Mathias no tiene la culpa

capitulo #1

Noooo déjeme, no me toque déjeme en paz.. no quiero por favor déjeme

- Ven se que tú también te vas a divertir

ven siente como me la pones solo con tenerte así de cerca...

-no por favor..

otra vez esta maldita pesadilla.

desde que pasó eso tan horrible no pude dormir en paz una sola noche más. siempre llegaba a mi mente ese maldito día y lloraba hasta sentir que me quedaba sin lágrimas...

Mi vida era feliz y tranquila con muy pocos lujos pero cómoda, gracias a mi trabajo y ganas de salir adelante.

Quería superarme para darle lo mejor a mi mamá, que se sintiera orgullosa de su hija y así recompensar un poco todo el sacrificio ella había hecho por mi antes de enfermarse.

trabajaba medio tiempo por las tardes después de la universidad, en un bufet de abogados muy prestigiosos era la asistente de uno de los abogados más importantes del pais poderoso y soberbio por todos los casos ganados de los cuales alardeaba con sus compañeros cada ves que podía.

Era un tipo maduro pero no viejo, bien parecido,alto y de buen cuerpo para la edad que tenía se veía muy bien el sueño de cualquier mujer, pero no el mío ya que no era mi tipo y que al conocer como era de chocante, engreído y prepotente hacía que ni siquiera un mal pensamiento se pasará por miente con el.

habían pasado más de cuatro meses desde mi ingreso a su empresa y nunca hubo más nada que una relación laboral. aunque el actuaba algo raro algunas veces al estar solos. nunca imaginé ese día se atreviera a tanto.

Ese día desperté muy temprano tenía que acompañar a mi mamá a una cita médica y después ir a la universidad. me levanté me bañé y me vestí con un jeans de mezclilla una camisa tres cuartos de jeans también y unos tennis blancos tenía un largo día quería estar cómoda. salimos de casa llegamos a tiempo

solo tardo dos horas el chequeo de mi mamá la dejo en casa y salgo con prisa a la universidad para después irme a mi trabajo, al salir me dirigí a la oficina lo más rápido posible ya que recibí un mensaje de mi jefe Alan Torres que decía necesito que llegue pronto a mi oficina

por lo que me apresure al llegar me dirigí de inmediato a su oficina toque la puerta y al escuchar la orden para pasar entro y lo encuentro sentado detrás de su escritorio.

-*Elsa* buenas tardes sr Alan dígame vine lo más pronto posible después de recibir su mensaje.

el solo me miró de pies a cabeza y sonrió sin decirme nada, le volví a preguntar qué necesitaba.

a lo que respondió a ti, le dije disculpe

el sacudió su cabeza y volvió a sonreír y me dijo, que necesitaba archivará unos documentos que estaban en mi escritorio y que fuera cuidadosa de colocar cada documento en su sitio.

asentí con la cabeza y le dije con permiso y me retire de su oficina.

al voltear solo pude sentir su mirada pero era una mirada rara y pesada que me dió un poco de miedo, salí de prisa y fui directo a mi escritorio al llegar y veo las carpetas me quise desmayar ya que eran muchas y se que tomaría todo el día en eso, sin tiempo que perder las tomo y me dirijo a la oficina de archivos al llegar todo en absoluta soledad y empecé mi trabajo escuché un poco de música mientras tanto desde mi teléfono y así me sumergí en mi tarea al ver la hora ya era tarde salí ya quedaban pocos en la oficina así que volví a entrar apresurarme pero ahora sí aburrida el celular se descargo...

paso el tiempo cuando escuché unos pasos al voltear estaba mi jefe parado detrás de mi.

- me asusto le dije exaltada

-tan feo soy me respondio

-Elsa* no es eso, solo que no pensé que usted vendría acá a estas horas

- Alan* ya me iba pero quería saber si aún quedaba alguien en las oficinas, pensé que hasta usted ya se había ido

-Elsa* estaba a punto de terminar para retirarme a mi casa y no dejar ningún pendiente para mañana.

Alan da un paso hacia mí me dice sabe que eres una mujer muy linda, que inspira ternura

- gracias le respondí y trate de alejarme ya que me estaba poniendo muy nerviosa jamás me había dicho cosas así.

porque te alejas me tienes miedo.

- no señor solo que no es prudente

No te gusto ?

No señor no me gusta

porque? que tengo de malo.

- Elsa* Nada no tiene nada de malo solo que no es mi tipo, y si mi disculpa es hora de irme lo hago a un lado me dirijo a la puerta, cuando siento me hala del brazo y me pega a el.

Suélteme hágame el favor y le doy una cachetada a lo que el se ríe y me pega de nuevo a su cuerpo con más fuerza y me toma de la cara y me da un beso.

el beso más asqueroso y cochino de mi vida, tome todas mis fuerzas y lo aparte de mi corro hasta la puerta y al llegar me doy cuenta está con llave volteo a verlo y la tiene en sus manos.

- buscas estos me dice y las hecha en su bolsillo.

me dice ven que no va a pasar nada que no te vaya a gustar es mejor que cooperes y así los dos la pasamos bien mira que si te portas bien y me gusta te puedo recompensar muy bien.

En ese momento me llene de irá le grite no soy una put* a la cual usted puede comprar, y empecé a gritar... el solo se reía detrás de mi

-grita todo lo que quieras estamos completamente solos.

meto la mano a mi bolsillo tomo mi celular y puedo ver cómo se apaga en mis manos, intente encenderlo y no la batería estaba muerta, el maldito se acerca a mi y me dijo ya terminaste a con tus niñerias me toma de los hombros y me tira al piso

y el se tira sobre mi besando mi cuello y tratando de abrir mi blusa, grite le suplique y forcejeo hasta más no poder pero fue inútil ese maldito cochino era más fuerte que yo, arranco mi blusa y con su mano agarraba las mías sobre mi cabeza y con sus piernas sobre las mías para que no lo fue a patear aplastaba las mías, pude sentir su asquerosa lengua y boca por todo mi pecho y solo me daba asco lloraba y gritaba era mi único recurso con la esperanza de que alguien estuviera por ahí y me escuchara pero todo era en vano, le rogué que me dejara, por favor no quiero, no haga esto y solo escuchaba que me decía que sintiera como se la ponía por estar cerca de mi. saque fuerza y lo empuje un poco haciendo cayera a un lado pero fue inútil me dió una fuerte cachetada que me dejó aturdida.. me tomo con fuerza y saco mi pantalón dejándolo hasta mis rodillas y mi tanga la arranco solo sentí el dolor del halón que dió no podía ponerme de pie me sentía atontada por el golpe no podía hacer más nada solo cerré los ojos y rogué pasará todo muy rápido pude sentir como entraba como un animal dentro de mi, lo que me hacía llorar a horrores cerré los ojos y los apreté sentía como se movía y decía sus cochinadas encima mío. después de un rato se detuvo y tumbó encima de mi. se levantó y quedé ahí tirada como medio muerta con los ojos cerrados no quería verle la cara de estúpido feliz por haber logrado su objetivo..

se acercó y me besó la cabeza y me dijo tal como lo imaginé eres exquisita...

se acomodo la ropa y se disponía a salir cuando se devolvió y me dijo al oido y cuidadito con salir de aquí y abrir tu linda boquita sobre lo que pasó, porque que crees a quien le van a creer a una simple asistente o aún prestigioso abogado como yo, además todo el mundo me conoce como una persona intachable piensa muy bien lo que vas hacer. porque en un abrir y cerrar de ojos puedo acabar contigo y tu mamita y la espero mañana puntual en el trabajo Aquí no paso nada..

larguese asqueroso le dije mientras me iba incorporando me quedé un rato sentada en el piso abrazando mis rodillas mientras lloraba como un bebé...

- porque a mí me tenía que pasar algo así

no soy una mala hija, no soy una mala persona porque Dios permitió me pasara esto a mi que cosa tan mala había hecho para ser castigada así pensé..

pasado un rato me levanté no sé cómo tuve fuerzas y salí tome un taxi y me fui a casa, al llegar ya mama estaba en su habitación así que entre de prisa a la mía para que no me viera como llegué y no quería contarle no quería preocuparla, entre al baño y me senté en la ducha no quite siquiera mi ropa, estando allí escucho a mi mamá entrar y tocar la puerta del baño.

-hija estás bien, estaba muy preocupada ya es muy tarde, nunca antes habías llegado así, estás bien

- no mamá me quiero morir era lo quería decirle pero respire profundo y le contesté si mamá solo estaba en una cena con unos compañeros, alguien cumplía años le dije...

- bueno hija que descanses te amo

- gracias mamá igual te amo a ti.

paso más de una hora y no quería salir de la ducha quería que el agua borrará las huellas que había dejado ese cerdo en mi, me sentía sucia. ya no podía más salí me quite la ropa me pare frente al espejo y pude ver las marcas habían en mi cuerpo, morados en mis pechos, caderas y piernas y mi rostro estaba algo hinchado por el golpe que me noqueó, me pegó fuerte el cerdo asqueroso.

Que voy hacer pensé en toda la noche, no seguiré trabajando en ese lugar, no quiero ver la cara de cerdo de ese miserable

no sé qué horas eran cuando el cansancio y todo el peso del día salió y me quedé dormida pero al instante desperté con una pesadilla de lo que me había ocurrido me levanté camine en mi habitación llore y llore que debo hacer lo denunciaré pero no me creerán terminaré en la calle, no me contrataran en ninguna otra parte y puede arremeter contra mi madre no puedo permitirlo.

Mi corazón estaba lleno de dolor,odio asco y rencor así que decidí no hacer nada y seguir más adelante te cobrare está Alan Torres te voy a asesinar con mis propias manos, cortaré tu m*****o y se lo echaré a los cerdos antes de acabar contigo, con ese deseo de venganza seguí trabajando en aquel lugar que era espantoso y se había vuelto una tormentoso para mí seguir así. no habla con nadie, ni con mamá ya que llegaba la saludaba preguntaba qué tal su día, checaba estuviera tomando sus medicamentos y me encerraba en la habitación.

un mes había pasado ya desde aquel trágico día para mi vida, después de eso evitaba estar a solas con ese cerdo ya que no hacía otra cosa que fastidiar y recordarme lo asqueroso que era.

Ese día tuvo una junta en la cual me tocaba acompañarlo y asistimos, todo el mundo salió de la sala de juntas menos el, ya era hora del almuerzo organice unos papeles y me disponía a salir cuando siento me hala hacia el.