En mi segunda vida...

CAPITULO 3: El PRIMER ENCUENTRO

MELINA

No me agrada tener que trabajar de madrugada pero que más... esos turnos tan rolados, una semana de día otra de noche, creo que hasta ya me acostumbré.

Hoy en especial me siento muy mal, por qué justo cuando ya estaba dándole vuelta a la página, aparecen otra vez, ese imbécil que me hizo sufrir y aquella traidora, ni el haber cambiado de ciudad me salvó de ese encuentro tan desagradable.

Caminaba rumbo a mi empleo para poder subir al último bus que me llevaría al trabajo, pues tendría que estar en turno nocturno, llevo mis audífonos puestos escuchando un poco de música para relajarme antes de tener que comenzar a trabajar, cuando de repente escuché una risa que me llamó la atención pues se me hizo tan familiar...

Y justo ahí estaban las dos personas que menos quería haberme encontrado en este mundo... mi hermana y ex prometido. Aún tengo tan presente todo ese episodio tan doloroso y no miento, mi estomago dio vueltas y vueltas imaginándome ser yo la que él llevaba de la mano, pero no! no es así y nunca lo será.

Con tan solo ver las risas de ella, de lo feliz que debe de ser con él me hacen ser muy infeliz, por que tendría que ser yo la que estuviera en su lugar... a la misma vez pienso cómo puede estar tan feliz sin tener la culpabilidad de haberle quitado la felicidad a su propia hermana.

Si, mi hermana, me quitó a mi novio, mi familia y todo lo que me hacía feliz... de repente ella giró y ahí fué cuando mi mundo se me vino abajo al darme cuenta que ella estaba embarazada. Ellos esperaban al fruto de ese amor que me destrozó por completo. Traté de salir corriendo de aquel lugar, corría y corría hasta que llegué a mi trabajo, con los ojos llenos de lagrimas y de un dolor en mi corazón.

Será mejor que me ocupe por trabajar y que deje pasar todo este mal momento, de todos modos nada se puede cambiar y yo tengo que seguir con mi vida así como ellos lo han estado haciendo. Me coloqué mi bata, mis guantes y me puse a hacer lo mío.

Que desgracia, mira que ser engañada por mi prometido con mi propia hermana, yo que pensaba en trabajar para poder lograr un patrimonio excelente con mi futuro esposo y con una casa llena de niñitos corriendo, teniendo un asado el fin de semana con toda la familia, pero no, no todo es como lo imaginamos y en el peor de los casos termina siendo una trágica historia...

ó ¿tú qué opinas?... mmmm... Ana, tu nombre es Ana, tan joven tuviste que morir -le dije a este cuerpo sin vida el cual estoy preparando para partir a esa caja. Hay veces que pienso que me estoy volviendo loca por que platico con todos estos cuerpos sin vida, de como soy tan desafortunada. Bueno por lo menos ellos no me reclamarán ni me dirán lo aburrida y absurda que suena mi historia jaja... Si no fuera por este maravilloso trabajo y por todas estas oportunidades que tengo para desahogarme con cuerpos sin vida, yo tendría atorado aquí en el pecho tantas palabras que quisiera decirle a esas personas que me han herido. Por una parte me ha ayudado a poder liberarme un poco de mi tristeza.

- Melina ¿otra vez hablando con muertos?

- Cállate tarado! me acabas de interrumpir esta plática tan amena que tenía con mi nueva amiga Ana...

- Hay Mel tu no tienes remedio, pero... espera... ¿por qué tienes esos ojos tan lindos llenos de lágrimas?

- Si te contara, me entenderías...

- Anda, ánimo... tomemos un refrigerio ¿te parece? solo registra al nuevo que acaba de llegar, al parecer un auto sin control lo atropello.

- Oh! que lástima, siempre ver casos así me dicen que soy una estúpida por llorar por bobadas. Me apuro y te alcanzo Dante.

- Muy bien! te estaré esperando hermosa.

Después de que Dante me dejó con mi siguiente muerto, comienzo a revisar sus datos, para proseguir a levantar esa sábana que cubre el cuerpo y poder ponerlo lindo para cuando tengan que darle el último adiós sus personas queridas.

Nombre: Diego Olavarría

Edad: 23 años

Que desafortunado, con toda una vida por delante, seguramente habrá personas que sufrirán mucho por tu partida, levanto la sábana... no puede ser! que hombre tan espectacular. Seguramente dejò alguna novia enamoradísima pues es tan guapo. Lo comienzo a preparar y no sé que pasa que me dan ganas de tocar de su rostro, poco a poco fuí quitando la sábana que lo cubría y me doy cuenta que él no murió de ser arrollado por un auto, tiene impactos de bala, murió desangrado por esta bala que le atravesó el corazón.

Su cabello color castaño con esos rizos tan hermosos me llama la atención, ¿puede haber algún hombre mas perfecto que él? enseguida observo y veo que aún trae una pulsera, muy linda por cierto, seguramente se la regaló alguien muy importante y por eso la portaba, no se dieron cuenta en retirarla y yo aprovecho para quitarsela y guardarla en mi bolsillo. Ahora termino de sellar esos enormes agujeros que le quedaron en ese abdomen tan perfecto. Y si estoy loca es poco por que lo toco con las yemas de mis dedos, tenía un cuerpo tan estupendo. Sigo recorriendo con mis ojos cada parte de él y me detengo justo en sus labios, son tan magníficos y algo me llama hacía ellos, le doy un ligero beso y de inmediato me doy cuenta de que lo he hecho ha sido una estupidez digna de mi.

Pues ya está listo solo te colocaré esto aquí, a ver Diego mucho gusto fué un placer a verte conocido en éstas circunstancias, me llevaré a la tumba cuando me toque ir, la locura que acabo de hacer contigo.

Lo vuelvo a tapar y coloco las pruebas que seguramente vendrán a recoger para poder seguir con la investigación de la muerte de este hombre.