El sabor de tu corazón

3.

Después de salir de la universidad Ben fue a recoger a sus hermanos.

Llegaron a casa y Ben hizo el almuerzo.

Comieron entre bromas y preguntas acerca de la escuela.

—Ben, ya es tarde debes irte —Andy le anunció a su hermano.

—Gracias, laven los platos, vendré los más rápido posible, procuren ayudar a Charles y hagan sus tareas.

—Afirmativo papá —dijo Andy con burla.

Ben no le respondió y salió disparado a la Academia de Cocina.

Llegó jadeante a su clase y rápidamente se puso a cocinar la receta del día, que era una tarta de queso con cubierta de turrón y almendra.

A Benjamin le encantaba cocinar y su maestra la Chef Dorothea se lo decía continuamente.

El tiempo pasó rápido y Ben no se dio cuenta que ya era algo tarde.

Se despidió de sus compañeros y salió rumbo a casa, al estar llegando se topó con el auto de sus padres y un temor se apoderó de su ser, eso significaba que sus padres estaban ahí y aunque no lo demostraba les tenía mucho miedo.

Entró sigilosamente pero se encontró con su madre que lo veía expectante...

— ¿Se puede saber, dónde estabas? —el tono de su madre era duro.

—E-em...Yo...estaba e-en...estaba leyendo un libro… eso.

—Te he dicho que detesto que balbucees, como sea, tenemos una cena muy importante necesito que te vistas, ponte este traje —le dio una bolsa que contenía un traje n***o.

—Te quiero aquí en veinte minutos Gerard, tus hermanos ya se están arreglando, ve.

Tomó la bolsa y subió a su habitación, entro al baño y se dio una ducha rápida, no pretendía hacer enojar a sus padres, salió y se secó el cabello, tomó el traje y aún con la  bata de baño puesta se vistió con este debajo de la misma.

No es que pensará que alguien lo viera desnudo, pero Ben era muy pudoroso porque tanto en su espalda como en otras partes de su cuerpo se encontraban cicatrices que no estaba orgulloso de ver o mostrar.

El traje le quedaba a la perfección, se aplicó algo de colonia y bajó rápidamente.

Sus padres ya estaban esperándolo e iban elegantemente vestidos.

*****

Después del incómodo viaje en auto.

Bajaron y se incorporaron a la fiesta, inmediatamente Andy, Lizzy y Charles se excusaron de sus padres, según ellos para socializar, pero en realidad era para escapar de la presión de ser vistos por todos y saber que eran hijos de los Peterson.

"Genial " pensó Ben, no culpaba a sus hermanos de querer huir del lugar, pero no quería estar solo y comenzó a pensar en excusas para escabullirse de la fiesta y salir de ahí, sin embargo la voz de su padre arruinó por completo sus planes.

—Benjamin, ven aquí —con paso lento y algo indeciso llegó al lado de sus papás y les dedicó una sonrisa que más bien pareció una mueca.

—Te presento a la señorita Cecily White, ¿es muy linda cierto?

Cecily era una chica linda, pero su fama la precedía y Ben sabía que podía tener un novio, pero cientos de amantes, la rubia lo vio de pies a cabeza y le lanzó una mirada descarada y pervertida.

—Mucho gusto señorita White, me llamo Benjamin, pero puede decirme Ben –intentó no sonar muy seco pero no lo logró, su tono era desinteresado.

—Benjamin... —Su madre habló.

—Ben mamá, dime Ben —le respondió y se ganó una mirada asesina de su madre.

—Ben, lleva a la señorita a pasear al jardín, para que se conozcan.

El pelinegro sabía que era una táctica de su madre para que intentara algo con esa chica, no quería pero se resignó a hacerlo para no decepcionar a Emily.

— ¿Señorita? —Dijo Ben ofreciéndole la mano a Cecily.

La rubia aceptó y juntos se adentraron al jardín.

—Y dime Ben, ¿cuáles son tus intereses? —preguntó Cecily.

—Pues yo...estoy estudiando y me gusta la música y...

—Estudias negocios lo sé, ¿Entonces pretendes heredar el negocio familiar?

—La verdad no lo sé...Yo...

De pronto la rubia lo arrinconó a un arbusto, y se acercó peligrosamente a su rostro, pero fue algo difícil ya que el ojiazul era muy alto.

—Escúchame bien Peterson, estoy sumamente interesada en ti, y espero que algún día no muy lejano tú y yo podamos ser algo más que amigos.

Y en ese instante trató de besarle, pero Ben volteó la cara y la rubia no logró su cometido.

La separó algo bruscamente de él.

—Lo siento mucho señorita pero yo no puedo...No estoy en la disposición de aceptar sus pretensiones...además usted tiene fama de ser...Muy buena en las relaciones destinadas al fracaso...No pienso ser uno más de su lista. Y si me disculpa.

Ben la dejó ahí y se percató de que sus padres habían presenciado la escena, ambos lo miraban encolerizados y supo que al llegar a casa no le esperaba nada bueno.

*****

—Charles, ve a tu cuarto –al llegar George bajó del auto y se adentró a la casa obviamente muy enojado

—Ustedes también –señaló a Andy y Lizzy.

Ambos subían las escaleras pero a mitad de ellos escucharon como su madre y padre le gritaban al hermano mayor.

— ¡Benjamin Gerard ven acá! —La voz demandante de su madre causaba escalofríos.

—Si madre —respondió el pelinegro.

—Al despacho ahora —ordenó.

Ben entró temeroso y arrepintiéndose de sus actos a donde le habían dicho, George miró hacia arriba y vio a Andy con Lizzy.

—Vayan a sus habitaciones.

Ambos subieron pero decidieron esperar en la habitación del rubio para después ir a ver a su hermano.

En el despacho se encontraban dos padres sumamente enojados y un chico atemorizado de lo que le podrían decir.

— ¿Se puede saber qué pasó con la señorita White?, ¡porqué la rechazaste! —gritó su padre.

—Me quería besar, es muy conocida por tener amantes y además. ...ustedes saben que soy gay —respondió tratando de defenderse. Aunque odiara admitirlo sabía de sobra que sus padres ya estaban al tanto de esa información.

—No vuelvas a decir eso, sería una vergüenza para la familia que se supieran tus...preferencias sexuales —Gruñó su padre.

—Así es Gerard, te pido que no se vuelva a repetir —continuó Emily.

—Pero mamá, no quiero tener...ninguna relación con esa mujer.

Emily  se acercó encolerizada a él para darle una fuerte bofetada.

—Ve a tu cuarto, me decepcionas Benjamin.

Salió de ahí lo más rápido que pudo y entró a su habitación, se desplomó en su cama tratando de retener las lágrimas que se acumulaban en sus azulados ojos.

Escuchó que alguien abría la puerta y pensó que eran sus papás de nuevo para atormentarlo...Pero no, eran sus hermanos, bueno en realidad sólo eran Andy y Elizabeth.

— ¿Ben que pasó? —Lizzy se acercó a él y notó la marca roja de su mejilla.

— ¿Porqué? —preguntó de nuevo.

—Querían que tuviera una relación con Cecily White, pero yo no y eso los enfureció.

Ellos sabían que sus padres no aceptaban la condición de Ben y trataban de "curarlo" al conseguirle citas, también sabía que podían llegar a golpearlos, pero eso nunca les había pasado a ellos, solo a Ben y desconocían el pasado aterrador de su hermano.

— ¿Quién fue? —preguntó ahora Andy.

—Emily.

—Cómo se le ocurre a Emily hacerte eso, la fama de Cecily es muy conocida y es el colmo que te quieran forzar a tener algo con ella sabiendo que es una zorra —Elizabeth hablaba con amargura.

—Lo sé, pero... me asusta pensar que puedan rematar con ustedes.

—Ay hermano mayor, deja de preocuparte por nosotros, ahora nos importas tú y tu felicidad, algún día tendrán que aceptar lo que eres y si no son capaces de hacerlo nosotros sí, pero por ahora descansa.

Se acercó a su hermano y le dio un beso en la frente.

—Hermano, sabes que te amo y que no me importa si te gustan los hombres, las mujeres o las vacas, te amo por lo que eres y porque sin ti no seriamos nada, gracias a ti somos buenas personas y esas personas que se hacen llamar nuestros padres nunca se han preocupado por nosotros, nunca olvides que te queremos.

Dicho eso Andy le dio un fuerte abrazo y salió de su habitación seguido de Elizabeth.

Ben rio de forma melancólica y se metió bajo las mantas de su cama, agradeció el tener unos hermanos tan comprensivos como Andy, Lizzy y Charles quienes no lo juzgaban como sus padres, pero a pesar de tener el cariño y apoyo de ellos no podía evitar sentirse sólo.