Capítulo cuarenta -Maikel Llegué. Por fin estoy en mi amada ciudad. Bueno, más que amada estoy pensando en la persona que en estos momentos voy a ver y en la reacción que pondrá cuando después de una semana me vea por fin. Ay, Sofía. —¿Entonces preparo todo para mañana por la mañana? —Brian cuestiona estando del lado de piloto de mi auto y asiento sin, incluso, haber tenido una respuesta de ella. Es que aunque diga que no me la voy a llevar sí o sí. —Sí, prepara el jet y las cosas que necesitamos para pasar desapercibidos aquí, como por ejemplo, decirle a mi padre y tú padre que tenemos que ir de urgencias a buscar a tu mate y que sería bueno que yo estuviese ahí para que vean el próximo Alpha de la manada en donde se quedara tu mate y que por ahí mismo nos llevamos a Sofía para ha

