Deseo Insaciable

Capítulo 1: Decepción

Me miró frente al espejo, aplicó corrector. Las ojeras se me notan a miles de kilómetros, no he dormido casi y se que eso se verá afectado más adelante. Miró la hora y aún Paul no llega a dormir, ya amaneció.

En mi teléfono reposa la fotografía, se ve claramente que es él, tiene ese traje que tanto me gusta verle puesto, con la corbata que le regalé hace no más de un mes. Quisiera borrarla, que necesidad de verla allí, ver como se besa con esa mujer, es un poco devastador para mí ego.

Termino de arreglarme, mi ropa elegante no puede faltar ningún día, mi maquillaje casual resaltando mis ojos ámbar, recojo mi rubio cabello en una coleta y bajó las escaleras de esta enorme casa. Al principio pensé, que este lugar nos quedaría pequeño, creo que me equivoqué. La soledad que se siente en este lugar es gigante. Observó la mesa y aún está el globo con su mensaje escrito con tinta brillante, "Feliz primer aniversario" tal vez pensé que hoy sería diferente, no comprendo que he hecho para que el cambio de Paul haya sido tan drástico, entiendo que nuestra relación de novios no duró más de tres meses pero, parecemos un par desconocidos en la casa y en la oficina, unos simples compañeros de trabajo. Le pido a la chica del servicio que me ayude recogiendo eso, no quiero causar lástima en él, o que este pequeño olvido de su parte se convierta en un problema que haga que no nos hablemos por semanas.

Llegue hasta la oficina, al entrar las letras en madera con su nombre Square, me hace sentir satisfecha y que mi padre hizo un muy buen trabajo, este es sin duda mi lugar de paz, es el único lugar donde me puedo sentir yo. El imponente edificio de seis pisos, con vidrios por dónde se mire es uno de los atractivos de esta zona, por la forma en la que está diseñado y construido. No tardó en sentarme cuando Lily entra a mi oficina, tengo el privilegio de trabajar con mis mejores amigas, Lily es diseñadora de interiores y Brianna es mi secretaria. Nos complementamos a la perfección, somos como los tres mosqueteros.

—Tienes ojeras, eso es una buena señal. ¿Cuéntame que también la pasaste anoche? ¿Que se siente cumplir un año de casados con el hombre ideal?

Sí, así catalogan a Paul, todo el mundo. Las revistas de arquitectura más importantes del país, las revistas de espectáculos, todas las personas de nuestro círculo social, en fin… Como no lo van a ver así, es un hombre demasiado inteligente sin contar con lo atractivo, sus ojos color verde esmeralda, contrastan con su piel blanca y su cabello color azabache.

—Fue… Fatal. —Ellas son mi paño de lágrimas, no saben todo al fondo de mi relación pero si lo necesario—. Amiga creo que él olvidó nuestro aniversario, no llegó a dormir, sin contar por la foto que me llegó al teléfono. —Le muestro y ella hace una perfecta o con su boca.

—Es un imbécil, guapo pero imbécil. Debiste haber esperado para casarte, te casaste muy pronto. Ahora tienes que aguantar que él te haga estas cosas, amiga yo vi cuánto te esforzaste por darle la sorpresa. Deberías enojarte con él y que te dé un regalo para que te ofrezca disculpas. —Ella sonríe con picardía.

Sí, tal vez nos casamos pronto, recibimos el manejo de este lugar y al poco tiempo empezamos a salir, la complicidad que tenemos los dos es innegable.

—Lo tendré en cuenta. Sabes tenemos un proyecto muy importante, debemos trabajar muy fuerte ya que tenemos que entregarlo a fin de mes, estoy pensando en hacer los jardines mucho más grandes te voy a mostrar el plano.

Soy paisajista, amo el dibujo y todo lo que tiene que ver con la arquitectura, quizá por eso congeniamos tanto con Paul, él es actualmente uno de los mejores arquitectos del país.

—Oyeme, pensé adelantar la despedida de soltera de Brianna, sabes que la cantidad de trabajo se nos está acumulando y cuando pasa eso muchas veces tenemos que quedarnos de más, así que para no restar la importancia vamos a adelantar dos semanas, ¿Qué te parece? Sería para mañana en la noche, hay un bar nuevo en la ciudad cerca a la costa, tengo entendido que da los mejores shows. —Ella hace uno de sus bailes graciosos, yo solo me río a grandes carcajadas.

—Estoy muy de acuerdo, así podré relajarme y olvidar este mal sabor de boca que mi querido Paul me causó. —Levantamos la mano para que las chocaramos, luego ella salió de la oficina.

Continúe haciendo mi dibujo, debo entregar los borradores del jardín de la casa que estamos realizando. Muevo el lápiz entre mis dedos tratando de buscar la mejor ubicación para los bonsais que quieren plantar, de pronto siento una mano sobre mí brazo. Levanto mi mirada y ruedo los ojos.

—Paul estoy trabajando, si estás acá temas de nuestro proyecto nuevo podemos hablar, si es por algo personal puedes irte —dije sin siquiera mirarlo.

—Amor, lo siento. La noche se extendió de más y la estaba pasando tan bien, no mire la hora. Lo siento. —Él hace pucheros.

—¿También olvidaste la fecha? Paul era nuestro primer aniversario, ¿Tan poco te importa nuestro matrimonio? —No puedo evitar sentir un nudo en la garganta. Él da la vuelta por la oficina para quedar cerca a mi.

Me da un abrazo que me reconforta, cierro mis ojos cuando siento el contacto de sus labios con los míos. Este sentimiento en el pecho me hace sentir que no me equivoqué con él.

—¿Estabas con una mujer, verdad? —Él niega con la cabeza, tomó mi teléfono y le muestro la fotografía—. No soy tonta.

—No recuerdo eso, tal vez el alcohol me hizo hacer eso sin darme cuenta. Mi amor perdóname. —Agarra mi rostro, ahora me siento confundida—. Mira debo ir a revisar unas cosas. Nos vemos está noche sin falta en la casa y allí hablamos de todo. Te amo mi hermosa princesa.

Me da un casto beso y sale. Lo que queda del día procuro dedicarme a trabajar, todos estamos muy enfocados, donde podamos adquirir la licitación para este proyecto nos entraría una muy buena cantidad de dinero. Miró el reloj y ya pasaron ocho horas, eso fue en un abrir y cerrar de ojos, me levanto para irme, miro hacia la oficina de Paul y está cerrada, sigue con mucho trabajo, será irme a la casa y esperar que cumpla lo que me prometió.