¿Quién de los dos?

fue una apuesta

POV DÉBORA

Ahora sí me doy permiso de llorar, de revolcarme en mi dolor, lloro de decepción, de rabia, de asco, ¿Cómo me pude meter con dos hombres esta noche? Jamás imaginé caer tan bajo, soy una cualquiera, después de haber sido un ejemplo de bien para todos ¿Qué dirían si se enteran? ¿Quién en su sano juicio hace lo que yo hice?

—Por Dios Débora te faltaste al respeto a ti misma y…..ahhhhhhh imbécil Eduardo solo jugó conmigo, apostó que lograría acostarse conmigo y lo logró, ahhhh me puse en charola de plata y…… ahhhh……

—Débora

Mi mejor amiga me encontró llorando tirada en el suelo de mi habitación, ya habían pasado varias horas ya era de día y hoy era mi graduación, seguramente estaba yo Hecha un despojo humano

—¿Qué te pasó Débi?

—Nada

—No salgas con tonterías Débora, Mira nada más como estás, pareciera que te pasó un auto encima, además mira nada más y tus ojos están inflamados estuviste llorando toda la noche ¿Qué te hizo el ******* de Eduardo?

—No pasa nada de verdad amiga, no pasa nada

—¿Me quieres ver la cara de ****** Débora?

—No Mire, es… es… fue una apuesta

—Débi no te entiendo nada, por favor levántate y ven aquí, Hablemos por favor me estás preocupando.

—Eduardo me dio la cara de ******* todo el tiempo, lo único que quería era que me entregara a él, Lo nuestro fue Solamente una mentira, me convenció de andar con él solamente para lograr que yo le Entregará mi virginidad Porqué apostó Que él me desvirgaría, ganó mucho dinero por mi virginidad, por haberse convertido en el que me estrenó.

—Eso no puede ser Débora

—Claro que es posible , lo fue y no sabes lo ******* que me siento por haber caído en sus redes, por haber caído en sus engaños, por haberme entregado a él, Tú me lo dijiste una y otra vez y yo no te quise escuchar, mírame ahora , estoy sufriendo las consecuencias y…

—¿Hay algo más?

—Sí pero me da mucha vergüenza decirlo.

—Por favor Débora No tienes por qué tener vergüenza conmigo, entre nosotras no hay secretos, por favor que no sea ahora que te quieres retraer, no comencemos ahora con secretos.

—Está bien te lo voy a contar, pero de verdad es que me da mucha vergüenza, después que estuve con Eduardo y escuché sin querer la conversación que tenía con El imbécil de su amigo Hugo, lo único que hice fue salir huyendo de aquella casa donde me llevó, lo que menos quería es que tú me vieras y me dijeras en mi cara te lo dije, entonces……..

Con o sin vergüenza le platiqué a mi amiga todo lo que había pasado, le hablé de Eduardo el bueno, perdón aún no tengo un adjetivo calificativo que lo Describa a la perfección.

Mireya me miraba sin poder creer lo que le platicaba, Y sí ni yo misma puedo creer las estupideces que cometí hace unas horas y no le puedo echar la culpa al alcohol, aunque para ser honestos sí influyó, pero no para llegar a tal grado.

—Es que lo escucho y no lo creo Débora.

—Por favor no me digas nada.

—Si te refieres a que no te regañe o no te juzgue no lo voy a hacer, amiga, Pero la realidad es que creo que cometiste un error, aunque lo bailado nadie te lo va a quitar, amiga, ya relájate, vamos báñate arréglate te voy a maquillar para disimular esas ojeras Pero antes de eso te pondremos unas bolsitas de té de manzanilla para desinflamar tus ojos e inmediatamente después que tus padres se vayan vamos a ir a hacerte unos análisis no quiero que estés contagiada de algo.

—Pero las enfermedades no se ven inmediatamente, Mireya

—Yo lo sé, Pero hay infecciones que sí se detectan inmediatamente y más te vale no meterte con nadie más hasta no estar segura de que estás limpia, Y eso será en tres o seis meses.

—Si no lo vuelvo a hacer por ese tiempo no va a ser porque haya tenido alguna mala experiencia, al contrario lo que viví la noche de ayer en cuanto al sexo fue lo mejor de lo mejor, no lo voy a hacer porque debo ser responsable, porque mi cuerpo merece respeto, Y porqué, Sí, en el remoto caso estoy infectada de algo no quiero que alguien más se contagie, pero independientemente de eso no tengo ganas de volverme a faltar al respeto.

—Ayyy amiga, sigo en shock jamás imaginé que dejarte ir anoche con Eduardo te traería tanto dolor.

—Ya lo superaré, yo fui quien se puso de pechito lo único que queda es aceptar que cometí muchos errores anoche . vamos a alistarnos no quiero que mis padres me encuentren así.

—¿Vendrá Nathan?

—No, está en sus últimos exámenes, ya sabes cómo es de matadito, terminó su maestría en un año.

—Tu hermano me encanta y es igual a ti de matadito.

—Sí, lo sé, me lo has dicho un millón de veces, eso de que te encanta.

—Y no me cansaré de hacerlo, hasta que por fin me haga caso.

—Amiga no quiero que salgas lastimada, Nathan es muy especial con las mujeres, Mire, no eres su tipo, deja de esperar por él y busca alguien con quién ser feliz.

—Mala amiga, en lugar que digas que me ayudarás.

—Lo voy a intentar te lo juro, pero si te hace sufrir yo no seré responsable, a los dos los quiero mucho, pero conozco a mi hermano, si te empecinas en estar con él, atente a las consecuencias.

—¿De verdad me vas a ayudar?

—Sí, lo haré

—Gracias, gracias, gracias amiga.

—No acepto reclamos yo te advertí, Nathan es muy duro y muy directo, no le importa romper corazones.

—Prometo no quejarme

Ja puras mentiras, pero estos dos me dieron grandes sorpresas con el tiempo.

POV EDUARDO.

Se esfumó, parece que a Débora se la trago la tierra, el taxista me llevó donde la dejó, recorrí el lugar, pregunté por ella, pero nadie supo decirme quién era, sí, le tome una foto en aquel antro se ve tan hermosa, si no tuviera esta foto diría que fue un sueño, un hermoso sueño.

En fin tendré que volver a la realidad, tengo una reunión y después tengo que regresar a México.

POV “EDUARDO IMBÉCIL “

—ME ESTAS DICIENDO QUE DESAPARECIO DE LA NADA, eso es una tontería.

—Te juro que es verdad Hugo, estoy seguro que nos escuchó hablando, anoche fui a su departamento, pero no había nadie, me lo dijo el portero

—¿Qué piensas hacer?

—Nada

—¿Cómo nada?

—No voy a hacer nada, si ya lo sabe no le voy a rogar, además yo me voy mañana.

—¿De verdad?

—Sí, también me graduó mañana, eso ella no lo sabe y volveré a mi país

— En todo le mentiste. ¿te soy honesto?

—Sí

—Creo que nos pasamos con Débora.

Tiene toda la razón, nos portamos como imbéciles, pero no le daré la razón en voz alta, la ca#@***, pues ahora nos aguantamos.

—No es tiempo de arrepentimientos Hugo, mejor olvidemos esto, jamás la volveremos a ver, mejor vamos a entregar este documento que nos falta.

—Eres un…. Yo sí me siento muy mal por Débora.

Créeme que yo también me siento muy mal amigo, esa chica es especial, pero no podré tenerla nunca más.

Sin que Hugo sepa me voy a la graduación de Débora, obviamente no me acerco, desde lejos la miró tan hermosa, ese vestido se le ve excelente, no importan sus kilitos de más, es el porte que tiene que la hace ver mucho mejor que muchas flacuchas. Es la última vez en mi vida que te veré princesa, La veo abrazar a sus padres y es momento de irme, no quiero que me vea y arruiné su momento especial.

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Ya pasaron algunos meses y yo me encuentro descansando en la casa de mis padres, mañana me incorporo a trabajar a la empresa de mi padre, mi hermano es su mano derecha, Es un hombre muy estudiado y muy trabajador, espero algún día ser como él.

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—¿Estás listo Damián?