Pov: Demian
– Papá, Josh se puso loco, mami le pegó — Miro a Penny palidecer mientras viene caminando y bajo a Siena; apresurado, cuando la veo desvanecerse.
Llego a ella que abre los ojos apenas con fuerza.
— ¡Bonita! ¡Mi amor! ¡Mírame! — Ella se desmaya sin razón aparente.
— ¡Mami, mami! — Siena está asustada a mi lado.
— ¡Oh Dios! — Cali y Dante parecen en shock.
Pero yo tengo un horrible déjà vu, la tomo en brazos.
— ¡Dante por favor, dime que tienes auto! — Él reacciona rápido y corre a la salida — ¡Cali, encárgate de Siena!
— ¡Mami!
— Tranquila, princesa, papá llevará a mamá con el doctor — le digo a mi pequeña mientras salgo tras Dante apresurado.
Cuando salimos de allí me encuentro con Mila y Valentin, veo a muchos de mi familia y principalmente al estúpido cara de pan.
Sigo pensando en lo que dijo Siena. "Se puso loco" "Mami le pegó"
Lo miro muy mal mientras tras de mí vienen Mila y Valentin.
— ¿Qué sucedió?
— No tengo tiempo, la llevaré al hospital.
— ¡Es mi mujer! — me giro, mirando al estúpido pan triste.
— Tú te quedarás aquí a dar explicaciones — dice Valentin, con firmeza. — Llévala Demian, iremos tras de ti.— Subo con Penny al auto y Dante arranca sin preguntar en dirección al hospital.
— Bonita, despierta — La muevo y ella se ve pálida, no responde. — Abre los ojos mi amor, vamos, bonita — ella se mueve un poco y trata de abrir los ojos pero parece que se le cerraran.
— Dem... ¡AY! — se toca el vientre y grita con dolor.
— ¿¡Qué sucede!?— Me preocupo y ella solo se hace un bollito, apretando su vientre mientras se queja. – ¡PENNY!
— ¡ME DUELE! ¡AY! DEM... — La pego a mí sin saber qué hacer, con impotencia recordándome uno de lo momentos más horribles y dolorosos de mi vida.
— Penny, por favor — Mis lágrimas se escurren y Dante llega al hospital.
Abro la puerta y ya hay médicos listos para ingresarla ya que entramos por el área de urgencias.
— ¿Qué le sucede?
— Se desmayó, le duele en vientre, ella... no sé qué le sucede, por favor... — Penny sigue quejándose de dolor.
— La revisaremos, ¿Cuál es su nombre?.
— Penélope Andrade— se la llevan y me quedo como vacío.
Me tiemblan las manos, mis lágrimas se escurren sin parar.
— Demian... — veo a Dante y siento que no puedo más. — Ella estará bien — Solo lo abrazo porque necesito eso, estúpido que me haya vuelto tan dependiente de tener cerca a personas que me den confort en momentos difíciles.
— Solo quiero que esté bien, que no sea nada malo.
— Tranquilo, ella estará bien, solo debes pensar positivo. — Asiento y me separo de él.
— Gracias, lo siento.
— No es nada, Demian, te entiendo. — seco mis lágrimas con el dorso de mi mano.
Por la puerta entran, Cali; con Milo en brazos y Siena de la mano.
Atrás; Mila, Valentin y Josh.
Ese idiota ¿Qué carajos hizo?
— ¡Papá! – Siena corre hacia mí y me agacho para recibirla con un abrazo.
— Mi princesa, lamento haberte dejado, mamá necesitaba venir al médico — Ella se aferra a mí.
— ¿Mami se hizo nana? Fue Josh, él le hizo nana a mami — Acaricio su cabello y la cara llena de sorpresa de Mila y Valentin me dicen que están en shock por enterarse que Siena es mi hija.
— Hola, lamento no haberlos saludado, todo...
— Una situación complicada — dice Valentin. — Me gustaría saber qué pasa, pero creo que ahora no es el momento.
— Es obvio, Val, ¿Cómo nunca nos dimos cuenta lo mucho que Siena se parece a Demian? ¡Pero es que ustedes ni siquiera eran cercanos! ¿Cómo lo íbamos a pensar? ¡Estoy impactada! — dice Mila, con su verborragia tan característica de ella.
— Yo creo que de esto sería mejor hablar cuando Penny despierte, ahora... — Miro a Josh — ¿Qué le has hecho? — Lo acuso sin siquiera dudar.
— Yo no le he hecho nada, yo no tenía idea de que ella y tú, además... aquí soy el más perjudicado, yo planeando algo romántico para sorprenderla, pero la sorpresa me la llevé cuando ella me dijo que no quería estar más conmigo, solo para huir contigo — ruedo los ojos.
— Hacerse el idiota no te queda, ella me dijo que iba a dejarte, ¿No lo notaste? ¿Ella no te comentó nada de nada acerca de hablar contigo? ¡Por favor!
— ¡Yo no tenía idea!
— ¡Actuaste como un demente! — dice Cali, enojada — ¿Por qué Penny te golpearía? Además, gritaste como un loco, tú ya sabías de Demian, porque dijiste ¿Dónde está? Cuando lo escuchaste por los altavoces — Cali es dura, firme y no duda en ningún momento.
— Yo... yo soy quien está sufri...
— La que está con los médicos es mi mujer, así que creo ella es la que más está sufriendo acá.
— ¿Tu mujer? ¿En unos días se volvió tuya? ¿Que pasó en estos 3 años de la vida de Siena que no estuviste?
— Cierra la boca, yo no tenía idea que Siena existía.
— ¿Por qué te lo habrá ocultado Penny?
— ¡Cállate pedazo de idiota! Estoy seguro que tú le hiciste algo, no te confundas, porque pudiste tenerla pero ella siempre fue mía...
— No creo que mi hija sea un objeto para que ustedes se la estén disputando, deberían escucharse hablar, los dos parecen unos idiotas, que por lo pronto quiero lejos de mi hija y de mi nieta por esa actitud — Valentin es tajante y se acerca a mí.
— No, Abuelito, no le hables así a papá — Siena me abraza con fuerza.
— Siena ven con el abuelo, que tu papá tiene cosas que hacer.
— No, no quiero, papá va a cuidar a mamá, Josh es loco, malo, asustó a mami — Miro a Siena, más enojado aún.
— Mi amor, ve con tu abuelo — ella niega.
— Val, todos estamos alterados, creo que solo debemos calmarnos, mantener esto en paz. Penny es la única que puede aclarar esta situación, su palabra es la que vale. — Mila interfiere.
— No me gusta que piensen que Penélope es una posesión o algo así…
— Val, mi amor, mira a Siena, ella no miente, ella quiere estar con Demian — a mala gana Valentin solo se aleja con Mila para sentarse y los veo hablar pero no sé de qué.
— Todo esto es tu culpa, no podías solo dejarla en paz — miro a Josh molesto.
— ¿Qué le hiciste? — No me mira y solo gira su rostro.
— Demi, ven aquí — Cali me estira para que vayamos a sentarnos junto a Dante que tiene a Milo.
— ¿Qué pasa, Cali?
— No le digas nada, él planeó la boda sorpresa a Penny. Cuando me enteré te dije, pero la cara de Penny cuando llegó, ella no sabía, ella no parecía tener idea, yo creo que él sospechó cuando Penny lo llamó y quiso retenerla o no lo sé, quiero creer que no es tan idiota. — Eso es terrible.
— Eso no me gusta nada.
— Ni a mí, Penny lo abofeteó, ella estaba muy alterada, yo creo que el estrés la sobrepasó. — suspiro con molestia.
Ese imbécil puso mal a mi bonita.
Unos médicos se acercan y me levanto al instante.
— Familia de Penélope Andrade. — antes que yo llegue, Valentin y Mila están ahí.
Me acerco a querer escuchar y el cara de nada igual.
— Ella está estable, al parecer sufrió un pico de estrés y además con su condición le hemos dado un sedante suave que no afecte al feto, para que ella esté relajada. Tuvo un leve desplazamiento de la placenta que con un poco de reposo se solucionará, buscamos su historial y vimos que padece Trombofilia, así que recomendaría empiece el tratamiento apenas sea posible — frunzo el ceño confundido.
— Perdón... ella — las palabras se me atoran – Ella está...
— Ella está embarazada ¿Lo sabían, verdad? — siento que de repente un balde de agua fría cae sobre mi cuerpo, todo se hela para mí.
— ¡No tenía idea! — dice Josh.
Lo miro, sintiendo mi mundo derrumbarse, él me mira frunciendo en ceño.
— ¿De cuánto tiempo está? — pregunta Josh.
— Le hemos hecho una ecografía y pareciera que de entre 8 y 10 semanas, ya está avanzado, pensamos que sabían.— Me alejo para sentarme.
— Papi... ¿Qué te sucede? — niego.
— Sieni pequeña, ¿Puedes ir con la tía Cali? — Cali se acerca.
— ¿Estás bien? — pregunta y niego. — ¿Cómo está Penny?
— Ella está bien, ella... ella está embarazada — miro a mi hermana, tratando de expresar lo que siento en este momento.
— Oh...
— ¡Esto no puede estar pasando! — Cubro mi rostro.
Ahora ella tendrá que estar con el imbécil... No, no permitiré eso, me importa una mierda que sea el padre, él... no dejaré que ella se quede con él, no es justo.
Pero no me importa, puede ser el padre pero no por eso va a alejarme de ella, de mi hija. ¡Qué se vaya al diablo!
Me levanto y me acerco al cara de pan imbécil, detestable, que ahora resulta... ¡No quiero siquiera decirlo! Porque parece que me clavaran algo en el pecho.
Él estuvo con mi bonita, ella… ella está embarazada de él.
Lo veo frente a mí y su mirada muestra odio, dolor y quizás algo más.
— No me importa — le digo de frente.
— Supongo que nunca te importó que ella esté conmigo.
— No. Te digo que no me importa que sea tu bebé, yo no voy a dejarla, porque aunque la hayas querido convencer, ella y yo nos amamos, serás padre pero nada más — me mira frunciendo el ceño y de repente su mirada cambia.
— ¿Eso es lo que crees? — Sonríe como si de repente tuviera mucha seguridad.
— Sí, a mí no me importa que sea tu bebé, yo a ella la elegí, no voy a dejarla ir por eso, así que hazte la idea de que ella...
— Ella no me amará, pero ¿Piensas que no sentirá culpa de que su nuevo bebé también crezca sin su papá? Además, puedo hacer muchas cosas para terminar haciendo de sus días un suplicio si ella decide quedarse contigo — Sonríe y se aleja hacia la salida del hospital.
¿Me amenazó? ¿Ese pedazo de imbécil me amenazó?
Salgo tras él cegado.
— ¿Tú me amenazaste? — Lo detengo en la salida del hospital.
Se voltea y me mira tranquilo.
— No, pero… ¿Sabes qué pienso? — Yo pienso que le voy a romper los huesos si me vuelve a amenazar.
— ¿Qué? — que me diga algo nada más.
— Que por el bien de Penny, por su salud emocional, deberías dejarla ir, no te costará demasiado; ya lo hiciste una vez, solo desaparece, déjala que yo la cuide, que cuide a nuestro nuevo bebé. ¿Entiendes lo que esto significa? Un bebé mío y de ella, eso cambia mucho todo ¿Crees que ella estará feliz contigo? ¿Acaso creíste que ella y yo nunca estuvimos juntos? — quiero romperle los huesos. — Fíjate lo mucho que ella estaba sobre mí que terminó embarazada, piensa ¿Qué desearía ella? No te aflijas, me la llevaré a Francia, puedes quedarte a Siena, después de todo...
Un puñetazo va a su rostro porque juro que ya no soporto verle la cara.
Él no se queda tranquilo y me golpea, se lo devuelvo.
— Maldito imbécil, deja de hablar por ella, ¿cómo piensas que ella dejaría a nuestra hija? — lo golpeo con fuerza y él a mí, caemos al suelo y no dejo de golpearlo.
— No entiendo cómo aún puedes seguir desesperado por ella, ¡es una maldita ramera!— Lo tomo de la ropa y comienzo a golpearlo.
— ¿¡Cómo te atreves a decirle así!?
— ¡DEMIAN! — escucho la voz de Cali. — ¡Suéltalo!
Siento que me agarran de la ropa, los guardias de seguridad del hospital nos sostienen.
— ¡ME IMPORTA UNA MIERDA QUE SEA TU BEBÉ! ¡NO TE VAS A ACERCAR A ELLA! — grito sobrepasado, él solo se ríe a carcajadas.
— ¡Demian, estás loco! — Mi hermana me regaña.
— Si no se retiran del hospital, llamaremos a la policía — camino alejándome de la entrada.
— ¡Se merecía la paliza! — me limpio la boca que me sangra.
— ¡Por Dios, Demian! ¿Qué te pasa?
— Le dijo ramera, me amenazó, dice que él tiene que estar con ella por ese bebé, ¡Maldito idiota!
— Demián, cálmate — Mi hermana saca un pañuelo y me limpia la cara. — ¿Qué te pasa? ¿Acaso tú no sabes o qué? ¿Estás muy mal de tu memoria o estás idiota? — la miro sin entender.
— ¿Qué memoria? Ya estoy harto, no puedo con todo esto, ella tiene 8 semanas de embarazo, es una mierda, porque no quiero aceptar que ella tenga un bebé de él, pero a la vez no voy a dejarla, no quiero, yo la amo tanto, esta mierda ya me está cansado. ¡Loco! ¡No es justo! — Mis lágrimas comienzan a salir sin control — ¡Ya basta! ¡Quiero volver! ¡Quiero que esto se acabe!
— Demian, no sé si estás en shock o qué, pero creo que debes hablar con Penny cuando se despierte, yo... solo creo que debes calmarte, te echarán del hospital por ser un animal.
Miro a Josh que está con Mila y Valentin.
— Pareces un loco — suspiro. — Habla con Penny cuando despierte, porque lo que pasó con ustedes, no sé, yo solo digo.
— ¿Qué pasó con nosotros? No entiendo.
— Ay Demian, no quiero ser explícita, pero no sé sí usaron condón cuando se vieron hace unos meses — la miro sin entender. — ¡Ay ya, qué impresión! Solo cálmate y ya.
¿Yo y Penny hace meses?
¿Cómo?