El comedor era gigante, con muchas mesas para hasta diez personas cada una en todo el lugar. Era sábado y por primera vez en algún tiempo hacía sol en Londres a pesar de haber llovido más temprano, así que casi no había alumnos en el internado. Unos cuantos tomaban el almuerzo, no habían más de treinta personas y aún así Levi se puso nervioso, tomando la mano de Zabbad y bajando la mirada al caminar. El moreno entrelazó sus dedos con los ajenos y siguieron su camino hasta la fila para tomar sus comidas.
Al menos la comida no era un asco, era un internado de niños ricos, tampoco era que los iban a poner a comer del suelo.
—Yo quiero una hamburguesa y un refresco—Dijo Zabbad a la señora, Levi apretó su mano dándole a entender que él quería su comida. No se sentía cómodo pidiéndola él mismo, hablar con extraños le provocaba ansiedad—Y a él le da cereal y una leche de fresa.— La señora puso la comida en las bandejas correspondientes. Levi tomó su bandeja y caminaron hasta una mesa vacía.
Comer frente a desconocidos era otro tema complicado, así que el ojiazul mantenía la cabeza gacha y evitaba a toda costa ver a los demás comer puesto a que eso se le hacía desagradable, lo mismo si lo miraban a él. Levantó la mirada para asegurarse de que no lo miraran y se encontró con algo que lo incomodó-No las miradas de los chicos, por respeto ellos no le miraban-.
—No pongas los codos en la mesa—Espetó a Niles.
—Lo siento.
—Mira quien viene ahí—Señaló Landon detrás de ellos. Todos se voltearon a ver incluyendo a Levi. Hacia ellos caminaba un chico bastante alto, tenía el cabello largo y recogido de manera alborotada con una bandana. Su cuerpo era delgado pero con musculatura.
El muchacho se acercó a ellos con una amplia sonrisa.
—¡Hola chicos!— Tomó asiento junto a Levi, quedando entre él y Niles, Levi se arrimó alejándose de él—Ustedes han de ser nuevos—Comentó sonriente y extendió su mano hacia a Levi, él le lanzó una mirada rápida a Zabbad y decidió tomar su mano, la cual era grande comprada a la suya—Soy Hero Stone.
Hero en pocas palabras era guapo, en realidad guapísimo. Tenía la tez blanca, sus ojos eran verdes y brillantes, su nariz era recta y la línea de su mandíbula parecía haber sido dibujada por lo muy atractiva que era. En sus brazos pudo notar algunos tatuajes y en sus dedos algunos anillos.
Levi se sentió totalmente intimidado, pero esta vez de una manera un poco diferente.
—L-levi Thompson...—Murmuró bajito y sin mirarle a los ojos.
—Soy Zabbad Mikhael—Se presentó el moreno y estrechó su mano con la de Hero.
—Espero que les guste el lugar, yo lo amo—Comentó con sarcasmo mientras reía.
—No entiendo como puede gustarte—Habló Levi con enfado.
—Fue sarcasmo...—Explicó Hero con una sonrisa. Era cómica la forma en la que Levi se había sonrojado aún más, casi pareciendo un tomate.
—Ah—Fue lo único que dijo y volvió a poner la mirada en su plato.
—¿Por qué decidieron estudiar aquí?—Preguntó, Hero era experto en socializar y mantener viva una conversación. Zabbad iba a responder pero Levi se le adelantó.
—Mis padres temen que termine como un ermitaño sin amigos, sólo porque la única persona que me agrada aparte de mí mismo es Zabbad, y tengo que comenzar a ser más independiente—Tomó aire, se fijó en las mejillas del rizado y tocó sus hoyuelos—¿Sabías por qué se forman esos hoyuelos en tus mejillas?— Hero negó—En la zona de la hipodermis hay fibras musculares de la cara que se adhieren a la piel exterior, En las partes en que hay más tensión, se produce un mayor estiramiento y más depresión en la parte exterior, formando el conocido hoyuelo. Esto explica porqué algunos hoyuelos, como los que tu posees en las mejillas, aparecen sólo cuando ríes, ya que estas activando ciertos músculos de la cara, posiblemente los pierdas cuando seas un anciano— Todos en la mesa lo miraron sorprendido.
—Gracias, ni sabía como diablos se llamaban esas cosas.
—Entonces no debes de ser muy inteligente—Comentó Levi como si nada. Zabbad abrió la boca para regañar a Levi, pero fue interrumpido por la presencia de una chica rubia que se había acercado a la mesa.
—Hola chicos—Saludó sonriente. Sus ojos eran de un azul muy bonito, el cabello le llegaba a la cintura y sus mejillas llenas la hacían lucir adorable.
Los chicos le devolvieron el saludo, ella fijó su mirada en Levi y Zabbad, sobre todo en el último mencionado.
—Hey, soy Gisselle—Saludó, Zabbad tomó su mano educadamente. Levi observó con curiosidad su short y su blusa sin mangas.
—Soy Zabbad—Se presentó.
—¿No tienes frío?—Intervino Levi, Ella lo miró confundida.
—¿Perdón?—El rostro de la chica se tornó en confunsión.
—Es que casi estás desnuda, yo tengo un suéter y aún tengo frío ¿Segura que no tienes frío?
—¿Tienes algún problema?—Espetó ella, Zabbad colocó su mano en el hombro de Levi.
—Disculpalo—Zabbad se giró hacia él y le habló con voz firme pero amable—Lev, es de mala educación decirle eso a una dama.
—Dama es un termino que no le va—Soltó y todos en la mesa lo miraron como si hubiese hecho algo malo, Giselle en especial.
—¿Qué diablos pasa contigo?—Preguntó la joven estando obviamente ofendida.
—¡Levi!—Exclamó Zabbad.
—¡Pero es que dama se le dicen a las mujeres mayores de alta sociedad! Y ella es una chica joven y sencilla—Explicó sin entender porqué todos los demás le miraban de esa manera y porque Giselle se había enojado repentinamente.
—Sigue siendo de mala educación la manera en que lo dices, sabes que debes explicar las cosas amablemente—Le recriminó Zabbad con amabilidad.
Levi rodó los ojos y luego devolvió la mirada a la chica—Yo quería saber si no tenías frío porque se me hace curioso que aunque todos estemos con suéteres tú no, además de que hoy llovió ¿Eres una persona resistente al frío? quería saber eso, pero Zabbad no lo entiende—Explicó de mala gana.
Todos en la mesa lo miraron como si fuese un bicho raro (Lo era), Giselle se relajó y notó que no había malicia alguna detrás de las palabras de Levi.
—Eh... La verdad es que ahora que lo dices sí tengo un poco de frío, pero me gusta—Levi asintió escuchándola, ella devolvió su atención a Zabbad—Soy parte del comité de bienvenida para los nuevos estudiantes así que podría mostrarte... mostrarles—Corrigió nerviosa—El internado.
—Por supuesto—Aceptó Zabbad con una sonrisa, la chica no podía evitar morder su labio por los nervios que él le causaba.
—¿Después de que coman?—Preguntó y colocó una de sus manos en el hombro del moreno. Levi miró la escena sintiéndose inevitablemente incómodo y pensando dos cosas:
1ra: ¿Por qué hace eso? Sólo yo toco los hombros de Zabbad
2ra: ¿Por qué se muerde el labio? ¿No le dolerá si sangra?
Se cruzó de brazos y le dio la espalda a Zabbad, mientras Hero lo miraba con su mentón recargado de la palma de su mano. Levi había despetardo su curiosidad.
—¿Tengo algo en la cara?—Preguntó al notar la intensa mirada de Hero, rápidamente limpió las comisuras de su boca, siempre que comía cereal le quedaba algo de azúcar en los labios.
—No, sólo que eres raro...—Comentó con curisiodad, Niles pateó a Hero por debajo de la mesa— ¡Auch!
—Yo creo que Levi es agradable—Habló Landon, esperando que Levi no se hubiese sentido incómodo por el comentario de Hero.
—Lo sé—Respondió este secamente, no a propósito, él era así.
—¿Que edad tienes?—Preguntó Niles en un intento de iniciar una conversación agradable. Siempre trataba de en lo posible ser amable, no le gustaba hacer sentir mal a nadie.
—Diecisiete.
—Yo tengo dieciocho—Comentó Hero.
—Nosotros igual—Intervino Landon.
—Eso es genial, ya pueden arrestarlos—Comentó y Hero frunció el ceño mientras se echaba a reír.
—¿Y ya tienen su uniforme?—Preguntó Niles cambiando la conversación, Levi lo miró alarmado, puso su mano en su pecho dramáticamente y se volteó hacia Zabbad quien aún hablaba con Gisselle.
—¡¿Tengo que usar uniforme?!—Chilló.
—Sí Lev, te lo dije de camino acá—Respondió Zabbad, tomó su mano en un intento de tranquilizarlo pero Levi se alejó un poco.
—¡Tú no me dijiste nada! ¡No usaré un uniforme aburrido!
—Calmate Lev...—Zabbad puso sus manos en los hombros de Levi, debía de calmarlo o haría una escena que no sería bonita.
—¡Yo quiero mi ropa!—Balbuceó, comenzando a sollozar. Todos en la mesa lo observaban, incluso los otros estudiantes de mesas cercanas se voltearon a ver— ¡Quiero mi habitación, quiero mi casa y quiero mis cosas!—Las lágrimas se acumularon en sus ojos, su respiración era irregular y se aferraba a los brazos de Zabbad.
—¿Qué carajos sucede con él?—Preguntó Gisselle de manera despectiva.
Zabbad se volteó hacia ella sintiéndose mal por lo que había escuchado.
—Él está bien... y lo siento, pero creo que Landon y Niles se encargarán de mostrarnos el internado.
La chica les miró decepcionada, pero no dijo nada al respecto y sólo se fue.
—¿Estás bien?—Preguntó Hero a Levi, no era normal que un chico de diecisiete años hiciera tal pataleta por algo tan insignificante como es usar un uniforme. Había algo raro en él, lo notaba, pero no sabía qué (Hero no era una persona muy detallista). Tal vez Levi sólo fuese raro y ya; sin mayores explicaciones.
—¡No estoy bien!—Chilló.
—Vamos Levi, cuenta hasta diez y respira— Murmuró Zabbad, Levi cerró los ojos con fuerza y comenzó a contar con ayuda de Zabbad. Contar hasta era una técnica que ayudaba a relajar a Levi. El contar una cadena de números en orden hacía que su ansiedad o su pánico se disminuyeran. Después de eso se quedaron en silencio por unos minutos hasta que Hero decidió romperlo una vez que todo estuvo calmado, no le gustaban los ambientes incómodos.
—¿Escogieron una actividad extracurricular?—Preguntó. Levi lo miró prestando atención a sus palabras.
—Polo y fútbol—Respondieron Niles y Landon al unisono.
—¿Escogiste algo?— Preguntó Landon dirigiéndose a Levi. El aludido negó.
—No hay nada que me guste—Respondió en voz baja, Zabbad acariciaba su espalda y lo observaba con ternura.
—Yo escogí artes plásticas—Habló Zabbad.
—Yo este año opté por la música además del fútbol, quiero hacer algo diferente, deberías de inscribirte en música—Hero chocó su hombro amistosamente con Levi y este puso una expresión seria por el repentino contacto físico.
—No—Espetó.
Después de eso los cuatro mantuvieron una conversación entretenida, Levi sólo se quedaba callado y respondía secamente a las preguntas que le hacían, Zabbad sabía lo difícil que sería para él acostumbrarse a ese nuevo entorno por lo tanto su conducta no sería la mejor, lo cual hizo que agradeciera profundamente el esfuerzo de los chicos por tratar de hacer que Levi se sintiese cómodo e incluído. Como el mejor amigo de Levi, estaba muy consciente de lo crueles que podrían llegar a ser las personas.
Después de comer, Hero los acompañó a su habitación. Estando allí se fijó en las sábanas de la cama de Levi y sonrió.
—Lindas sábanas—Halagó.
—Gracias—Respondió Levi en voz baja y sonrojándose un poco, Zabbad notó como la presencia del rizado ponía a Levi raro, bueno más raro de lo que ya es. Hero hizo intención de sentarse en su cama y Levi se alarmó.
—¡No! ¿Acaso no pides permiso para sentarte en la cama de las personas?—Hero frunció el ceño sin borrar su sonrisa, le parecía cómica la actitud de Levi.
—¿Puedo sentarme?— Levi lo miró por unos segundos.
—No— Le dio la espalda y miró el gran televisor que estaba empotrado en la pared—Zaddie, quiero ver televisión.
—Ten—Landon le extendió el control remoto. Levi encendió el televisor y comenzó a hacer zapping en los canales.
Mantenía su mirada pegada en el televisor, aunque de vez en cuando se volteaba a ver a los demás, específicamente a Hero. En cuanto este se quitó la bandana y sacudió sus rizos, Levi se levantó y se le acercó con curiosidad. Acarició su cabello sin importarle el espacio personal, era suave al tacto y a Hero parecía no molestarle, de todas formas Levi no lo hubiese notado.
—Tienes el cabello como una chica— Murmuró, Hero soltó una pequeña carcajada.
—Gracias— Respondió.
—No era un halago— Espetó sin quitar su mano del cabello de Hero.
Aclaración: Cuando Levi dice a Gigi que 'Dama es un término que no le va' es porque se refiere a que el significado de dama no es algo que asocie con ella debido a que 'Dama' se le dice a las mujeres mayores de la alta sociedad. En cambio ella es una chica sencilla. Él no trató de ofenderla en ningún momento y mucho menos fue machista.
Recuerden que Levi tiene sus conocimientos de enciclopedias, diccionarios y libros. Él es con completamente objetivo y honesto, y aún más importante no es malicioso.