─Akane, sé que eso no está en discusión. Mi preocupación está en que nos acecha un gran peligro; y yo…
─Padre, con o sin tu autorización iré. Quiero estar con Ignaelis. Estar a su lado, protegerla. ─le interrumpe Kaory con mucha determinación en su voz.
El señor Chinami está muy preocupado, por toda la situación. El entiende porque Kaory quiere ir, pero tiene temor de que algo le suceda, por toda esta situación. Pero, ve la determinación en la mirada de su hija. Sabe que ella ira aun si él se lo prohíbe.
─!está bien, cariño! ─pone una mano en su hombro derecho.
─! Gracias padre! ─Kaory lo abraza.
En otro lado. Se encuentran reunidos cuatro individuos misteriosos, en una especie de cueva alumbrada con antorchas y hogueras. Cubren sus identidades con máscaras representativas. El primer
