Por no confiar en ti.

¡Amor!

Danna...

Siento como el placer se apodera de mí, Fernand me muestra algo nuevo, sentimientos y experiencias que jamás imagine lograr llegar a conocer, mi feminidad es atrapada por sus labios, los gemidos salen de mi boca sin que pueda evitarlo, definitivamente esto es increíble.

Acaricia con sus manos mi cadera acercándome más hacia él, yo me sujeto de la cabecera de la cama, pues necesito apretar con fuerza algo.

Siento como una sensación nueva se va apoderando de mí, como mi cuerpo se estremece al compás de sus caricias, no sé que es esto, no sé cómo lidiar con ello, pero solo sé que hacerlo con él es lo único que deseo, ahora mismo no hay otro hombre con el que quisiera hacer algo así.

De pronto y como si algo dentro de mí se preparara para salir de golpe, siento como el placer se apodera de mi cuerpo por completo, esto es increíble, es tan maravilloso, el placer en el que este hombre me envuelve es como una tormenta golpeando todo mi cuerpo con fuerza.

Fernand se detiene y besa mi vientre con cariño, él me dice muy bajito y con una voz tan seductora unas palabras.

- Quiero hacerte disfrutar de este momento, respira profundo, pues apenas comenzamos.

Eso que dice me estremece, siento nervios, pero sus labios acariciando mi piel por doquier me hace sentir calor por todas partes, sus manos hábiles me demuestran el placer que sentiré, su voz me acaricia los oídos, mientras su aliento acaricia cada parte de mí.

Él coloca uno de sus dedos en mi interior, siento dolor, pero uno que puedo soportar, respiro profundo mientras siento que se introduce lentamente.

Introduce otro de sus dedos y siento como comienza a moveros dentro de mí, haciendo que sienta un dolor que al mismo tiempo es tan increíble, siento como mi mente se ciega por completo, mi pensamiento lógico se aleja de este lugar, ahora mismo solo me concentro en él.

Siento como esos movimientos provocan en mí esa sensación de nuevo, un orgasmo, algo que no había experimentado jamás y mucho menos con un hombre en mi cama llega con intensidad.

Fernand se da cuenta y me deja respirar por unos segundos.

- ¿Estas lista?

Me pregunta, pero no se a que se refiere, o quizá si, no lo sé, yo ahora solo me dejo llevar por lo que siente mi cuerpo al tenerlo aquí junto a mi desnudo, un cuerpo bien torneado, musculoso que acaricia al mío.

Solo puedo decirle que si con la cabeza, aun que no sé que sigue ahora mismo, me ha mostrado cosas que no sabía que podían suceder o sentirse.

Fernand con cuidado se coloca entre mis piernas, acaricia mi rostro y me dice con amor.

- Si sientes dolor solo dilo, me detendré, me haces tan feliz como no puedes siquiera imaginarlo hermosa.

Yo comprendo a lo que se refiere, quiere que nos volvamos uno solo, y para mí es increíble que el de verdad desee hacerlo conmigo, siento como si él fuese tanto y yo tan poco.

Fer comienza a introducirse con lentitud y cuidado, yo me quejo pues duele, siento como su algo se abriera dentro de mi provocándome una especie de calambres en las caderas y muslos.

- Ah! ¡Oh!

- Tranquila, lo intentaremos de nuevo, me detendré si sientes dolor...

Pero aún duele, él poco a poco comienza a ser cegado por la lujuria, cuando se introduce cierra los ojos y parece disfrutarlo tanto que me siento mal de quejarme, así que me reprendo a mi misma.

- No seas cobarde Danna, inténtalo, el dolor pasará!!

Me digo a mi misma, y entonces respiro profundo y mis uñas se aferran a su espalda, siento como el dolor se apodera de mi cuerpo, pero al mismo tiempo un sin fin de emociones abarcan cada rincón de mí.

Desde que lo conocí fue como la magia, escuchas en tantas ocasiones que el amor es mágico, que cuando conoces a la persona correcta las cosas se dan tan naturalmente que inclusive sientes temor de que todo parezca mejorar, que las cosas sean tan buenas que comienzas a tener tanto miedo de que todo termine, al verlo, al sentirlo me siento tan feliz, Fernand es un hombre maravilloso, en todos los sentidos de la palabra, con el todo sucede tan fácil, no tienes la necesidad de forzar absolutamente nada, jamás lo esperarías, porque digo solo verlo él es impresionante, apuesto, el hombre más seductor que existe, caballeroso, el hombre más detallista, ¿Cómo es que alguien como él se enamoró de mí? Como sucede, siempre quizá no hay una explicación a eso, él parece cada día tan enamorado de mí que para mí es algo inusual, no tengo que fingir ser nadie más, ser solo yo parezco ser suficiente, es como si hubiesen sido destinados para cruzar sus caminos desde que llegaron al mundo, él para mí yo para él, comprendes la final que eso es amor, un genuino sentimiento que aparece en el momento perfecto, antes de él no sabía que era la felicidad, ahora él lo es todo para mí.

Fernand comienza a moverse con más y más fuerza, el dolor pronto comienza a ser placer, me dejo llevar por este hombre al que amo con mi vida, mío, me repito una y otra vez, mi Fernand...

Hacemos el amor por toda la noche, ambos terminamos completamente agotados, mi cuerpo duele, y presiento que mañana será aún peor, pero sinceramente no me preocupa, no me interesa nada más que el hombre que me envuelve entre sus fuertes brazos.

Pienso en el amor que siento por él, me doy cuenta de que amar es algo sanador, algo que cura el alma, que sana cada herida que la vida te ha provocado, amar es la sensación más maravillosa del mundo, aquello que te demuestra que no todo es oscuridad, si no una luz que acapara cada espacio de tu vida, él es esa luz, él es ese amor que tanto necesitaba, este hombre maravilloso me hace tan feliz que incluso mis lágrimas se derraman, me pregunto como es posible que pueda sentir todo esto por él, pero él lo es todo.

- Gracias...

Le digo sin poderlo evitar, porque en realidad le agradezco mucho lo que hace por mí, me cuida, me protege, se ha preocupado por mí lo que nadie jamás lo había hecho.

- ¿Por qué me agradeces hermosa?

Me pregunta Fer sin saber muy bien como leer mi expresión.

- Por todo, por tanto, por lo que me haces sentir aquí dentro, jamás imagine que podría tener un amor como el de las novelas románticas, pero tú... Tú has hecho que mis expectativas sobrepasen la realidad, gracias por amarme a pesar de lo poco que soy junto a ti.

Pero Fer toma mi rostro y observándome asombrado me dice.

- ¿Lo poco?

Tú lo eres todo para mí, eres tan importante que quizá ni siquiera te has dado cuenta Danna, te amo, como nunca he amado, haré lo que sea por ti, lo que tu alma anhele solo pídelo.

Mis lágrimas se derraman al escucharle, pues aún no puedo creer que esto de verdad esté sucediendo, no lo puedo creer....