Capítulo 12 Dolor De Espalda me dirigí a la cocina para llevar el plato donde había cenado, no tenía la necesidad vital de llevar mi plato a la cocina, menos en un momento en que más creía era tan importante hablar, fue en realidad que no quería ver la expresión triste en su rostro y no halle más escusas para no verla que retirarme en ese momento, pues para ser honesto siempre escapaba de los sentimentalismos y más aún cuando algo tenía que ver mi hija, pues en realidad como padre nunca soportaba verla tan siquiera preocupada. Justo en ese mismo instante bajaba por la escalera Jorge trayendo consigo también el plato donde había cenado, una mirada fría, a la vez avergonzada fue la que me brindo el muchacho que sin mediar más que un saludo paso por mi lado y dejo en el fregadero su plato,

