Pov: Renata Wallace.
Justo cuando estaciono afuera de la casa del Payasito, mi teléfono suena.
Es mi mamá. Mierda.
—Hola, mamá… —atiendo casual y risueña.
—Reni, ¿cómo estás? —esas preguntas están incómodas—. Te llamaba porque vinimos a Los Ángeles a la barbacoa de tu abuela. Vimos a Anabelle, dijo que estabas en tu trabajo. Tu papá quiere verte, ya sabes…
—Ay la barbacoa, te juro que intenté ir, pero estoy con muchísimo trabajo. Me surgió un proyecto en Las Vegas, es muy importante, si lo tomo sería bueno para mí y mi carrera. Tú me entiendes, ¿verdad? Iré a ver a la abuela otro día, lo prometo —no van a regañarme por no ir a ver a mi abuela, porque siempre que puedo lo hago.
—No te preocupes, tu abuela lo entiende. ¿Dónde te estás quedando? Podríamos ir de pasada antes de volv
