bc

Esposa de un hombre de piedra

book_age18+
84.9K
FOLLOW
668.7K
READ
sex
contract marriage
second chance
dominant
badboy
CEO
drama
bxg
city
like
intro-logo
Blurb

Claudia Hernández, la hija de 23 años del dueño de Empresas Preston Hernández, y a Andrew Castillo, el CEO de Castillos Internacional Corporación, de 25 años. Su unión es un compromiso pactado desde su nacimiento por sus padres, amigos de toda la vida, con el fin de fusionar sus familias y salvar la empresa de Andrew, que enfrentaba la bancarrota. Este matrimonio por contrato, acordado para cumplirse una vez ambos culminaran sus carreras, se convierte rápidamente en una pesadilla para Claudia cuando Andrew la rechaza tras la boda. La relación se sumerge en un torbellino de conflictos, llevando a Claudia a sacrificar su dignidad en un intento desesperado por el amor de su esposo. Sin embargo, al tocar fondo y reconocer la toxicidad del vínculo, ella toma una drástica decisión para separarse de forma indefinida, buscando poner fin a su tormento.

El destino, no obstante, parece tener otros planes. La separación es solo temporal, pues un secreto que Claudia guarda celosamente la obligará a regresar y enfrentar a Andrew, el hombre que, a pesar de todo el dolor infligido, se revela como el único amor verdadero de su vida. Este giro de los acontecimientos pondrá a prueba la fuerza y determinación de Claudia, quien deberá confrontar a su esposo, un hombre que se niega rotundamente a perderla o a concederle el divorcio, a pesar de sus acciones pasadas.

chap-preview
Free preview
Capitulo 1.
Capítulo 1. Prólogo. En la gran mansión Hernández, la emoción de Claudia se puede sentir, hoy es el día más esperado por ella, siente que su corazón saldrá de su pecho ante la fuerte sensación que siente. —Apúrate madre, llegaré tarde. —Ya está cariño, solo quiero que te lleves el medallón de la buena suerte de tu abuela.— Dice Gabriela colocándole el collar a su hija tan emocionada como ella. —Gracias, madre, te quiero, te escribo al llegar. — Expresa Claudia con un fuerte abrazo con el que se despide de su madre. —Suerte, cariño, te amo. Sé amable con tu prometido. — Lo haré. — Dice Claudia pasando la puerta de su habitación directamente a la salida. Esa despedida con su madre la va a recordar, Gabriela con amor la ayudo a preparase al gusto de su prometido con la esperanza que este encuentro fuera siempre recordado para ambos, y lo fue, sin duda así fue. *********** *Cita Ella es Claudia Hernández joven de 23 años, tez clara, ojos verdes, estatura promedió de 1,60 cm, hermosa cabellera color n***o azabache, de fina y hermosa figura pronunciada de modelo. Hija del dueño de las empresas Preston Hernández, Andrés Hernández y Gabriela Fermín, dueña y líder del gran conglomerado de las empresas de su familia. Prometida a casarse desde su nacimiento con Andrew Castillo, joven de 25 años, hombre alto de unos 1,75 cm, de tez clara, ojos azules, fornido, CEO de Castillo Internacional Corporación. Claudia ha sido preparada por su familia para ser la esposa de uno de los jóvenes más ricos de Inglaterra, viviendo en Nueva York. Criada al molde de la familia Castillo en costumbres, tradiciones y todo sobre Andrew han sido sus enseñanzas desde pequeña. Hoy por fin conocerá a Andrew, quien llega del extranjero para su primer encuentro, ya que en dos semanas como es lo acordado se anunciarán su matrimonio y estableceremos la fecha del mismo. * Claudia después de varios minutos de recorrido llega al restaurante, en cuanto se sienta en la mesa da aviso de su llegada a su madre por medio de un mensaje de texto. Su llegada marca una hora y desde el momento en que se sentó al que ahora ve el reloj, Claudia calcula que a pasado más de una hora, revisa su celular para saber si hay algún mensaje o llamada y al notar que no hay ninguno lo entiende, él la a dejado plantada, se siente ofendida, puesto que claramente tiene su número y podría enviarle un mensaje para avisar que no llegaría, sin embargo no hay tal consideración, así que sin más que esperar Claudia recoge sus cosas y sale del lugar directiva su coche el cual conduce de vuelta a casa. Claudia se siente humillada, ¿Cómo se le ocurre plantarla y no tener al menos la decencia de enviar algún mensaje para avisar que no iría? Eso la hace sentir muy mal, jamás pensó que algo así podría pasar, espero por tanto tiempo este momento que solo sentirse herida le rompe el corazón. Claudia conduce directamente a casa, al llegar puede notar que no hay nadie, es de suponer que mientras se supone que los hijos tendrían su primera cita las madres estarían comiendo ansiosas del gran encuentro. Claudia llega a su habitación y se arroja a la cama muy triste, esperaba de este día todo menos esto, su cuerpo se siente débil y sin ganas de querer levantarse de la cama. * Mientras que Claudia se hace Miles de preguntas por la situación, Andrew quien acaba de llegar a la ciudad hace tres días, está muy ocupado almorzando con Jimena Pans, su amiga de cama de Inglaterra, con la que lleva saliendo hace más de 3 años, y de la que nadie sabe. Es su mayor obsesión por ser una mujer relajada que no lo presiona en absoluto, sabe y está consciente de la reunión con Claudia a la que no piensa asistir, tiene una ideología sobre ella que no lo convence aún, la tiene como una opción por ser la llave a la fortuna que considera le pertenece. Andrew es un hombre que odia los compromisos, por ello está con Jimena, no le exige, lo le pide, no le reclama, lo sabe todo sobre el compromiso con la desconocida de su prometida y está consiente que él solo desea estar con ella y no piensa alejarse mientras él quiera tenerla cerca. En la casa de los Hernández, Claudia ya le ha contado todo a su madre del encuentro y eso ha enfurecido a Alma Ríos, la madre de Andrew quien sin esperar a su llegada a casa decide llamarlo muy enojada y avergonzada por la situación. Andrew al ver la llamada mira la pantalla del celular después de pocos minutos responde lo más calmado que su paciencia se lo permite. —Andrew Castillo, ¿Me puedes explicar dónde te has metido jovencito? Me ha llamado Gabriela la madre de Claudia, y me ha dicho que dejaste a su hija plantada en la cita, ¿Cómo se te ocurre hacer eso? Hijo, eso no es propio de nuestra familia. —Hola, mamá, ¿Cómo estás? Llegue bien gracias por preguntar. Iré en cuanto pueda a casa y si la tal Claudia no tiene nada más que hacer, puede reunirse conmigo en la oficina mañana, no tengo ganas hoy. —Jovencito, no creas que podrás salirte con la tuya, recuerda que tu padre firmó un acuerdo con esa familia y no puedes dejarlo, aunque quisieras, les debemos mucho. Me tienes que prometer que escribirás pidiendo disculpas. —Sabes que eso no va a pasar madre, dile que me encuentre en la oficina mañana a primera hora y hablaré con ella. — Andrew hijo…— Andrew interrumpe. — La veré, te lo prometo. —Hijo, solo espero que pongas de tu parte sabes lo importante que es esto para nuestra familia. — Y para la de ella, estoy consiente de los beneficios que han obtenido con muestra alianza, es un trato que nos favorece a ambos. — Hijo, por favor. —No te preocupes, dile lo que te dije, nos vemos en casa. — Está bien Andrew. Ambos cuelgan y la mirada de Andrew se enfoca en Jimena quien suspira con frustración acercándose a él para besarlo en los labios. —Aún no me creo que debo ser la otra. —Expresa haciendo un puchero. —No pienses en eso, mañana iremos a ver tu departamento, me caso, pero no dejaré de estar contigo. — Y yo de complacerte mi amor. Ambos se besan de manera excitante mientras que en casa Claudia aún no sale del impacto que esto a causado en ella. —¡¿Cómo se atreve a dejarme esperando por más de una hora?! ¡Es un irresponsable! ¿Por qué me hace esto madre? —Ya, cariño. Hablé con su madre y me dijo que él estaba ocupado hoy. Te verá mañana en la oficina a primera hora, te ayudaré a buscar el vestido más hermoso que exista, te verás muy hermosa, te lo aseguro. Ahora descansa, mañana será un buen día, ya lo verás. —Gabriela se queda a consolar a Claudia hasta que logra dormirla. * Al despertar Claudia se prepara nuevamente para su encuentro, no sabe que pensar, pero las esperanzas de que está vez se de son muchas, no puede evitar sentirse nerviosa y toma el vestido color rojo brillante que su madre a escogido para ella, un diseñó elegante que se ajusta perfectamente a su cuerpo, con un escote en el pecho que ajusta sus senos y uno en la espalda de tiras que marca su piel con una abertura en su pierna derecha muy sensual pero reservado y elegante. Claudia se combina con unos tacones color vino y el collar de herencia de su abuela con un peinado que luce perfectamente con la ocasión, moño alto dejando caer su cabello liso hasta un poco más arriba de las caderas, se ve espectacular, la belleza misma de la perfección creada por Dios, con un maquillaje de tono oscuro que resaltan sus ojos verdes. Claudia se ve hermosa y huele riquísimo, su madre y los empleados de la casa se quedan sin palabras al verla, ya no es aquella adolescente, es toda una mujer lista para ver a su futuro esposo. Gabriela al tenerla frente a ella no puede expresar lo que piensa más que con un abrazo de la buena suerte para su nerviosa hija, la ayuda a colocar el abrigo y le entrega su bolso de mano y la acompaña al coche dónde el chófer ya la espera. — Buena suerte cariño, me llamas en cuanto todo termine. — Si lo haré mamá. Un beso de despedida y el chófer no demora en ponerse en marcha. Los nervios se apoderan de Claudia con fuerza, tiene muchas ideas en su mente y la que más la emociona es sentir esto que él ocasiona en ella, podría decirse que se enamoro de aquel hombre del que todos le hablaron por años, del que su abuelo le contó por mucho tiempo. El abuelo de Andrew y Claudia se llevaban muy bien, él tenía la seguridad de que está unión está bendecida, la admiraba y extrañaba ver a su pequeño Andrew, hoy por fin se podrán conocer y aunque todo esto es una locura, solo desea que su esposo sea tal como lo imagino. En cuanto el coche estaciona frente a las oficinas, Castillo, Claudia baja del coche con ayuda de su chófer, camina adentrándose al lugar mientras el hombre la escolta, está vez no la dejan sola, en cuanto está frente a la secretaria de Andrew ella la anuncia, la lleva por un largo pasillo a la sala de juntas donde Andrew se encuentra poniéndose al día de todo desde muy temprano. Claudia no había venido a la empresa en mucho tiempo, el lugar es enorme y siente que el camino hacia la oficina de su prometido se hace eterno, la joven toca la puerta y su voz la paraliza. —¡Adelante! — Se escucha decir, su voz es fuerte, muy masculina, causando en Claudia una sensación indescriptible. En el momento en que se abre la puerta sus miradas se unen, Claudia lo enfoca con la misma seriedad que él a ella. — Adelante Claudia, toma asiento. — Gracias Andrew. — En cuanto Claudia se sienta, Andrew se acomoda en su silla elegantemente. — Andrew es…— Andrew interrumpe. —Vamos al grano, ya que está relación fue establecida por negocios, limitémonos a mantenerlo así. No necesito que me digas nada de ti, puesto que no me interesa lo que tengas que decir, estás aquí solo para responder con un sí o un no a todo lo que te diga y saldremos rápido de esto. Sus palabras salen de su boca de manera arrogante e irrespetuosamente, clavándose en Claudia como puñales. Pensaba que sería un hombre amable, pero la verdad es un hombre arrogante, apenas la mira o toma en cuenta, ¿Qué es todo esto? — Bien. — Dice Claudia sin más. — Bien. — Repite Andrew mientras escribe en su laptop, ignorando claramente el rico olor que emana de ella y lo hermosa que claramente se ve, no esperaba que fuera tan hermosa, eso lo incomoda un poco ante lo que piensa. — La boda seguirá como lo planeado, seré muy claro contigo, esta unión es por compromiso a nuestros padres, seguiremos lo que ellos han expuesto para nosotros, en dos semanas anunciaremos nuestra boda, ¿Lo entiendes? — Si. — Responde Claudia mirándolo fijamente con el ceño fruncido —Perfecto, la fecha será anunciada en dos días en una cena en casa de mis padres , ¿Estás de acuerdo? —Sí — Responde nuevamente. —Es todo por ahora no tenemos nada más que acordar, puedes irte. Del resto se encargará mi personal, nos veremos en dos días en la cena en casa de mi familia, lo único que espero que esté encuentro se mantenga entre nosotros si hablas o dices algo de lo que pasó aquí, te aseguro que te arrepentirás de ello. — Lo entiendo, que tengas un feliz día Andrew.

editor-pick
Dreame-Editor's pick

bc

Venganza por amor: Infiltrado

read
64.6K
bc

Prisionera Entre tus brazos

read
101.7K
bc

La embarazada sacrificada

read
3.1K
bc

Una niñera para los hijos del mafioso

read
52.6K
bc

Mafioso despiadado Esposo tierno

read
25.4K
bc

Eres mío, idiota.

read
3.6K
bc

Profesor Roberts

read
1.7M

Scan code to download app

download_iosApp Store
google icon
Google Play
Facebook