-Bien- aquella elegante asistente le había ofrecido tomar algo juntas y es por eso que caminaban hacía la cafetería del complejo médico, atravesaban las puertas de vidrio en ese instante- los resultados fueron enviados al correo electrónico de el señor directamente. Se supone que debes tomar…- ella leía su receta médica desde el celular cómo si no tuviese la hoja en físico dentro de su delicada mano- Hierro, Multivitamínicos, y ácido fólico, pero eso será entregado a tu casa a mediados de la tarde. -Te lo agradezco- murmuró Isa dando un vistazo al acogedor lugar y vio las altas mesas de acero con tope color blanco, las sillas eran de la misma combinación de materiales y se sentó en ella con un brinco. -No lo hagas, agradécele al Señor- refutó Isis tomando asiento, hizo una seña y una son

