Julián se mantenía de pie, no se movía por no entender específicamente lo que estaba pasando. Él quería aceptar la alegría que sentía al ver de cerca de nuevo toda la acción que ocurre al estar en medio de una red como la del grupo del sur. Después de ser citado en un lugar específico y esperar por casi una hora, a ser buscado, finalmente se encontraba en medio de la segunda organización más grande de criminalidad en la ciudad. El grupo del sur no se dedicaba solo a un trabajo en especial, es decir, no tenían una sola línea de trabajo, como lo quiso manejar Enzo en la dinastía Cabrales, según el criterio de Julián, una muy mala decisión de su parte. Trataba de calmar su mente, pero no dejaba de comparar a los Cabrales con el grupo del Sur. Ellos destacaban por su organización, presti

