CAPÍTULO CINCO
El equipo Ojo de halcón llegó a Marsella menos de dos días después del comunicado inicial de Grant a Broadway. No hubo fanfarria, ni notificación oficial al SIS local, y la única vez en que se reunirían con su hombre en tierra, que respondía al criptónimo de Gorila, sería cuando hubieran terminado su operación de vigilancia y tuvieran algo que reportar.
Se estableció una base en las afueras de la ciudad, se contrataron vehículos, el equipo fue desempacado y se organizó una rutina. Eran autosuficientes y estaban bastante de su cuenta como acostumbraban hacer. Todos eran comunes y corrientes, hablaban un francés fluido y eran expertos en mezclarse en el ambiente. Los hombres y mujeres de Ojo de halcón prepararon una posición fija en un hotel adyacente al hotel Azure, se esta
