Persiguiendo a mi futuro esposo

Capitulo 2 - Día 1

Viajaba en uno de esos colectivos lleno de gente.Eran abiertos sin vidrios, no había ningún tipo de seguridad en ellos. Pero aún así era uno de los accesos más fácil para llegar a los distintos pueblos.

A mi lado unos niños estaban comiendo muy felices unas manzanas que le había obsequiado hace unos minutos. El resto de pasajeros ignoraba mi presencia, en parte me relajaba.

Mis padres sabían lo que hacía, por eso mi papá enviaba gente a cuidarme, sin que me diera cuenta. Suspiré, apesar de eso casi me han matado mas de 10 veces.

Pero ahora tenía un nuevo objetivo tenía que encontrar a ese hombre misterioso a como diera lugar.

Viajabamos con mucho ruido, lis engranajes del motor a punto de salirse, los niños riendo, los hombres discutiendo de quién sabe que. Y yo mirando atravez de una de las aperturas del costado, el desierto.

Era muy extraño encontrar una planta, la mayoría de las especies estaban extintas.Tambien en algunas zonas era muy difícil respirar.

Por eso en el mapa estaba todo marcado por zonas. Yo iba hacia la zona violeta, en este caso. Según el color era el nivel de oxígeno y como se imaginarán, el nivel de riqueza.

Los ricos obviamente se habían apoderado de las zonas con más oxígeno. Allí si encontrabas plantas, animales y por sobre todo agua.

Yo vivía en una de esas zonas, pero me disgustaba enormemente ver la cantidad de niños que suplicaban por un poco de agua y los echaban como ratas.

Sabia que adónde me dirigía no había mucho oxígeno, aunque aún así era respirable. Esperaba encontrarlo antes de llegar a la zona negra.

Ahí si que había que entrar con oxígeno, no se podía respirar. Me será más difícil encontrarlo con la máscara.

Me incline levemente a mis rodillas un poco desesperanzada. Cuando un movimiento brusco me saco de mis pensamientos pesimistas.

Habíamos llegado a la entrada del lugar , todos bajamos. Ningún colectivo entraba en la pueblos, solo nos dejaba en la entrada. Aunque aveces ER imposible prácticamente llegar.

Como ahora .

Desierto, tras desierto. El sol inscipiente por encima de mi cabeza. Calce mi sombrero que tenía unas telas a los costados. Comencé a caminar, detrás de mi espalda llevaba una mochila con bastante agua era grande pero refrigeraba el agua y a la vez me mantenía fresca.

Los niños seguían caminando sin mucha molestia al parecer estaban acostumbrados. Yo sentía que me moría en cada paso , tampoco me podía tomar toda el agua en esa caminata.

Debía guardar para el resto del viaje, talvez fueran días. Semanas no lo sabia.Sople mi nariz intentando refrescarme un poco.

Daria lo que fuera por un ventilador portátil, una lluvia como había antes. Hasta me conformaría con que alguien me tirará una escupida.

Entre el calor sofocante , la falta de oxígeno, me estaba mareando.Vi a lo lejos el pueblo, y sonreí no faltaba tanto.Pero mis piernas en un momento comenzaron a no obedecer , me temblaba hasta lo que no tenía.Todo se volvió oscuridad.

La luz comenzó a molestarme , intente abrir los ojos sin éxito. Sentía el cuerpo muy pesado y cansado. Pero no estaba en el suelo arenoso del desierto. Tampoco la luz que me molestaba era tan intensa.

Abrí los ojos de repente , una habitación de madera desgastada , junto con una cama algo incómoda pero ala vez reconfortante me miraban desde lejos.

Me senté tomando mi navaja que estaba escondida entre mis telas desconfiada.

-Dios!! - Un chico extraño casi se hace encima cuando mi cuchilla quedó clavada a un costado de su cabeza.

- ¿Quien eres? - me senté con dificultad , pero mi voz intentaba ser decidida.

- Un chico que iba en el colectivo y te salvó - Dejo rápidamente un plato con comida en una mesita a mi lado, y volvió al lado de la puerta.

- Gracias - tome el plato aún desconfiada - Perdón por casi asesinarte.

- La verdad me asusté - rió.

- Falle .

- Oh

- Esto es sabroso - comencé a comer bajo la atenta mirada del desconocido.

- Gracias supongo - se encojio de hombros, pude ver por el rabillo del ojo.

- ¿Porque me trajiste? - me senté cruzando las piernas un poco alerta y desconfiada.

- Me pareciste bonita - Dijo sin pensar , queda asombrada y roja de la vergüenza.

El bajo su cubre boca lentamente ante mi mirada curiosa. Tenía rasgos asiáticos, ojos rasgados , tes algo morena. Me quedé perdida un poco en sus ojos marrones.

La verdad era muy atractivo, me sonroje ante sus palabras ..Pero intente disimular.

- Entonces - suspiré - Si fuera fea o una viejita no me salvas - afirme levantando una ceja.

- Entonces- me sonrió - ¿Estás afirmando que eres bonita?

- No se responde con otra pregunta - lo señale.

- Lo se - Tomo mi dedo riendo - Te hubiera salvado aunque fueras una brujita.

- Que confianzudo - proteste alejando mi mano.

- Te dejo descansar.

- Espera - el se había acercado a la.salida , pero giro ante mi llamado.

- Dime

- ¿Dónde estamos?

- Estamos en la zona Violeta.

- ¿Porque puedo respirar bien? - murmuré confundida .

- Luego te.mostrare,descansa , ah!! - tomo mi cuchillo , haciendo que me haga hacia atrás desconfiada. - Ten , intenta no matarme.

- No prometo nada - le dije guardando mi cuchillo dónde estaba.

- Descansa bonita!!! - Grito antes de cerrar la puerta