La fuerza de Ciro

La importancia de la sangre

La importancia de la sangre

Bahía de Kino, Sonora.

El suave oleaje moja los pies de una anciana mujer que se encuentra apoyada en su bastón de palo fierro, baja la mirada a sus pies, cierra los ojos, se concentra para escuchar el viento, el oleaje, oler el atardecer,” abre” los ojos y ve a Secundina desmayada, así como a la Al-Kāhina tratando de ayudar, la africana alza la mirada topándose con la de Miri, susurra unas palabras, la anciana le responde.

Los presentes dentro de la tienda de Elián ven como la mujer se pone de pie y camina en dirección contraria dando la espalda a Secundina, y ven con extrañeza los ademanes que hace, como mueve las manos, gira sobre sus talones va con el Elián, le hace varias preguntas “¿Que le pasó? ¿Qué le dijo?” repite las repuestas, Miri escucha atenta, cierra apoya ambas manos en su bastón.

_ Dile a su marido que se encuentra bien.

_ El rey merece saber que le pasa a su reina.

_ Nada malo – la anciana se sienta a lado de Secundina- _ Por sus venas corre sangre yoreme es todo.

_ ¿Yoreme?

_ Si, es indígena como yo, es Mayo.

_ ¿Y?

_ Loji era su tátara abuela y esa mujer era curandera – pasa su mano por la cabeza de Secundina- _ Sanadora… Dile al rey que su reina está despertando es todo.

_ ¿Es chaman?

_ Si así lo quieres explicar. – el golpeteo de agua la hace volver a Kino- _ Mira Loji, tanto que renegaron de ellas por ser yoris* y es quienes han sacado tus dones.

_ Nana ¿Otra vez hablando sola?

_ No seas majadero niño, yo nunca hablo sola.

Al-Kāhina hace que todos dejen a solas a la pareja mientras ella y Elián esperan que despierte, cuando por fin abre los ojos ve a Ciro enfrente de ella cubierto de sangre en su mano derecha la lanza de Loguin, Ciro se inclina hasta llegar a su altura mueve los labios al tiempo que es la voz de Elián que sale de Ciro, niega con la cabeza, enfoca la mirada y es cuando ve a su esposo y la mujer.

Elián se sienta a su lado, la africana se queda de pie, empieza hablar, desde luego que Secundina no entiende nada.

_ Quiere saber de tus antepasados.

_ ¿Míos?

_ Si amor, tuyos. Es importante que nos expliques.

_Por lado de mi mamá es su mamá es india, india, ya sabes indígena pura, mi abuelito es quien mestizo, mitad indígena y mitad blanco, creo que español.

_ ¿Enserio amor? – traduce todo a la mujer- _ Te falta el otro lado.

_ Por parte de mi papá, mis abuelos, bisabuelos y tatarabuelo, son nacidos en México el resto son españoles ¿Por qué la pregunta?

_ - Elián vuelve a traducir la africana le hace varias preguntas más- _ Quieren saber si tienes “brujos” en la familia.

_ ¡Qué voy a saber yo! Realmente no lo sé ¿De acuerdo? Necesitaría hablar con mi apa o mis tías, pero te recuerdo que estoy muerta y enterrada.

_Si, pero Emi no.

_ ¿Y qué quieres? ¿Que la envié a casa a preguntar a mis tíos?

_¡Obvio! Amor, ella cree que eres mágica o susceptible a la magia y por eso las visiones.

_ ¡Ay por favor!

_ ¿Después de todo lo que has vivido no crees en la magia?

_ No dije eso, digo que no soy mágica ni nada por el estilo.

_ Pido disculpas mi mujer es terca como una mula.

_- La africana no puede evitar reír por el comentario- _ Son tal para cual, usted también tiene su carácter mi señor.

_ Basima – se cruza de brazos -_ Bueno, tienes un poco de razón.

_ Señor, todo indica que su esposa es receptora de energías “Ve cosas” ¿Pero? ¿Qué ve? ¿Vivos, muertos? Hay muchos tipos de magias.

_ Ella no conoce mucho de sus antepasados ¿Cómo ayudarla?

_ Si su esposa es mágica por así decirlo, lo es desde que nació, su antepasado fue chaman, curandero, así que algo de eso se le debió manifestar desde niña.

_Hablare con ella, podré atención en los detalles.

_En caso de que confirmemos nuestras sospechas debe iniciar entrenamiento.

_ ¿Con quién?

_ Lo ideal es con su gente, pero ya es tuya así que con tu gente.

_ Agradezco su ayuda Al-Kāhina, si me permites, deseo estar a solas con mi esposa.

_ Desde luego señor, buenas noches.

_ Elián, los bebés.

_- Elián va y regresa con ambos bebés, Secundina toma a Sandra, la acuna en su pecho- _ Te ves bien de mamá.

_ Cuando esté enojada con ellos hablamos si me veo bien o no.

_Amor, debemos hablar seriamente.

_ Odio esa palabra “seriamente”. Dispara.

_ Basima está segura de que eres sensible a la magia, y de ser verdad desde niña te pasan cosas.

_ Ahora resulta que soy el mago de elegido.

_ No te rías que es muy enserio lo que digo. Te sabes el mito de Calisto y Circe.

_ Un poco, son brujas.

_ Así es, y ellas son integrantes de mi manada. Yo las conocí cuando ascendimos al poder por segunda vez, no entraré en detalles, pero si existe la magia y la brujería, en todo el mundo se manifiesta de diferentes formas.

_ Ahora resulta que por ser descendiente de indígenas soy bruja.

_ ¡Eres necia! No, si algún antepasado tuyo lo fue si, si eres o puede que seas sensible es todo.

_ Soy sensible a la fuerza, necesito un Luke.

_ Me vas a acabar la paciencia que te tengo.

_ Ya ¿Sí? Tranquilo – los dos callan por varios minutos- _ Sandra es linda, creo que se parece a ti de bebé ¿No crees?

_ ¿Hm? No lo sé, yo recuerdo a Ciro y a Darío, pero sin duda se parece más a Darío, Ciro es más como mi madre, pero tiene tus ojos.

_ Veía cosas pasar.

_¿Qué?

_ Cuando tenía entre doce y quince años empecé a ver cosas pasar por mi lado, creía que eran animalitos, arañas, cucarachas, ratones, pero cuando volteaba a ver nunca había nada.

_¿Qué más?

_ A veces soñaba a personas y a los días los conocía o las veía pasar a mi lado. A los inicios de mis veintes empecé a ver un bulto exactamente parado en la puerta, era un hombre, nunca le vi el rostro, pero un hombre con un sombrero.

_Tal vez eres vidente.

_ Después de mi tercer intento de s******o deje de ver a los animalitos pasar y deje de ver a ese hombre.

_ Secundina ¿Nunca me soñaste?

_ No, de haberlo hecho lo hubiera tomado como lo que fue un sueño, tal vez uno bonito o uno pornográfico.

_- Las carcajadas de Elián se podían escuchar has afuera de su carpa- _¿Pornográfico?

_ ¿Y que tiene? Iba ser muy mi sueño tengo el derecho de soñar lo que se me dé la gana.

_ Okey menos mal no soy un sueño y podemos hacer mucha pero mucha pornografía.

_¡Cállate! Hay bebés presentes. – Elián la calla con un beso en los labios-

_ No te avergüences de como eres en la intimidad con tu esposo. Ahora, muy a mi pesar necesito conocer tu pasado para poder ayudarte.

_ Creo yo que ya sabes todo de mí, huérfana de madre, una hermana, un padre, un mal historial amoroso, mamá soltera.

_ Eso es lo superficial debo saber todo. Tus miedos, aquellos que fueron tus anhelos, todo eso que no le das importancia.

_ Ya olvidé todo eso. Tendría que hipnotizarme para poder decir todo.

_ Lo podemos hacer, Calixto y Circe pueden ayudar.

_ No las conozco ¿Puedes preguntar a Engla si me puede ayudar?

_ Engla te estima mucho y Alf te adora seguro ayudan, le pregunto mañana, debes descansar, los bebés te llevan mucha delantera.

_ No tengo sueño. Elián esto que me está pasando me preocupa.

_ Ser bruja no es malo, creo que es más malo ser licántropo y lo haces bien, te dejas guiar me obedeces, aunque sigo sin entender poque también a Darío.

_Tengo dos teorías, una es porque somos amigos por muchos años y aunque nunca nos vimos como pareja nos comportábamos como una, tú lo viste y dos tal vez como huele mucho a ti lo confundo contigo.

_ Si lo vi y no voy a negar que sentí celos de Darío.

_ ¿Por mí?

_ Si, por ti, fue cuando recién te conocí, Fernando me dijo que eran amantes.

_ Y hay vas tú hacer caso.

_¿Qué? Secu, mi lazo contigo se formó casi desde la primera vez que te vi, tu aroma fue potente, tu miedo, tu seguridad, todo se mezcló y fue dulce para mí, después el golpe hizo gruñir a mi lobo “mía” eso dijo.

_ - Se le suben los colores a la cabeza- _ Nunca fue mi intención.

_ Ni la mía y ver como eras con mi hermano, tan unida a él, le reclame.

_ ¡Tonto!

_Él me dijo una verdad muy cierta.

_ ¿Cuál?

_ De haberte visto como mujer te hubiera hecho su esposa.

_ ¿Cómo si estaba casado?

_Así, te hubiera pedido matrimonio como hombre Darío Makris Vasileus.

_ Le hubiera dicho que no, tal vez si su amante, pero su esposa no “eres muy guapo para mi” “que va a ser ese hombre conmigo”.

_Los gustos de mi hermano han sido “exquisitos” sus tres esposas han sido muy bellas sin duda, pero cuando el lobo aúlla no hay aspecto físico que perdone, delgadas, gordas, blancas, morenas, azules, rojas, el lobo escoge por instinto.

_ Aun sigo pensando que tu lobo se equivocó conmigo.

_ Lo sé – calla unos minutos - _ Cuando se quedaron solas las tres que según tú le distes permiso a Darío de irse con Dédalo ¿Qué hiciste tu?

_ Le dije a Jano y a Nereida que me ayudarán, Jano es alfa por naturaleza, sabe cómo guiar, Nereida también sabe el manejo de la manada, discutíamos el punto pedía consejo y tomábamos la decisión juntas y yo daba la cara por todos.

_ Supiste que hacer, de eso se trata, mi lobo no se equivocó, ni yo tampoco, eres buena mujer, servicial y leal.

_ Siempre seré leal a ustedes son mi familia y los amo mucho – se recarga en él- _ Te amo mucho, sabes no creí amar como te amo, no creí tener tanto amor para dar.

_Tenía que llegar el indicado para que supieras amar y ser amada. Ahora mi brujita linda a dormir, nuestros cachorros nos llevan más de medianoche de ventaja.

_ Si señor, Elián ¿Te puedo pedir algo? – él asiente- _ Duerme en ropa interior.

_ ¿He? – Coloca a ambos bebés en la misma cuna- _ Si así lo quieres, con gusto.

Termina de acomodar a los bebés, retira su ropa quedando en bóxer negros se acuesta a la izquierda de Secundina ofrece el brazo derecho como almohada gustosa ella acepta, se acurruca en él.

_ Gracias por mimarme.

_ Si no lo hago yo ¿Quién? - Secundina pasa su mano por la cicatriz del pecho - _ Es la primera vez en mi vida que me siento feo por una cicatriz.

_ ¿Feo? Siempre has sido feo, te ayuda la altura, tus hermosos ojos negros, tus canas te hacen ver interesante, a mí me gusta la cicatriz.

Él cierra los ojos con una sonrisa en su rostro, libera su aroma y los ojos de Secundina se tornan amarillo al inhalar la esencia de su esposo.

_ Si.

_Sí ¿Qué?

_ Te amo, mi rey licántropo.

_ - Elián sonríe feliz, le retira el brazo para quedar frente a ella, le da un beso en los labios y es él quien acomoda su cabeza en el pecho de Secundina, inhala su aroma- _ ¿Me puedo quedar dormido abrazado a ti?

_ Claro que sí, ya duerme o mañana barren con nosotros los bebés.

_ Ujum, sabes, desde que me enamoré de ti, trataba de imaginarte embarazada de mí.

_¿Y qué tal? ¿Fue como esperabas?

_ La mayor parte si lo fue, te veías muy bonita