Find Me

Capítulo 2

¿Alguna vez te has adelantado a decidir algo de lo que después no estas segura de querer?

Puedo ver como mi madre hace muecas raras mientras trata de preguntarme que acepte , simuló seguir la conversacion por telefono aunque ya varios segundos atras perdi la concentración en la misma, puedo escuchar la voz chillona de la mujer que sigue dando indicaciones acerca de cómo debo presentarme y los documentos que tengo que entregar para la correcta inscripción en las pasantías.Si soy sincera ni si quiera yo se que acabo de aceptar , la mujer se despide con un entusiasmo exagerado y un Bienvenida señorita Chloe. Exactamente en que estoy entrando ¿tan desesperada estaba para aceptar la primera opción que se cruzó? 

- Entonces ¿que acabas de aceptar? 

La voz de mamá suena unos decibeles más alto, debe sospechar que acabó la llamada porque la pantalla de mi celular ha vuelto a iluminarse así que sin mas dejo el móvil sobre la mesa.

- ¿Recuerdas las pasantías que Sean dijo que podria conseguirme en el banco?

Sé que recuerda las pasantías , de hecho también debe recordar que le dije a mi amigo que no se preocupara porque no iria a ningun lado mientras no pudiera asegurar que estaría con él.Cuando la relación avanzó y se puso seria, hablamos de tomar en alquiler un apartamento juntos y las pasantías que tomaramos serían cerca para poder asistir caminando y no gastar dinero en autobuses, supongo que hace parte de los muchos planes que no se llevarán a cabo. Sigo sin ser capaz de pensar en su nombre, en los últimos días he evitado al máximo mencionar algo alusivo a él , no considero justo que siga presente en mi vida cuando decidió que quería irse. 

- Las que hacían para reclutar personal para sus nuevas oficinas.

Me mira alzando más su ceja derecha , es su cara de incredulidad, suele hacerla siempre que hago algo de las que no entiende las razones , y creeme madre tampoco entiendo muy bien en esta ocasión. No pregunta, porque sabe que si son esas pasantías, de hecho son las pasantías que todo el mundo querría incluyendome sin embargo eso no elimina la incertidumbre hacia la decisión que acabo de tomar.

- ¿Qué ha pasado? 

En algún momento entre la conversación que interrumpi antes de llegar por el té que ahora debe estar helado y la llamada que recibí donde decidí en un atacazo mis dias proximos, mi padre se concentró en algún correo enviado por su jefe o algún w******p basura y se perdió de todo.

- Chloe acaba de aceptar las pasantías del banco central

Mamá lo dice mientras mueve los ojos como manteniendo una conversación tacita con papá, lo han hecho desde siempre , es como si con su boca pronunciara solo parte del mensaje y son sus ojos los que terminan de decir la parte más importante, y como si fuera ordinaria forma de comunicarnos papá entiende completamente lo que quiere decir su esposa y así mismo el también contesta. Ellos tienen ese tipo de magia que solo lees en los cuentos de princesas o en los libros románticos ,el tipo de magia que siempre he querido encontrar.

- Eso es fantástico 

Y eso ha sido todo lo que he necesitado a lo largo de mi vida para aventurarme hacia algo, ver ese brillo en los ojos color chocolate del definitivamente el mejor hombre que existe en el planeta tierra y probablemente en todo el universo es la inyección de valentía que me motiva a arriesgarme a cualquier cosa, cuando él decidió romperme el corazón no me hirió solo a mi, se llevó la tranquilidad de mis padres no solo soy yo quien ha sufrido estos 32 días, mis padres están sufriendo conmigo cada uno a su manera pero aun asi lo noto, noto como mamá está más callada y más seria, como papá se refugia frente al computador durante horas con la excusa de analizar datos que siendo sinceros no demoraria mas de unos minutos . 

Supongo que ver como tu hija cae debe ser desesperante y aun mas si ellos no pueden hacer nada para sacarla del pozo donde cae, porque pueden decirte miles de cosas pero nadie puede sacar de la miseria a quien no quiere salir de allí , y la verdad es que no quería salir de eso.

- Por eso ahora sería bueno que llamaras a Sean, le preguntes qué documentos debes llevar y aprovechar para invitarlo a cenar como agradecimiento.

Mi madre lo dice más como una orden que como una sugerencia.

- Creo que aun seguimos molestos el uno con el otro Ma.

Digo esto sin ser capaz de mirar a alguno de los presentes en la cocina, se que ninguno está de acuerdo con que mantenga el orgullo frente a la discusión mas idiota que pude mantener con mi mejor amigo desde el jardín de infancia.

- Chloe se que estas grande y tienes la facultad para tomar tus propias decisiones pero ¿enserio insistes en mantener una discusión sin sentido con una de las pocas personas que te apoyo cuando todo el mundo te dejo sola? Sean no es perfecto pero creo que no pudo haber dicho nada tan grave como para botar una amistad de años a la basura, aparte creo que ya se disculpó consiguiendo las pasantías a pesar de todo.

Mi madre tiene razón, nunca he sido una persona fácil y Sean siempre ha estado conmigo incluso cuando ni yo he querido estar.

- No se como hablarle Ma, esta vez creo que si la cague.

Siento la mano de mi padre en mi hombro

- Nada es tan grave cariño, a parte ese chico te perdonara todo con una hamburguesa.

Por primera vez en varios días me permito sonreír sinceramente sin obligarme a hacerlo , sonrío porque me nace porque me da tranquilidad que por lo menos él tampoco fue capaz de llevarse a mi mejor amigo.

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El centro comercial Olimpo siempre ha sido de mis favoritos, es grande lleno de mil tiendas donde puedes mirar tantos estilos de ropa como gustes, siempre está lleno de gente familias que desean pasar sus fines de semana juntos, parejas de jóvenes en sus primeras citas, otras no tan jóvenes que desean salir de rutina y salir en citas improvisadas, y lo más importante es uno de los pocos lugares que no visité con él por lo tanto no puede lastimarme los recuerdos de lo que hice o no a su lado.

La plazoleta de comidas está llena de mesas con personas sentadas comiendo o esperando el turno para recoger su pedido, es un espacio tan grande que me es imposible divisar desde las escaleras eléctricas donde esta mi amigo, siento vibrar el celular en el bolsillo del lado derecho del pantalón, no tengo necesidad de revisarlo porque se que es Sean escribiendo desesperado porque no he llegado porque voy varios minutos tarde y cuando está solo en un lugar lleno de gente se llena de ansiedad, aparte le da miedo no reconocerme de lejos porque tiene un nivel de miopía tan alto que aunque lleve puestos las grandes anteojos, anteojos que ha tenido que usar desde los dos años y por los que los niños del jardín eran crueles burlándose.

He recorrido un par de minutos entre las mesas cuando lo reconozco sentado a unos pasos del puesto de nuestra franquicia favorita de comida italiana, sin decir palabra alguno tomó asiento en la silla del frente.

- Lo siento, estoy esperando a alguien esa silla está ocupada.

Como raro Sean está más enfocado en sus celular que en el mundo exterior, aun después de estar a su lado más de 17 años no entiendo como puede ser tan brillante e idiota al tiempo.

- Hasta donde sabia ese alguien era yo, a no ser que le hayas escrito a alguno de tus amantes porque demore un par de segundos.

Sonrió en el instante en que deja el celular en la mesa y me mira abriendo los ojos impresionado, como si no reconociese quién diablos soy se quita los lentes, frota sus ojos y vuelve a ponerlos sin quitar su cara de sorpresa.

- ¿Que diablos te pasó en el cabello?

Casi lo había olvidado. Hace un par de días cuando no salí a tomar el té en leche matutino y el desayuno mi madre entró como una fiera a mi habitación para darme un regaño de porqué era importante comer lo que no esperaba encontrar era un montón de mechones de cabello tirados frente al espejo.

- ¿Te gusta?

Sean no pronuncia palabra y me causa un poco de ansiedad, se que es un gran cambio y después de desaparecer de su vista por algo más de dos meses aparecer con un nuevo look puede ser un poco shockeante pero debería decirme algo al respecto.

- ¿En serio es tan malo como para que no pronuncies palabra?

Sale de la conmoción en la que estaba y se refresca la garganta.

- ¡Dios! luces tan distinta

Por lo menos no dijo que me veía mal, aunque tampoco pronunció lo contrario.

- Te cortaste el cabello casi hasta los hombros, te dejo sola un par de días y decides verte como Dora la Exploradora.

Y ese es el Sean que conozco, se que le gusta como me veo aunque no se si esté listo para decirmelo.

- Fueron un poco más de dos meses Sean ¿que querías que hiciera sin supervisión? 

Rie como tonto apenas lo escucha, le encanta que le siga la corriente cuando simula reñirme como niña pequeña.

- Pequeña niña tonta ¿me has extrañado?

Aunque yo sea mayor por unos meses, es Sean quien ha estado en los cursos de delante , cuando estábamos en el jardín de niños entendía más rápido que todo el resto, después de que entramos a la primaria se dieron cuenta del grandísimo potencial hicieron estudios se dieron cuenta que era un niño “superdotado” y cuando me estaba graduando del quinto grado él también se estaba graduando de la secundaria, cuando acabe los años escolares el acaba su carrera universitaria , por lo que acabó su doctorado antes de yo culminará mi carrera universitaria. 

- Sabes que si, ahora se totalmente sincero

Me estoy preparando para un par de palabras no tan agradables

- Me gusta , el nuevo corte te luce, creo que tuviste el cabello largo tanto tiempo que este cambio en ti es como si brillara una nueva luz

Son las palabras que no sabía que necesitaba hasta que las pronunció, en ese momento sentí el pecho nuevamente pesado como si un agujero se hubiese abierto de la nada y absorbiera de nuevo . Quiero creer que enserio no se llevo mi luz, que puedo brillar sola que nunca estuve realmente apagada solo un poco más tenue, quiero creerlo aunque el vacío se está haciendo mayor y no pueda controlar las lágrimas, veo como Sean lo lamenta por mi, como me  mira de la misma manera en la que me miraron mis padres y mis hermanas cuando me rompí ante ellos, como si no les doliese ver el desastre en el que me convertí. Lloro, en un inicio es suave y solo lo notarian los demás si me ven pero en unos segundos aumentó la intensidad, ya no son solo lagrimeos sino ahora también quejidos puedo sentir todas las vistas alrededor sobre mi y lo odio, odio que me miren como si no puede estar dañada como si fuese un pecado llorar porque algo te duele , odio a los espectadores que se burlan del dolor ajeno porque son tan malos como quien ocasionó el dolor o peor.

Escucho como Sean mueve su silla al lado de la mía y sus brazos caen sobre mí arrastrándome hacia su pecho, debo estar terriblemente rota para que el chico que odia el contacto físico con alguien más, me abrace con ternura.

- Vamos princesa sácalo todo.

Me apego mas a él mientras acaricia mi cabello en un intento de calmarme

- Llora todo lo que tengas que llorar pero júrame que después de esto te limpias esos bonitos ojos oscuros y levantas tu cara para seguir mirando como una mierda a todo el mundo.

Y lo hago lloro lo que he evitado llorar estos días, lo que aún siento que me quema el pecho un par de veces. Han pasado un par de minutos cuando lo escucho decir. 

- No te preocupes pequeña todo estará bien, encontraremos un chico más apuesto para ti. 

Ya no salen lágrimas y el vacío se ha hecho más pequeño, nunca nadie menciona el dolor de un corazón roto cuando recomiendan enamorarte, claro que si lo hicieran serían más precavidos acerca de la idea de entregarle tu corazón alma y vida a alguien. 

- ¿Que diablos le hiciste a esa pobre chica? 

Escucho la voz de un hombre cerca a nosotros sin embargo no quiero que nadie me vea tan destruida supongo que si lo ignoramos se irá, no necesito un héroe que venga a salvarme. 

- Se supone que llegarías más tarde Aaron, no ha pasado ni media hora. 

¿Por qué Sean está contestando al hombre desconocido? ¿Quién diablos es Aaron? Me separó del pecho de mi amigo aun sin levantar la cabeza, limpió las lágrimas que un quedan en mis mejillas, espero no tener el maquillaje todo regado por la cara. Con mis dedos intentó levantar las pestañas para darles una forma rizada y levantó el rostro preparada para verme como si no me hubiesen destruido de maneras que ni siquiera sabía que existían.