Leonardo La veo salir contorneando sus caderas de mi oficina y hace que quiera retenerla y traerla de nuevo al medio de mis piernas, no sé que me hizo ella, pero lo que sí estoy jodidamente loco por ella. —Planeta tierra llamando a la luna. —Levanto mi mirada y es Mateo. —¿Me decías algo? —preguntó. —Que en definitiva tienes que hacer algo, por qué esa mujer te está afectando el cerebro hermano. —Frunzo el ceño y le tiró el papel que sostenía en mis manos. —¿Solo a eso viniste?, O ya me tienes alguna razón de las tres cosas que te envié averiguar. —Sigo con mi vista puesta en los documentos. —Por ahora, solo te traigo una excelente noticia, Carlos Bianchi aceptó reunirse contigo mañana en el restaurante italiano —Vaya en medio de todo esto si es una excelente noticia, se que mi padr

