Evan
Austin y yo arrastramos a Adam a la casa de la piscina.
—Necesitas calmarte, hermano menor. Sí, Janet estaba completamente chiflada, pero actuar como un macho no va a cambiar a Janet ni lo que hizo —comentó Austin.
—Austin tiene razón. Necesitamos que estés tranquilo para que cuando mamá y Jay traigan a Keira aquí, ella no se derrumbe de nuevo. No estamos excusando a Janet, pero esa mujer es otra cosa. La verdad es que Janet es una abusona —añadí, tratando de hacer que Adam entrara en razón.
—Bebe todo —insistió Austin, sacando lo que parecía un vaso de jugo de naranja.
Adam lo miró con desconfianza.
—¿Qué le pusiste? —preguntó, entrecerrando los ojos.
—Whisky, ahora bebe —respondió Austin con firmeza.
Mientras se preparaba una bebida para él, me miró y preguntó:
—¿Quieres un
