Intitulado

1979 Words
POV EDUARDO ¿Qué le pasa a esa chica que no me quita la mirada de encima? Esta muy guapa, de hecho está buena, aunque un poco pasada de peso para mí gusto, pero tengo que admitir que se ve bien y podría poner por un lado mis preferencias y me la tiraría si ella me lo pide. Pufff ¿pero que estoy diciendo? Creó que me estoy volviendo loco, está sequía me está volviendo loco, estoy casi frente a la chica, cuando se abalanza sobre mi e intenta darme una cachetada, la cual logro esquivar con facilidad ya que la chica está muy ebria. —Eres un…. —Shhhh tranquila leoncita. —iii eres un imbécil Eduardo!!! ¿Qué? Me conoce ¿Pero de dónde? Yo no la ubico de ningún lado. —¿De dónde me conoces? Ella se retrae y me observa muy seria, sacude su cabeza como tratando de entender lo que está pasando. La chica me observa muy confundida y me dice: —Tu no eres Eduardo —Si que lo soy. —Pero no eres mi Eduardo, no, tú no eres el imbécil de Eduardo. —Eso es verdad, porque yo a ti no te conozco. —Te pareces tanto a él. —Ah ¿sí? Pero yo soy único —Todos son iguales, cortados por la misma tijera . —No, perdóname pero te equivocas ….. me puedes decir tu nombre por favor. —Soy Debí —¿Debí? —Ayyy si Debi, bueno Débora para ti . —¿Estás hablando en serio? Porque a mi me gusta que lo mío este siempre conmigo, me gusta disfrutarlo y odio compartirlo. Imagino que Débora no me entendió en un principio porque se quedó mirándome muy seria y me imagino que su ardilla está corriendo muy fuerte para que comprenda mis palabras, cuando lo logró me contestó: —Ja, ya quisieras —De verdad que sí. —Déjate de bromas. —No es broma, soy muy directo y me encantaría estar contigo. —Pero acabo de estar con alguien y después de entregarle mi virginidad lo escuché decir que nuestra relación fue solo por una apuesta para conseguir mi virginidad. —Wow, si que te fue mal en tu primer experiencia —Pero no voy a llorar yo ya soy mayor de edad. Esta chica me da mucha ternura, no tiene filtros en la boca imagino que es el alcohol que la hace hablar. —Me parece perfecto, además ese tipo no merece tus lágrimas. —De eso estoy segura y ¿sabes? Tú me gustas. Que atrevida, me gusta y no sé por qué —Pues tu a mí también ¿ te gustaría tomarte un trago conmigo? —Mmm ¿Por qué no? —Joven por favor dele a la señorita uno más de lo que estaba tomando, a mi dame un vodka tonic. —Claro —Ay pero pensé que tomabas algo más fuerte. —No hoy, si lo que quiero es poder conocerte. —Tu me quieres llevar a la cama. —No te lo voy a negar —Pídemelo, claro si no te importa que acabo de estar con otro. —Tampoco te lo voy a pedir, no me importa que hayas estado con alguien más está noche, es más te enseñaré que puedo ser mejor que cualquiera, pero necesito que tú me lo pidas —¿Qué? ¿Algún fetiche? —No, simplemente me dije: si esa chica me pide que esté con ella lo haré. —Jajaja vaya que eres gracioso y tonto —¿Por qué tonto? Digo gracioso si soy —Porque por estar esperando que te lo pida te saldrá un grano en la lengua. —¿Un grano en la lengua ¿ ¿Cómo? —No haz escuchado qué “cuando se te antoja algo y no te lo comes te sale un grano en la lengua” —Oh sí. —Pues por eso eres tonto, no te comerás tu antojo por no pedirlo. Vaya que es astuta esta chica y cada que me habla de comerme mi antojo se me antoja más ¿Y si se lo pido? —Esta bien princesa v….. —NO ME VUELVAS A DECIR ASÍ ‼️ —OK, OK no te enojes, ¿Débi pasarías un rato conmigo en mi habitación? Ella me mira a los ojos muy seria, toma la bebida que nos acaban de traer y se la toma de un solo trago, WOW si que está dolida, tal vez solo la llevo a mi habitación para platicar, creo que estaría mal acostarme con ella está muy vulnerable, pero si la dejo aquí cualquier otro se va a aprovechar de ella. —Sí Me quedo por unos segundos muy sorprendido, esta chica está loca o es muy confiada, ¿acaso no ha escuchado de los asesinos seriales o de los violadores? En fin, le tomo la palabra y me la llevo de aquí. Saco un par de billetes y los dejo sobre la mesa. —Vamos, por cierto ¿Pagaste lo que consumiste antes que yo llegara? —Claro, si no soy una ratera, ahora vámonos por favor. La tomó por la cintura para que no caiga y la llevó hasta el auto, la ayudo a subir y tomo el control del auto, no tardamos en llegar al hotel , pero ella ya está muy dormida así es que la cargó y camino hasta el elevador que por suerte está abierto, un empleado que está ahí fuera me ve raro pero no dice nada. —Se paso un poco de copas mi ….. —Lalo te amo Débora se abraza a mi cuello y me da un beso en la mejilla. —Su novia joven —Así es, mi novia, hasta luego, me la llevo a descansar. —Si joven, no lo molesto más. Sin más testigos llegamos a mi piso y camino a toda prisa hasta llegar a la habitación, abro y coloco rápido a Débora en la cama, vaya que está maciza la mujer, pero por lo que pude sentir está muy firme, ni modo no podré probar, pues se durmió, ahora sí que me saldrá un grano en la lengua. —Ya llegamos. Vaya se despertó de golpe, si que es extraña. —Así es. —Bueno pues ven, tómame. —Creo que no será posible, mejor descansa, si mañana por la mañana aún lo deseas no dudaré en complacerte. —Por favor —No —Él tenía razón, solo con dinero de por medio alguien se atrevería a acostarse conmigo —No Débora tu eres muy bella, pero…. —Estoy gorda, fea, soy —No no no no, nada de eso, simplemente se me hace un abuso, tu estás ebria ¿Y si mañana dices que no querías? Que tal que me quieres demandar por violador. —Eso nunca, no estoy tan ebria y estoy hablando muy en serio, quiero que borres de mi sus caricias, necesito que alguien más recorra mi piel y asegurarme que no queda rastro de él en mi, y Las lágrimas corrían por su rostro y descendían por sus mejillas y luego bajaban aún más hasta llegar a su cuello y… Es algo tan contradictorio. —Por favor Eduardo hazme tuya. Debo estar loco. —Lo haré, pero si en algún momento te arrepientes házmelo saber. —De acuerdo. POV DÉBORA Eduardo se acerca a mi como león a su presa, pero es muy, muy delicado conmigo, no entiendo cómo se parece tanto a Eduardo el imbécil, bueno de lejos, en su andar y algunas otras facciones como su cabello quebrado y n***o, tal vez por eso me confundí, pero este Eduardo es más Guapo, más hombre, huele delicioso y está un poquito más fornido, sin hablar de su sonrisa encantadora y esos ojos que seducen, tiene una mirada tan penetrante, pero tan dulce , tan intimidante, pero tan tierna, creo que me puede ver el alma este hombre, no me había dado cuenta que estoy llorando hasta que Eduardo toma mis mejillas con sus dos manos grandes y las seca con sus pulgares después los lame, hace lo mismo por todo el recorrido que hicieron mis lágrimas, me comienza a lamer las lágrimas que llegaron al cuello y luego sube hasta mis labios y los besa con devoción, yo no dudo en responder, me trata con tal Delicadeza, pero también con pasión y……no les diré todo lo que me hizo, solo algo les diré, Eduardo el imbécil no le llega ni a los talones a este Eduardo, el Eduardo experto, o el Eduardo cariñoso o… no sé, ya le pondré algún adjetivo calificativo, ahora necesito disfrutar de sus caricias y sus besos. —Débora, para ser tu segunda vez eres muy buena ¿No te lastimé? —No —No use preservativo, no sé qué pasó conmigo, yo no soy así, soy muy precavido y responsable. —No te preocupes, tampoco uso Eduardo el imbécil. —¿QUÉ? Por Dios Débora ¿Te das cuenta que podemos estar contagiados de algo? Eres una irresponsable igual que yo. —No te asustes, él se acaba de hacer unos estudios según él por algo de él fútbol, pero creo que solo quería que yo supiera que está limpio. —Y estás segura que si se hizo los análisis o solo te MINTIÓ —Estoy segura, se los hizo en la clínica del padre de mi mejor amiga, ella investigó todo. —Ok, confiaré en ti, pero no solo sé trata de una enfermedad también puede haber un embarazo. —Ya haz confiado bastante en mi y yo en ti, te aseguro que no pasará nada, absolutamente nada, no quedaré embarazada porque tengo método anticonceptivo, gracias por ser tan gentil conmigo, ahora creo que es tiempo de — De ninguna manera, primero nos bañamos y después si quieres te llevo a tu casa. —Ok, ve a bañarte y después yo. —Vamos juntos. Yo quería huir mientras él se bañaba, pero pues así no se puede. —Esta bien Nos bañamos con mucha calma, él me enjabonó, más bien me bañó, mi mmm mi va**** la lavó con sumo cuidado más bien la acaricio, me volvió a hacer suya y después salimos y nos tiramos en la cama a dormir, el cayó rendido casi de inmediato, yo no pude pegar el ojo, me levanté muy sigilosamente, me vestí y salí de aquella habitación de hotel a toda prisa, pero en silencio. Cuando llegue abajo logré tomar un taxi y lo hice llevarme cerca del departamento, unas calles antes de llegar a mi departamento me bajé, no estoy loca, pero tal vez Eduardo me quiere buscar y si era inteligente le preguntaría al taxista, pues era un taxista al servicio del hotel, en fin tome otro taxi que me trajo a mi departamento el cual se encontraba solo, seguramente Mire se fue a su casa, ella odia dormir sola aquí, yo también lo odio pero a mí no me queda de otra que aguantar dormir sola cuando ella se va a Ver a sus padres o tienen alguna fiesta sus compañeros, mi familia está en otro país por lo que no puedo correr a su lado. Bueno voy arrastrando mis pies hasta mi habitación y me tiro a la cama. —i POR DIOS DÉBORA ESTAS LOCA‼️ TE ACOSTASTE CON DOS HOMBRES EL DÍA DE HOY ¿Dónde quedó la chica recatada? ¿La pura? ¿La que se iba a guardar hasta el matrimonio? ¿Dónde te perdiste Débora? ¿Dónde? Fue en un abrir y cerrar de ojos que hice tantas estupideces juntas, está es la peor noche de mi vida y a la vez la mejor. No puedo creer que haya sido capaz de faltarme al respeto a mi misma así como lo hice.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD