-Eres idiota. *** -Qué raro, no has intentado dejarme la boca como un colador, ¿te encuentras mal o algo? -Pregunta con una sonrisa socarrona en el rostro que me hace sentir un hormigueo en la zona del ombligo. -No quiero ser repetitiva, además, creo que ya te ha quedado claro que si me molestas mucho tu sonrisa podrá ser un instrumento de cocina perfecto. -Respondo con una sonrisa notablemente sarcástica. -Oh, vamos, si te encanta mi sonrisa.-dice riendo levemente, haciendo subir su ego notablemente. -Eres un idiota egocéntrico.-le espeto frunciendo el ceño. ¿Qué esperabais? ¿Que él dijese " soy tu idiota egocéntrico "? No señores, clichés aquí no. -Ya, y tú una impulsiva bipolar, pero aun así me aguanto y estoy contigo.-contesta con aún una sonrisa plasmada en el rostro. -¿Y así

