Capítulo cuarenta y dos
-Sofía
Dos palabras.
Solo dos y debo admitir que me han sacado el aire.
“Te extrañe”.
Mierda...
¿Por qué tiene que ser todo lo que yo quise justo cuando estaba decidiendo por mi misma ponerme dura con él?
Solo tienes que recordar lo que dijo su madre...
Es cierto, Gia, gracias por acordarme.
Me separo de él ocultando mi evidente sonrojo por lo que acabo de pasar hace un segundo y trató de calmar mi corazón tomando grandes bocanadas de aire, pero este no deja de palpitar de manera descontrolada por el cúmulo de emociones que ese maldito beso que me ha dado soltó en mí.
Me siento feliz, contenta, nerviosa y aunque suene extraño también amada, pero nada más es recordar lo que la luna Jex dijo y tengo suficiente para aplacar un poco todos los sentimientos que
