al igual que Sebastián. - Los hice venir porque voy a enviarlos a Corea del sur – nos sorprendemos ante lo que acabamos de escuchar. - ¿corea? ¿con el señor Wang? – pregunta Sebastián - Si, hice un trato con el señor Wang para que ustedes entrenen junto con sus hijos, los mellizos Wang Baek y Seri – responde nuestro padre – estarán allí un año. Dos semanas después Sebastián y yo aterrizamos en Seúl, observo a mi hermano quien se encuentra ansioso ya que los Wang son los más temidos en Asia. Al bajar del avión vemos algunos hombres que esperan por nosotros. Rápidamente nos subimos a la camioneta en la que nos llevan hasta la mansión Wang donde viviéremos el próximo año. Al llegar quedo sorprendo de la belleza del lugar, rápidamente nos guían por el hermoso lugar hasta el jardín donde se encuentra el señor Wang tomando té mientras lee el periódico. - Buenos días – saludamos al unísono - Los hermanos Rivera – dice él observándonos sonriente – acompáñenme – nos sentamos al tiempo que dos chicas del servicio ponen frente a nosotros una taza a cada uno para después servir el té. - Muchas gracias señor – decimos al unísono, pero cuando esta por hablar vemos que su sonrisa se ensancha al tiempo que escucho una hermosa voz. - Buenos días papá...
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD