Nick en coma

Nick Zache Stone. Hoy regresaba de mi viaje, tenía buenas noticias para todos, Zara me ha ayudado mucho con todo esto, deseo casarme con Madeline lo más pronto posible, tal vez me esté acelerando pero así es el amor, apresurado, cuando eres feliz, el tiempo pasa volando y eso es que lo que no quiero, perder el tiempo en pasar el resto de mi vida enamorado de la mejor chica del mundo sin haberla hecho mi esposa, nuestra vida sería aún mejor si me caso con ella. —Pronto aterrizaremos, ¿Estás bien? —Me sonríe Zara a mi lado, tomo su mano y la aprieto con felicidad. Es mi mejor amiga, la quiero como una hermana, y no, no es el mismo sentimiento de quererla como hermana como cuando dije que quería a Maddy como hermana. Realmente yo siempre amé a Maddy, siempre la vi con otros ojos, siempre la vi como el amor de mi vida, simplemente no me atrevía a declarar mi amor, por su padre, por su hermano y por miedo, no solo miedo a ser rechazado, sino también de perder mi amistad, es complicado ser el novio de la hermana de tu mejor amigo, o bueno, Muss es como mi hermano, Zach es mi mejor amigo, pero Muss es mi hermano, por respeto nunca pude decir lo que siento, pero… ¿Y si ocultar lo que siento es faltarme el respeto? Por eso debo apresurarme con todo. —Estoy nervioso de hecho —respondo finalmente. —Considero que es normal, una vez mi padre me contó lo que sintió cuando le pidió matrimonio a mamá, estaba que se hacía en los pantalones. —Me hace reír. —No creo que eso no sea una buena forma de expresarlo. —Reí sin más. —Lo sé, solo quería hacerte reír, relájate porque todo es mejor cuando estas calmado, haces las cosas bien. —Respiré hondo. —Gracias Zara, por todo, realmente estoy agradecido que me estés ayudando a cumplir este maravilloso sueño. —Ella me da media sonrisa. —No hay de qué. —Yo le sonreí, miré el asiento de al frente, cerré mis ojos y respire profundo. —¡Dios mío Zara! La amo tanto, que cuando está lejos la pienso, pero cuando más la pienso, más cerca la siento de mí, cuando no la veo o no escucho aunque sea su voz, yo temo, temo que le pase algo y si algo le pasa, mi vida se volvería muy nublada, con ella solo quiero una cosa Zara. —Abrí sus ojos y la ve—. Y es crear un mundo perfecto para los dos, no hay nada que no me haga dejar de pensar en ella, los momentos con ella no me dejan dormir pero a la vez sí. —Reí para mí mismo creyendo que estoy verdaderamente loco, y sí, estoy loco, pero por Maddy—. No me dejan dormir porque son tan bellos que me encanta recordarlos una y otra vez, pero si duermo es porque sé que he tenido un lindo recuerdo, un sueño muy feliz. —Aww, realmente la amas demasiado. —Asiento como un bobo. *** —¿Irás al apartamento de Zach? —Zara me mira extrañada ya que pensó que quería ver a Maddy primero. —Sí Zara, es que quiero pedirle que sea mi padrino —dije mientras metía las maletas en el taxi. —Entiendo, entonces ve chico enamorado, no pierdas más tiempo para pasar el resto de tu vida feliz. —Asentí muy sonriente y la abrace, me separe de ella, cerré el maletero y nos metimos en el taxi. La primera parada era la casa de Lucy, la madre de Zara, ella se bajó y nos despedimos, ahora el taxista se dirigía a la dirección que le di, el apartamento de Zachary, me sentía muy nervioso, no sé cómo iba a reaccionar, pero no creo que se niegue a ser mi padrino, es mi mejor amigo, me quiere demasiado, quiere que sea feliz y él sabe que mi felicidad es Maddy. El taxista se detiene en el edificio donde vive mi mejor amigo, yo me bajo, saco mi maleta y le pago para que se pueda ir, me giro y veo el edifico al frente de mí, inhalo y exhalo, todo saldrá bien, no hay nada de qué preocuparse, Zach me apoyará, él no creerá que esto es una locura. Subo los escalones con mi maleta, me adentro al edificio y llego hasta el ascensor, realmente no sé porque estaba tan nervioso, presentía algo malo pero ni idea de qué podía ser, pero no puede ser algo malo de Zach, no lo sé, había algo que me traía ansiedad por cada piso que subía, mi estómago comienza a doler, me siento tan mareado, tal vez porque esto sea una noticia tan importante, una de las más importante de mi vida, tal vez por eso me siento así. Bueno, el ascensor al fin se detiene en el piso en el que necesitaba bajarme, salgo del ascensor y camino el pasillo largo en cruz, antes de llegar al primer cruce oigo el ascensor subir, seguramente es Zach o tal vez no pero me esconderé para darle una sorpresa si es él, mi instinto fue esconderme en el primer pasillo detrás de una maceta con una planta que podía abarcar todo mi cuerpo. Aquellas dos personas siguieron derecho al apartamento de Zach y los vi, esto debía ser una broma, o simplemente es un apoyo, es mi mejor amigo, jamás estaría con mi novia, tal vez estoy mal, la llamaré, espero que no sea lo que estoy pensando, aunque es imposible, los dos me quieren, jamás me harían daño. —Hola amor —saludo cuando contesta. —Hola Nick. —Su voz se escuchaba tranquila, tal vez no pasaba nada pero es extraño que me haya llamado por mi nombre y no por «amor». —¿Cómo estás? —Tengo miedo, algo en mi pecho comienza a arder, no quisiera juzgar antes de saber toda la información, tal vez es porque sean buenos amigos ahora, no puedo evitar pensar mal, están solos. —¿Ya llegaste? —Evade mi pregunta. —Si… —Me sentía mal e incómodo, por un lado sentía esperanzas y por el otro me sentía destrozado. No te adelantes Nick, tal vez sea un presentimiento erróneo. —Que bien. —¿Por qué me responde de esa manera? ¿Acaso ya quería que cortara? Me habla como si la estuviera molestando o eso siento, o es miedo a que mi novia y mi mejor amigo me traicionen. —¿Dónde estás? —Debe responderlo porque si, si miente es porque algo sucede entre esos dos. —Bueno, no me encontrarás en casa de los Robinson, estoy haciendo un trabajo en casa de una amiga, ¿De acuerdo? —Mi corazón se rompió en mil pedazos, ¿Qué hice mal? Quiero llorar, sin embargo, aún no sé lo que sucede, no puedo creerlo pero a la vez lo siento. —Está bien, entonces nos vemos mañana, ¿Sí? —pregunté, mañana la enfrentaría. —Sí, está bien, nos vemos mañana en el ensayo de tu banda, te quiero. —¿Me quiere? Lo dijo, tal vez me mintió porque es una sorpresa, ¿Cierto? Bueno, eso quiero creer. —Yo te quiero aún… —Corta la llamada interrumpiéndome. ¡Maldición! Ella está con Zach, no, eso no puede ser cierto, ¡Mierda! Quiero romper algo, quiero llorar, no, no llorarás Nick, tal vez no pase la noche con él, tal vez simplemente van a hablar y después la llevará a casa de su amiga para que haga la tarea, o me mintió porque también me está haciendo una sorpresa o por no ponerme celoso, aunque es estúpido, jamás la celaría de Zach, creo en todo menos en que ellos estén juntos. *** Le lance el puto anillo, anoche yo lo sospechaba pero no quería creerlo, es que era imposible, ellos se odiaban, Maddy me ama es a mí, no entiendo, lagrimas no bienvenidas comienzan a salir de mis ojos, me sentía débil, triste, traicionado y humillado, destrozado, herido, como si fuese el fin del mundo para mí. —No Madeline, no puedes llegar amándome, haciéndome feliz y luego herirme solo porque confundiste tus sentimientos hacia mí. —Me solté de Zabdiel—. No los quiero volver a ver nunca en mi vida. —Nick, por favor. —Es lo último que escuche antes de irme. Todos sabían de su relación y nadie me dijo nada, ¿Cómo quieren que reaccione? ¿Bien? ¿Cómo puedo felicitar que mi novia y mi mejor amigo estén juntos? Cerré la puerta principal con fuerza, tenía tantas emociones dentro de mí que deseaba morir, no quiero vivir más, esos dos me arruinaron, ¿Cómo ahora estaría en la banda después de esto? ¿Mis amistades? ¿Mi familia? Creo que al fin ni al cabo no hay que aferrarse a lo que tarde o temprano te traicionara o se irá, Zach y Maddy me han hecho daño, quería demasiado a los dos. Tal vez hubiese sido diferente si Maddy estuviese clara de sus sentimientos desde el principio o no lo sé, no puedo justificar nada, solo siento dolor, quiero morir. Llegue a mi auto, entre y me fui, no sé a dónde iría, solo quería estar lejos de todo, mis ojos no paran de llorar y lamentablemente aún era de día, el sol me pegaba en mis ojos cuando en realidad quería que fuese de noche, para que se me nuble la vista y no pueda ver nada en la oscuridad, quería perderme, pero no me importa, yo puedo lograr mis objetivos en este momento, tengo más deseos de morir que de vivir, así que yo puedo lograrlo, hay remedio para morir y nunca volver, pero no hay remedio para un corazón roto. Iba a toda velocidad, subiría a una montaña y me lanzaría desde ella, no quería ser encontrado, estaré muerto para cuando logren hacerlo, quería desaparecer, no soy nadie, soy el peor chico de esta vida, no hago nada bien, soy un desastre, no puedo ni mantener una relación sin que la otra chica que me engañe, pensé que Maddy no sería así porque obviamente ya la conocía y creí que conocía bien sus sentimientos, pero resultó ser igual que las demás, siempre rompiéndome el corazón, creo que también por eso tenía miedo de estar con Maddy, miedo a ser lastimado por el amor de mi vida. He llegado como había querido al final de la montaña y me preparo, piso el acelerador y cierro mis ojos, esto es lo que deseo, mis ruedas ya no tocaban el suelo, ya estaba en el aire, sentía que volaba pero luego comencé a caer, como todo lo que tengo en mi vida, siempre cae, mis piernas temblaban y no paraba de llorar, pedía que por favor no saliera vivo de esta. *** Me desperté con un dolor de cabeza y dolor en mi cuerpo pero a la vez era mínimo, como si tuviera la piel dormida y trataran de pellizcarme, me sentía extraño, me encontraba en un hospital, ¡Genial! Uno queriendo desaparecer y otros queriéndote salvar, estaba en una bata y sin ropa interior, me pondré algo, les diré que me siento bien, no necesitan tenerme aquí, me levanto de mi camilla y me dirijo al baño para cambiarme, luego de cambiarme, salgo del baño y veo las cortinas cerradas en donde estaba acostado, camino y ruedo un poco las cortinas, había una enfermera atendiendo a un paciente, encontraron reemplazo rápido, ¡Que irónico! Primero mi novia me reemplaza por irme unos días y ahora el hospital por haberme levantado unos minutos. —Disculpe señorita, ya me siento mejor, así que me iré, estoy avisando para que después no digan que me fugué. —Ella estaba de espaldas y parece como si no me ha escuchado—. ¿Señorita? —Patricia, ¿Cómo está el paciente? —Entra el doctor detrás de mí y lo saludo. —¿Qué onda Doc? Ya me voy, el accidente no fue nada, realmente me siento como nuevo. —Tomo su hombro y él atraviesa mi cuerpo. —Aún no despierta pero tiene buenos resultados —responde ella y me volteo a verlos. Comienzo a asustarme, ¿Cómo hizo para atravesarme? ¿Acaso el doctor es un fantasma? O peor aún… —¿Segura? Parece tener un ataque. —La máquina comienza a sonar con muchos Bip y veo enfermeros acercarse también atravesándome. Yo era el fantasma, me acerco a ver al cuerpo de la persona a quién estaban atendiendo y era yo, ¿Cómo sería esto? ¿Acaso mi alma está deambulando esperando a ser llevado por un ángel? Bueno, esperaré el tiempo que sea necesario hasta que me recojan, siempre pensé que uno sube como un globo de helio cuando morimos, no que te venían a buscar como si fueses un bebé a un preescolar, pero no me importa, todo para no volver a ese mundo de mierda donde solo hay dolor, trato de relajarme y el sonido de la máquina comienza a disminuir. —Tal vez fue falsa alarma —dice la enfermera. Era nuevo en esto pero sentía que había sido lógico, cada emoción fuerte podría hacer sonar aquella máquina. —Puede ser, ese chico tiene suerte. —Yo me río de lo que dice el doctor, si tuviera suerte, mi novia y mi mejor amigo no estarían juntos, y mi muerte hubiese funcionado. —Lo sé, sus familiares ya llegaron, y desean pasar. —Ella toma mi historial y lo revisa. ¿Familiares? Si yo soy huérfano, bueno, tengo mi familia pero viven lejos, por eso quería a los Robinson como familia, los tenía más cerca y me cuidaban. —Por los momentos no los dejes pasar, el paciente acaba de tener un leve ataque y quiero seguir revisando que pudo haber sido, fue muy extraño. —Yo le pongo los ojos en blanco, era algo obvio para mí, pero a la vez agradezco que haya tenido esa idea, no quería que nadie me viera, ojala estuviera consciente para no permitir visitas—. Y una vez que lo termine de checar, pueden pasar a verlo, tal vez las voces familiares lo harán reaccionar y querrá despertar. —La enfermera asiente y me amargo lo que dijo el doctor, yo no quería escuchar a nadie, no me harán cambiar de opinión. Ellos comenzaron a examinar las máquinas y a mi cuerpo, yo me fui de ahí, ¿Quién habrá venido? Atravesé la puerta y logró ver a Maddy con Zane sentados al lado de mi habitación, ella tenía su rostro tapado y lloraba, me hizo sentir mal pero tengo que ser fuerte, Zane la consolaba palmeando su espalda, ¿Por qué llora por mí? Le deje el camino libre para que estuviera con Zach, no podía estar en el mismo mundo dónde ellos dos lo estén, eso sería sufrir en vida y yo no quiero seguir sufriendo por mal de amores, prefiero estar muerto, aunque hay una puta máquina que me mantiene vivo. —Ya pueden pasar. —Sonríe la enfermera al salir, Maddy se levanta y Zane también. —Por favor, déjame estar sola con él —le dice a Zane y él asiente. ¡Mierda! Yo no quiero que ella este sola con mi cuerpo. —Zane, por favor no permitas eso hermano, se supone que debes apoyarme, y seguramente sabes perfectamente que es la última persona que quiero ver. —Que jodido ser un puto fantasma. —Al escuchar tu voz, él se sentirá bien. —Zane la abraza. Todos tienen mierda en la cabeza, por supuesto no mejoraré con ella cerca, esa traicionera. —Gracias. —Se separa del brazo y entra a la habitación, yo la sigo y al entrar, ella queda paralizada al verme en la camilla, tapa su boca—. ¡Dios mío! ¡Nick! —Corre tras mi cuerpo y toma mi mano—, Zache, sé que soy la última persona que quieres escuchar pero eso no significa que me iré, sabes que soy terca y no me iré de aquí hasta que despiertes, yo te amo Nick pero no de la manera que creí que era, eres como mi hermano y obviamente no le desearía nada de esto a mi propia familia. —Dios hazla callar, habla muchas estupideces, me repite cosas que ya yo sé, cosas que no tiene sentido mencionar. Si sigue así, logrará que no quiera despertar, aun así, ¿Cómo haría? Si me dice la verdad duele, pero si me miente, también duele porque ya sé la verdad y tarde o temprano siempre sale a la luz. Ella besa mi mano y sentí una electricidad en mi cuerpo, creo que hasta siendo fantasma mi amor por ella no se acaba, siento que deja algo en mi mano y la voltea, y veo lo que ha dejado en la palma de mi mano. —No voy a mentirte, amo a Zach pero más te amo a ti, me pondré el anillo no para comprometerme contigo, sino un regalo amistoso que apreciaré demasiado. —Maldita perra—. Quiero que te mejores, no estaré con ninguno de los dos, lo he decidido, te amo Nick y lo menos que quiero es hacerte daño, por eso no estaré con ninguno de los dos. —Ella esperaba respuestas. —El daño ya está hecho Maddy, termina de vivir tu vida con Zach y déjame morir en paz. —Y claramente no podía escucharme. Ella suspira, se ha dado cuenta que no he hecho ninguna reacción positiva, y es que no había nada positivo en mí, solo tengo deseos de dejar este mundo.