Sara caminó hasta la habitación principal, de un lado del lugar se observaban las plantas y los jardines. Del otro a pared de piedra gris, con macetas de las que brotaban más plantas, algunas con flores. Ella las observaba mientras al frente caminaba Enzo, le seguía los pasos. Pero en su cabeza, analizaba cada una de las palabras que Rodrigo le mencionó, tratando de conectarlas con lo que escucho en algunas ocasiones acerca de la mujer misteriosa que al parecer detonó la guerra entre los hermanos Cabrales. - ¿Enserio son hermanos? - Preguntó casi sin pensarlo. Enzo se giró de golpe, pausando su andar. - ¿De que hablas? - Interrogó con cierta molestia. - Julián y tu... ¿Son hermanos de sangre? - Que incomodo que quieras hablar de eso, justo cuando estamos por entrar a nuestra habit

