Trague en seco, Amy estaba mirándome extraño, como si estuviera pensando en algo para decirme pero no sabia que o simplemente no quería decirme aquello que pensaba. Yo por mi parte la miraba sin expresión alguna, fijamente como a ella solía ponerla nerviosa.
–¿Dime? –le dije, de pronto los chicos ya no estaban a mi lado, y ya muchos habían entrado a sus salas.
–Yo... Quería disculparme por lo de ayer con Derek.
–Ahh –mire sus pies, pero subí la miraba rápidamente a ella– No fue nad...
–Si, no quiero que haya problemas con el, ni que toda la escuela lo odie –alce una ceja– por como se comporta.
–Bueno en ese caso, el debería estar aquí, no tu.
–Imposible, de todas formas, era solo eso a lo que venia.
–Ok –Mordí con mis dientes mi mejilla tirando de mis labios hacia el lado contrario. Nos quedamos mirando unos largos segundos, la verdad es que estaba muy incómodo. Solo me dio una sonrisa antes de irse, sabia que quería preguntarme algo, y yo igual. Pero al parecer ambos tragamos el orgullo y nos fuimos a nuestras salas. Me tocaba química, cuando entre al salón la mayoría de los alumnos ahí me miraron y el profesor dejó de hablar.
–Buenas tardes Miller.
–Señor Coleman.
–Que no se repita –asentí– toma asiento –me miro por ultima vez antes de seguir escribiendo en el pizarrón.
La clase transcurrió de lo normal, aun que fue un poco mas larga que las otras. Cuando tocaron salí con mi mochila, los pasillos estaban llenándose rápidamente, antes de llegar a mi casillero me encontré a Jax saliendo de una de las salas.
–¿Que harás hoy? –me pregunto con una sonrisa algo traviesa.
–Espero que nada, ¿Por que esa cara de pervertido?.
–Hoy viene mi prima y unas amigas, al parecer se quedaran de la semana.
–Oooh, te entiendo. Quieres coger con una de ellas y las otras dejarlas, con nosotros.
–Si, son dos amigas pero una de ellas me vuelve loco man, y ya sabes lo que hará papi – Solté una carcajada.
–Negro pervertido –me golpeo bruscamente el hombro.
–¡Racista de mierda!.
–Mientes.
–¿Que pasa? –los demás chicos se acercaron.
–Vendrás hoy entonces –Jax me miro.
–¿Donde irán? –pregunto Jacob.
–Hoy llega mi prima de España con sus amigas, allá es de vacaciones en este tiempo así es que llegan hoy a mi casa, yo claro follare con una mientras las otras dos se quedan con ustedes, si es que van a mi c....
–Yo me follo a tu prima –soltó Spike, Jaxon solo lo miro fulminante.
–Recuerdo que tu prima quería con Caleb, hace unos cuantos años atrás.
–Teníamos 19 años.
–Todas quieren con Caleb –Spike se cruzo de brazos.
–No es mi culpa ser tan irresistible –solté una carcajada y los demás me miraron incrédulos.
–¿Entonces nos venos en mi casa? –los tres asentimos– a las cuatro y media llegan – comenzamos a salir a los estacionamientos.
–Nos vemos –nos despedimos de un apretón y un abrazo y nos fuimos cada uno a sus casas, menos yo claro. Anna.
–Apresúrate –Anna me ignoro por completo y siguió hablando con una amiga algo mas baja que ella, toque la bocina y ella me miro furiosa, solo reí y espere a que subiera para irnos a casa.
–¿Caleb? –alguien golpeaba la puerta, una de las chicas.
–¡Ya voy! –removí mi cabello y abrí la puerta, Renata del otro lado me miro con una sonrisa –¿Que pasa?.
–El señor Edgar quiere hablar contigo, te espera en su oficina –Mire tras ella, Carla salía de la habitación de al frente mío, en cuanto me vio me sonrió, también note que Renata me miro por completo antes de irse. Entre a mi habitación y me vestí, ya era hora de irme a la casa de Jaxon.
Rocie perfume, tome mi celular, las llaves del auto y salí.
Cuando ya estaba frente a la puerta, toque un par de veces antes de escuchar el "Adelante". Entre y me senté frente a su escritorio.
–¿Que tal la escuela? –fruncí el ceño y solté una risa.
–¿Enserio?, ¿Me llamaste para preguntarme sobre la escuela?.
–Eres mi hijo, y debo ser responsable como padre en preguntarte que tal vas –no quise comenzar una discusión, por que la verdad el, que digamos no era taaan responsable como padre, recuerdo que siempre se iba de viajes de trabajo con mi madre y me dejaban solo por varias semanas y con suerte llamaban una vez en todo el transcurso. Rodee los ojos y respondí a su anterior pregunta.
–Me ha ido bien.
–¿Vas saliendo ahora?.
–Si.
–¿Donde tus amigos o algún otro lado? –lo mire confundido.
–Con los chicos.
–Genial, ¿Donde van?.
–¿Eso importa?.
–Responde.
–¿Tengo veintitrés años lo recuerdas?.
–Ok, esta bien.
–Eres raro.
–Te llamaba realmente para preguntarte sobre el encargo que te hice antes de irme, y hablarte de un tema particular.
–Fui a dejarlo donde tu me haz dicho, el comprobante lo deje sobre tu escritorio cuando llegue.
–Si lo vi, ¿Pero no tuviste problemas? Quiero decir ¿Ellos no te hicieron problemas?.
–No –fruncí el ceño y me acomode mas en el asiento– fueron super amables.
–Perfecto.
–¿De que tema "particular" me querías hablar?.
–Tu madre me estuvo contando que ayer saliste con una de las chicas.
–Dos, de hecho fueron dos –creo que ya se para donde va esto.
–¡Oh!, ¿Sabes las reglas de esta familia cierto?.
–Algo, creo –vi que el rodó los ojos, nunca me importaron sus tontas reglas y tampoco me las se.
–En fin una de esas reglas es no relacionarse con el personal de servicio.
–¿Que?, de donde haz sacado esa mierda.
–¡Hey!, ¡no me hables así nunca mas! –alzo la voz apuntándome con su dedo.
–Porque dices que no se puede, ¿Ahí algún motivo?.
–¡Es una regla y la respetaras te guste o no! –rodee los ojos.
–¿Puedo saber el motivo?, me gustaría saberlo.
–Se prestara para malos entendidos.
–Yo no tengo ni una intención con alguna de ellas, solo las invite porque era una salida de parejas y como no tenia y Spike tampoco decidí llevarlas, no fue para nada mas. ¡No es para tanto escándalo!, ni que me hubiese follado a alguna.
–De todas formas, espero a verte dejado claro mi punto –comencé a fastidiarlo.
–¿Que punto? – escuche como soltó un bufido un poco frustrado.
–El que no puedes relacionarte con el personal.
–Te he dicho que no me estoy relacionando con ellas.
–Si piensas seguir fastidiándome con lo mismo, tendré que verme obligado a despedirlas.
–¡Hazlo!, me importa un carajo.
–No m....
–¿¡No sabes que mas!?, yo me iré, si me iré de esta casa. Creo que ya entiendo el doble sentido de tu puto punto – me levante de la silla furioso.
–Bueno, hazlo. De todas formas no creo que te importe dejarnos de nuevo. Te fuiste dos años lejos y ni una llamada nos dabas.
–Aaah claro ahí se ve el padre responsable que fuiste, ¿Que tal si yo estaba muerto?, ¿O estaba en un problema?.
–Haha ¿Problemas?, ¿Tu? Haha los conoces de sobra.
–Un padre responsable... Claro, si para ti irte por meses al otro lado del mundo por trabajo y dejar a tu hijo solo en cada era ser un padre responsable, ¡Vaya!, entonces nose lo que le esperan a mis hermanas o a mis hijos de mi.
–No hables de responsabilidad cuando tu haz reprobado dos cursos seguidos y luego decidiste irte lejos y dejarlo todo por escapar de tus propios problemas.
–¿¡Eso es todo!?....¿¡Algo mas que decir!? –el se quedo callado mirándome enojado– se nota cuanto me haz extrañado.
–Vete de nuevo, a ver si esta vez te extraño –me contuve las ganas de lanzarme a golpearlo por el simple hecho de que era mi padre y si nos veíamos en esa situación, todo terminaría mucho peor. Para mi.
Salí de su oficina cerrando de un vuelo la puerta, subí a mi habitación antes de entrar mi celular sonó.
–Bro, ¿Vienes en camino?.
–Me tardare unos minutos, aun no salgo de casa.
–Ok, te esperamos con los chicos.
–Ok –era un desastre haciendo maletas y toda la ropa que tenia ordenándola yo mismo no me caería.
Me quede apoyado en la pared buscando a alguna de las chicas que pudiera ayudarme y mágicamente apareció una de ellas.
–Alison –ella me miro y se acerco con una sonrisa en su rostro, yo no estaba igual que ella. Y ella se percató porque borro la sonrisa de inmediato.
–¿Dime?.
–Ayúdame.
–Claro ¿A que?– Entre a mi habitación y ella me siguió, cerré la puerta.
–Espérame aquí –entre al walk-in clóset, saque las maletas dejándola en la cama, volví a entrar y comencé a sacar la ropa por montón– quiero que metas todo como puedas.
–Claro –ella con una mirada extraña en su rostro, comenzó a doblar todo la ropa y a organizarla en las dos maletas, mientras yo saque el tercero y ultimo montón de ropa.
En mi mochila una de esas enormes para acampar, metí todo lo que es perfumes y cosas para la ducha que traía de Inglaterra, mi laptop y una cartuchera de recuerdos que Hail había metido ahí antes de irse de casa, recuerdo haberla sacado por sorpresa en cuanto llegue aquí. Después de terminar con eso, baje a buscar algo de ropa mía que estaba en la logia, marta me vio y me iba a hablar pero yo iba demasiado rápido y concentrado en mi furia como para tomarle importancia. Llegue nuevamente donde Alison, ya tenia una maleta lista, pero faltaba por cerrar.
–Subete sobre ella.
–¿Que?.
–¡Que te subas!.
–Esta bien –me senté sobre esta y yo pase el cierre por toda la orilla, mi mano paso a tocar una de sus piernas pero no tome importancia.
Comenzamos a doblar la otra ropa y a meterla en la maleta.
–¿Puedo preguntarte algo?
–Lo que sea.
–¿Porque todo esto?.
–Me marcho, ¿No es obvio?.
–Ya veo, pero. ¿Porque te vas?.
–Discutí con mi padre eso es todo.
–Sabes que puedes contarme cual....
–¡No!, ¡No puedo maldita sea! –Alison se sobresalto, me arrepentí de lo que cause y trate de relajarme un poco– l-lo siento no debí gritarte de esa manera, siempre tuve dramas con mi padre, era de esperarse que volvieran las peleas entre nosotros.
–No te preocupes.
–No quiere que me relacione con ustedes.
–¿Porque?.
–Para no haber malos entendidos.
–Perdóname pero.... ¿A caso tu padre esta loco?, ¿Es una forma de ser clasista?, porque yo recuerdo que antes en una familia de clase alta se les prohibía relacionarse con los sirvientes por ser de clase baja. No creo que la excusa que te dio tu padre sea de verdad.
–Mi padre aun que no lo creas no es clasista, nadie de mi familia a excepción de mi abuela.
Me puse la mochila en la espalda y toma ambas maletas.
–De todos modos, fue un gusto haberte conocido– rodee los ojos.
–No es que me vaya al otro lado del mundo, ni para siempre.
–Pero tal vez cuando tu vengas de visita ya no este aquí, nadie sabe.
–Adiós.
–Adiós.
Camine por el pasillo hasta las escaleras.
–Caleb –me voltee.
–¿Dime?.
–Si es que llego a irme, ¿Nos seguiremos viendo?– sonreí a medias y me acerque a ella dejando las maletas donde mismo, saque mi celular y entre a contactos, una vez en contacto nuevo le digo.
–¿Que te dice esto? –le entrego mi celular y ella miro la pantalla para anotar su numero con una sonrisa.
–¿Entonces?.
–¿Entonces que?.
–Nos estamos viendo –bese su mejilla y me fui.
Cuando baje estaba mama y mis hermanas en la cocina.