Rose Nos tomo más o menos una hora llegar al lugar, la casa era hermosa, podía ver un gran campo, el aire que se respiraba aquí era más limpio, sonreí con emoción y baje del auto en cuanto Tris estacionó el auto, la sonrisa no se borraba de mi rostro, es un lugar precioso, podía ver un lago y establos a lo lejos ¿Todo esto era de ellos?. Estaba tan emocionada como una niña pequeña, Tris bajo del auto un cochecito de bebé para Evie quien se durmió durante el camino. Quería ir a caminar por el campo o correr, me apetecía sentarme bajo la sombra de uno de esos grandes árboles cerca de aquel lago. —¿Qué te parece? —preguntó Tris sacando a Evie con cuidado y colocándola en el cochecito. —Hermoso… este lugar se ve demasiado hermoso —conteste manteniendo la sonrisa en mi rostro. Caminamos

