el otro oeste.

capitulo 2 la llegada.

Logro dormir un par de horas durante la madrugada

— Alicia — dijo jacinta para que se levantará

— Estoy despierta — dijo levantarse

— Traeré un poco de agua — dijo Jacinta saliendo de la cabina

Alicia se frotó la cara y pensó como sería su esposo no le importaba tanto el físico bien podría ser un hombre poco agraciado pero le suplicaba a todos los santos que no fuera un mal hombre y que la tratara por lo menos un poquito bien

— Por favor dios que no me pegue — dijo juntando sus manos como lo hacía su Nana cuando oraba

Jacinta por fin volvió con una jara de agua para lavarse la cara y las manos

— He pensado en que peinado y que maquillaje te haré — dijo Jacinta

Alicia no puso mucha atención a lo que su Nana le decía

sin saberlo la tarde llego

Alicia vio los colores del ocaso para distraerse de los pensamientos que la envolvían pero ni la belleza del paisaje lograron calmar sus miedos

El silbato de llegada sonó haciendo que saliera de su letargo

cuando llegaron ya las esperaba una carreta

— Buenas noches damas — dijo aquel hombre con un marcado asentó campirano

— Buenas noches — dijo Alicia tratando de adivinar si este sería su prometido

el hombre sintió la mirada de Alicia

—Nos tomara un buen rato llegar hasta la casa del señor Smith- dijo aquel hombre

— Creí que usted era el señor Smith- dijo Alicia con algo de pena pero con alivio al ver qué ese hombre podía partir su cuello a la mitad

el hombre solo sonrió negando con la cabeza

El camino era bastante complicado había demasiadas piedras y eso hacia que la carretera no se mantuviera estable

Alicia vio que el pueblo era más pequeño de lo que se imaginaba

hasta que finalmente llegaron a la mansión más grande del pueblo

el cochero les ayudo a bajar el equipaje

y se marchó no sin antes despedirse de manera muy cordial de Alicia

Una vez a dentro ambas mujeres se dirigieron al salón la única habitación con velas encendidas en toda la casa

el salón era amplio y con algunas velas distribuidas pero apresar de eso la luz no era suficiente

— Buenas noches señor Smith- dijo Jacinta señalando discretamente al hombre que estaba vestido de n***o y con una copa en la mano empujando levemente a Alicia para que se acercará

Alicia pudo ver a un anciano bastante mayor y no pudo evitar sentirse feliz

— Buenas noches señor Smith, soy Alicia de león, es un gusto poder conocerlo al fin — dijo Alicia con alegría al saber que ese hombre no le pagaría ni tan fuerte ni tan frecuentemente como lo hacían su papá y su hermano

— sabía que eras bonita — dijo el anciano con una sonrisa que mostraba sus pocos dientes sonrisa que ella del volvió de manera dulce

— Creo que al hombre que buscas soy yo — dijo un voz varonil entre la oscuridad

— ¿ Señor Smith ? — pregunto Alicia

— Así es, tu futuro marido — dijo el con amargura y con voz tosca

Alicia pudo ver a un hombre fuerte y apuesto salir de la oscuridad

su cuerpo era bastante fornido, sus brazos fuertes podrían matarla con facilidad si quisiera apresar de ser bastante guapo y con unos hermosos ojos verde oscuro ella no estaba nada feliz al saber que ese hombre sería su esposo

algo en ella se había apagado y sus ojos ahora se veían sin vida

— Te dejare algo en claro yo tampoco quiero casarme contigo — dijo al ver la cara de Alicia sintiéndose ofendido

Ella no respondió nada solo se desvaneció pesadamente al suelo

Máximo no podía creer que solo con esas palabras pudiera causar tanto en Alicia

— Alicia — grito Jacinta corriendo a su lado

— ayúdale — dijo el anciano con fuerza al ver que el joven no se acercó

— si abuelo — dijo Maximo cargándola hasta su habitación

cuando Alicia despertó estaba en una habitación oscura quería salir pero no sé atrevía a moverse

— Ayúdame dios por favor — dijo Alicia en voz tenue

— ¿ Estás enferma ? — preguntó máximo

— No señor, es que no he comido bien — argumento Alicia

Máximo encendió una vela para poder ver a Alicia

— ¿ Estos moretones de que son ? — pregunto el con voz molesta

—Me he lastimado durante el viaje señor — dijo Alicia nerviosa

— No te creo y te conviene decirme la verdad — dijo Maximo

Alicia dudo un momento sobre su decirle o no al hombre

— Me... golpeo mi hermano — dijo Alicia bajando la mirada con pena

el comprendió el miedo que sintió Alicia al verlo e incluso se compadeció por ella

máximo tocó una pequeña campana y enseguida subió oliva una muchacha bastante menuda y de pelo lacio negro

— Oliva podrías traerle algo de cenar a mi esposa y también llévale a la señora — dijo Maximo

— En seguida señor Smith — dijo oliva saliendo

— ¿ Estás embarazada ? — pregunto Maximo sin miramientos

— No señor — dijo Alicia con pena

— ¿hace cuánto tuviste tu último periodo? — pregunto el

— Señor, me incomoda hablar de eso — dijo Alicia cuando Maximo la interrumpió

— Bueno seré tu esposo y no me gustaría saber que mi mujer tiene al hijo de otro — dijo el

Alicia estaba notablemente incomoda con lo que iba a responder pero no quería hacer enojar a este hombre

que sin duda alguna con uno solo de sus golpes sería suficiente para romperle un hueso

— Bueno...soy... virgen — dijo susurrando para que no la escuchará nadie más por la pena que esto le ocasionaba

— Entiendo, de igual manera llamaré a un doctor para que te revise — dijo Maximo con reserva a lo que Alicia solo asintió

cuando vio entrar a oliva que hacerlo una charola a la cama

— buen provecho señora —dijo saliendo de la habitación después de colocar la charola

— No me gusta que coman en mi cama pero por ser tu lo permitiré — dijo Maximo

Alicia no sabía que decir ante estás palabras tal vez este hombre no fuera tan malo pero por su semblante sabía que no debía provocarlo

— Gracias — dijo con cierto temor

cuando terminó de comer el se llevó la charola a la cocina.

cuando iba de regreso a su habitación se encontró con Jacinta

— Señor Smith ¿ está noche dormiré con Alicia ? — pregunto la anciana

— No ella dormirá en mi habitación como mi esposa — dijo Maximo secamente

— pero aún no están casados — argumento Jacinta

— ¿ Que tanto es un día más ? — dijo el hombre

— Pero... — dijo cuando el la interrumpió

— váyase a dormir al cuarto que le asignaron por qué mañana nos levantaremos muy temprano para ir a la iglesia — dijo él entrando si más a su habitación

Alicia ya estaba dormida cuando el entro así que se quitó la ropa quedando solo en ropa interior

a al mañana siguiente los gallos comenzaron a cantar muy temprano lo cual asustó a Alicia despertandola de inmediato

para ver a Máximo acostado al lado de ella tomando su mano

ella lo miro detenidamente era muy atractivo y varonil

Ella se movió un poco y el despertó

se levantó de inmediato pegando un salto para tomar su reloj

lo que generó miedo en ella

— Son las 5 tienes que alistarte, a las 6 nos iremos a la iglesia- dijo Maximo

mientras se vestía

el salió de la habitación y se encontró con oliva

— Señor está listo el baño — dijo ella

— ¿ Dejaste suficiente agua para la señora y para mi ? — pregunto Maximo

— Sí señor y también puse los jabones con fragancia que encargo de la capital y ya le lleve también a la señora Jacinta — dijo oliva

— Bien ahora ayuda a mi esposa a quedar lista — dijo el

La muchacha solo asintio y luego entro a la habitación para ayudar a Alicia

— Señora está listo su baño — dijo oliva

indicándole la puerta que era el baño

cuando terminó de bañarse

entre jacinta y oliva le ayudaron a ponerse el vestido maquillarse

— Te ves hermosa mi niña, tu madre estaría feliz de verte así — dijo jacinta al borde de las lágrimas

— Parece un ángel — dijo oliva conmovida también

de repente tocaron a la puerta para indicar que la carreta estaba lista

Alicia suspiro esperando que no fuera tan mala su nueva vida