Harry volteó inmediatamente a ver a Deneb, quién observaba incrédula la escena y con una de sus manos cubría su boca. En ese momento el castaño maldijo internamente a Tom Sezai. Ahora no era momento de cuestionar cómo es que el hombre sabía de su pasado, lo importante era ponerlo en su lugar y salir de ahí con su esposa, quién se veía bastante afectada con tal información. — ¡Me importa una mierda lo que tengas que decir respecto a mí, pero no te metas con mi esposa! —Azotó la palma de su mano contra la mesa, ante su acción Tom se echó a reír. Para Tom, Harry solo era un niño que estaba sufriendo la caótica metamorfosis para hacerse hombre. Tom, ya no era un niño, era un hombre de treinta y cinco años al cual desde muy joven le tocó hacerse cargo de si mismo. Su madre quedó embarazada si

