La cafetería

1006 Words

El mesero me sirvió una taza de café caliente, y en ese instante, un hombre de buen porte se detuvo frente a mi mesa. —¿Puedo tomar asiento? —me preguntó con una voz grave pero amable. —No puede, ni siquiera lo conozco —respondí con frialdad, sin apartar mis manos de la taza. Él sonrió como si mi negativa no le afectara en lo más mínimo y, aun así, se sentó frente a mí. Me quedé observándolo unos segundos, un poco desconcertada. —¿Qué quiere? —le pregunté con cierta impaciencia. —Mi nombre es Lizardo López —contestó con una calma que me desconcertó más todavía. —Solo diga lo que quiere y ya —repliqué, un poco cortante. —Nada en especial —me dijo mientras entrelazaba las manos sobre la mesa. —Solo pensé que sería amable de su parte dejarme compartir la mesa, considerando que todas

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD