NARRA OMNISCIENTE.
La mafia, organización de criminales, tráfico de armas, tráfico de sustancias ilegales, trata de blancas, robos, asesinatos, entre más cosas.
Varios hombres se encontraban en una emblemática mansión en una de las regiones de Rusia, ellos no quieren el dinero de aquellas personas, quieren algo más.
- ¿Como prefieren morir, quemados o con un disparo? - dice aquel hombre con una sonrisa macabra y con la mirada sombría.
-No nos hagan nada por favor- suplica aquella joven pareja en llantos.
El hombre mira a esa joven pareja que se encuentran arrodillados, atados de pies y manos, suplicando por su joven vida, una sonrisa sádica y maliciosa se extiendo por su rostro.
-Es una pena- dice con fingida lastima- pero yo no les he dado la opción de suplicar por sus vidas, les he dado la opción de como morir- se miran horrorizados aquella pareja- se me ha ocurrido una grandiosa idea, un disparo es mucho más rápido y no tendré que aburrirme viéndolos sufrir- dice aquel hombre con una macabra sonrisa.
Aquella pareja que solo llevaban días casados se ven horrorizados. El hombre saca su arma y apunta a la pareja, dispara el arma entre ceja y ceja, primero al hombre y luego a la mujer. El tiro perfecto y una muerte instantánea; la muerte perfecta.
-Señor, todas las personas de este lugar ya están muertas- informa uno de los guardias al hombre.
El solo asiente y una sonrisa sádica adorna su rostro, hace una señal para que agarren los cuerpos y lo suben encima de una mesa, el se pone unos guantes y saca un cuchillo. Comienza a abrir los cuerpos y quitar los órganos, los hombres que lo acompañan agarran los órganos y los ponen en un recipiente especial.
-A los demás cuerpos sáquenle la cabeza y que no haya rastro ni huellas que los puedan identificar- dice el hombre mientras tira sus guantes al suelo.
El hombre sale de aquella mansión junto a sus guardaespaldas y se escucha una fuerte explosión, el crimen sería un crimen sin resolver, sin respuestas, todo hecho cenizas. El hombre sube a su caballo y sus guardaespaldas imitan su acción y se van al bosque.
El hombre llega a una mansión la cual el compro, se quita el antifaz de color n***o. Una mujer muy bella lo espera en la puerta de entrada de aquella mansión, el baja de su caballo y se acerca a aquella mujer, la abraza y le da un beso.
-Te has tardado más de lo habitual Alessandro- dice aquella mujer mirando con gran enojo al italiano.
-Solo fui a divertirme, después de todo para eso vinimos- dice riendo el hombre y recibe un golpe en la cabeza por parte de la mujer.
- ¡TE ESTABA ESPERANDO HACE UNA HORA Y NADA QUE APARECIAS! - dice aquella mujer enojada, el hombre se pone nervioso, él la mira y la abraza con ternura.
-Cálmate, que esto no le hará bien a nuestro bebe- dice el hombre tocando la panza de pocas semanas de aquella mujer.
-Escúchame bien Alessandro D`Bossio, para la próxima vez que tardes me avisas- dice aquella mujer apuntándolo con su dedo índice, Alessandro solo ríe.
- ¿Acaso estás celosa mi amada Cecilia? - dice Alessandro mirando a Cecilia con diversión
-Mejor vete a bañar que apestas- dice Cecilia evitando a Alessandro. Cecilia entra a la mansión seguida de Alessandro.
-Cecilia D`Bossio no has respondido a mi pregunta- dice Alessandro, Cecilia camina rápido y se encierra en su habitación.
-Si, Alessandro, estoy celosa maldito infeliz- dice Cecilia recostada en la puerta.
-Abre la puerta- dice Alessandro, Cecilia no le responde- abre la puerta- vuelve a decir, Cecilia abre la puerta y Alessandro la abraza- Puede que sea una escoria de persona, pero jamás me atrevería a engañar a la mujer que amo- dice Alessandro mientras abraza a Cecilia.
-Vete a bañar- dice Cecilia- hueles horrible- Alessandro solo sonríe ante el comentario de Cecilia.
-Está bien, lo que diga mi querida esposa se hará- dice Alessandro y besa a Cecilia, se separa y se va a bañar.
NARRA CECILIA.
Hace bastante tiempo que estoy aquí, la mafia, un lugar en donde estas vivo, pero, mueres por dentro, lo único que te salva es el amor...
Yo soy Cecilia D`Bossio, tengo treinta y dos años, pelirroja con algunas ondas, físicamente no soy tan alta y soy delgada. Soy madre de tres hijos y una hija, y esperando un quinto hijo.
Por orden de mi esposo Alessandro, soy una de las líderes de la mafia italiana "A COSSA NOSTRA" una mafia diplomática, aunque sea difícil de creer, una organización que ha cometido bastantes crímenes teniendo reglas, suena absurdo, pero, es una realidad.
Cuando conocí a Alessandro, jamás pensé que el estaría en este mundo, el mato a muchas personas, tantas que no puedo contarlas con mis manos, a pesar de todo es buen padre, buen esposo y un fiel compañero.
Lamentablemente en el momento que acepté estar con Alessandro tuve que renunciar a mi vida tranquila y no solo eso tuve que alejarme de mi familia y de los que más amaba, no sabía que esa decisión llegaría a afectarme. Tenía dieciocho años cuando conocí a Alessandro, cuando me enteré que él era mafioso y me dio dos opciones, unirme a él y abandonarlo todo o seguir con mi vida normal en Roma y olvidarme que alguna vez lo conocí; ya saben la decisión que tomé.
Poco tiempo después me casé con él, y tuve a mi primer hijo, Leandro D`Bossio, el será la persona que heredé la mafia una vez que mi esposo lo decida adecuado. Después de Leandro tuve a mis otros hijos y ahora esperando otro hijo o talvez hija.
En este mundo aprendes a valorar cada segundo de vida que tienes, jamás sabes cuando morirás, si seguirás viviendo, o tal vez y tengas suerte en morir de una forma natural; es casi imposible.
SOFIA TORALES...
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