No podía asimilar nada de lo que Sashita me había contado, sentía que mi cabeza era un volcán y pues con ustedes, señoras y señores, ¡el típico y más increíble! "Mi cabeza hará erupción". Es que nada encaja, siempre viví una vida normal, nunca me había pasado nada de esto, a veces hasta iba a la iglesia, pero claro, ya que tengo el saco de sal encima, no esperen, no es una saco, ¡soy un mar muerto! Es que no recuerdo romper ningún espejo, tampoco nada sobre los mitos de la mala suerte, y yo aquí, que ya me veo cantando la de Jessey y Joy. ¿Por qué siempre soy yo la de la mala suerte? Pero con lo vaga que soy, no pensare más, mejor dormiré, tengo que aprovechar esta cómoda cama, además de que me duele todo el maldito cuerpo, ni que me hubiese pasado un tráiler por encima carajo.

