Capítulo 54. Una nueva bendición y el regreso del coronel. Paulina y las chicas no paraban de dar vueltas, reír, bailar y gritar. Por fin la Paulina decidida había vuelto a ellas. -- ¡Eso está mejor amiga! – exclamó Diana feliz. Ella venía de la antigua mansión Rousseau de encargarse del diseño nuevo para la fundación. -- Este salió mejor – señalo Paulina al ver la repetición, las chicas no habían parado de hacer videos en sus celulares, de pronto todo se puso n***o, Paulina perdió la conciencia por un momento. -- Cuidado Pau – gritó Diana quien la sostuvo en sus brazos. Katia asustada la ayudó a acomodarla en el sillón Cuando Paula recobró la conciencia sus amigas no dejaban de mirarla. El silencio se adueñó de toda la habitación. Mientras las chicas intercambiaron miradas antes de

