Agua Grande. Zona Restringida

Sueños

Edward había salido por agua, y mi amigo aún investigaba más, está vez de Argelia.

_ Es raro, no me aparece nada sobre esa corporación, ni del libro ese. ¿Cómo se llamaba?

_ Planeta Extraño. Lo tenía Katamoto, lo que me dice que debe ser un libro de la época en que comenzaron las exploraciones galácticas. Había un planeta llamado Leviatán que tenía científicos y militares preparando a ese planeta para ser habitado, ya tenían poblados construidos, satélites y todo eso. Estaba otro llamado Carora que también estaba en el mismos proceso.

_ Pero dijiste que fueron atacados por criaturas, ¿crees que si se da la posibilidad de viajar hasta allá, ese planeta esté fuera de peligro?_ Preguntó Edward, entrando a la habitación con el agua para Anthony.

_ Todo depende de varios factores, cómo se adaptan a vivir esas criaturas, o si al ver que ha no tenían humanos que comer simplemente murieron, o tal vez entraron en un estado de hibernación o no se, se murieron y ya. Por eso necesito más información sobre ese libro, sobre Argelia, sobre todo lo que se oculta. Me volveré loco.

_ Creo que conseguí algo_ Vimos el monitor donde Anthony leía_ No se dice la fecha pero se había alertado un brote de Ébola en el centro africano, al parecer, era una reacción muy extraña, las personas parecían muertos vivientes... Aquí hay una nota: "Laura Bumbwi, habitante de la zona, dijo que se escucharon gritos como de perros que provenían de la selva, cuando fueron a ver, eran personas que comenzaron a morder a otros, y estos mordidos rápidamente se convertían en sonámbulo, a los día llegó un equipo médico que aseguró que era un brote de Ébola"... Wow! ¿Esto es real?

_ ¿Qué? ¿No creías?

_ Robert, es difícil creer en cosas así cuando nada de eso fue público.

_ ¿No lees nada más?_ Preguntó Edward.

_ No, es lo único que tengo. Seguiré buscando...

_ Necesito aire_ Dije saliendo del cuarto, entré a mi habitación, cerré la puerta y comencé a llorar tirado en la cama.

O sea, soy un maldito clon de un hombre extraño para mí y hasta para mí familia. Quería seguir llorando, y de hecho, lloré pensando en tantas cosas que me dormí. Fue un sueño placentero, dormir en mi cama, en mi casa y rodeado de mi familia. Estaba tan cargado de cosas que mis neuronas hacían cortos entre ellas.

Quería seguir así, dormir por mucho tiempo. Dormir en un manto infinito de tranquilidad y ternura. Solo dejarme llevar por la suavidad de una tele de seda y con un ambiente olor a mango. Y si despertase que sea en un mundo lindo, limpio, tranquilo, un mundo sin problemas, sin frustraciones, un mundo donde la muerte solo sea un desagradable momento inoportuno. Despertar en un piso de cristal y deslizarme cual patinador sobre el hielo en una danza especial.

Solo quería eso, solo quería... Paz.

La vida es un acto lleno de amor, de un amor infinito de alguien. Ver en Agua Grande los ciclos naturales de los que solo escuchaba y leía; era mágico. Ver como lo verde era un predominio, y el azul un deleite, escuchar esos sonidos extraños y agradables, sentir la lluvia, ver el sol, probar las delicias que proporcionaba al paladar era algo singular. Un lugar así, pero sin salvajes, me imagino al planeta Leviatán, y no se porque lo traigo a colación, lo que dijo Edward podría ser verdad, no se sabe en las condiciones en que podría estar.  ¿Existirán otros planetas? Imprus, vió en sus visiones muchos planetas habitables y muchas naves llegando a ellos. ¿Qué quiere decir eso?

Me despertó una suave vos, era mi mami quien estaba sentada en la cama a mi lado.

_ Buen día! ¿Cómo dormiste?

_ Solo me faltaban los ponys y los arcoiris para que fuera el sueño perfecto. Dormí muy bien, tuve buenos sueños o cosas que realmente quiero que pasen.

_ Eso es un buen presagio mi pequeño. Sin importar lo que pase a partir de ahora, solo recuerda que somos tu familia y que nunca te vamos a dejar. Aquí estaremos para luchar con los monstruos que sean.

_ Ustedes no van a luchar. Estarán en un refugio protegidos. Soy yo quien debe enfrentar al mundo.

_ Si es de tomar las armas y salir a matar bichos lo haremos. Nada lo va a impedir. ¿Te imaginas yo partiendo cabezas de zombis?

_ No me lo imagino mami...

_ Yo tampoco_ Reímos un poco y ella concluyó_ Vamos a desayunar, el día será largo.

Salimos al comedor donde ya estaban todos, mi familia y mis amigos. Me quedé viendo esa bonita escena y pase donde me recibieron con calurosos buenos días. Eso lo aprecie mucho. Me senté junto al abuelo y comenzamos a desayunar.

_ ¿A qué hora se fue Anthony anoche?

_ Casi en la madrugada. Dejó una carpeta con cosas que encontró. Sobre todo de Elliot Cameron.

_ ¿Descubrió algo sobre él?_ Preguntó Emma.

_ Sí, creo que sí. Pero él dejó todo anotado por ahí, casi no quiso hablar mucho, dijo que le escribieras si tenías otras dudas.

_ Fue muy amable.

_ ¿Confían en él?_ Interrogó Max.

_ Claro, es un gran amigo.

_ En tiempos como estos se debe seleccionar a dedos a las personas en las que se debe confiar.

_ Tranquilo Max, no pasará nada. Anoche investigó muchas cosas que nos ayudarán a seguir.

_ Ya hemos preparado el equipaje para partir, hicimos todo muy modesto_ Fueron las palabras de mi mamá.

_ Yo hablé con mi familia anoche, sé que no debía hacerlo pero era importante que supieran que yo estaba bien y que iríamos. Estoy seguro que mamá lo agradecería, no le gusta que llegue gente a su casa en forma sorpresiva. Seguro salió de compra hoy para tener todo listo. También mi papá iría con mi hermano a acondicionar el refugio para estar más cómodos, es como un pequeño búnker debajo del suelo.

_ Seguro que moriré de claustrofobia_ Dijo mi mami.

_ Es mejor morir de claustrofobia que a manos de un zombi_ Rió Edward.

_ No le veo la diferencia, ambas serían una muerte_ Dijo Emma colocándose la mano en su frente.

_ Sí, pero una seria más terrorífica que la otra.

_ No hablemos de muertes, y sigamos comiendo_ Ordenó el abuelo y obedecimos.

Todos estábamos muy nerviosos. Después de desayuno nos vestimos con ropa de salir y comenzamos a idear la forma de salir de Paraguay, justo en el momento en que pensábamos, recibí una llamada del tal Elliot.

_ Nuestro equipo se compromete a ayudar y proteger a tu familia, los llevaremos a nuestros refugios en las montañas que están en el gran cañón en los Estados Unidos, estarán muy bien protegidos.

_ No sabemos quiénes son ustedes y cuáles son sus intenciones. En estos momentos es difícil confiar en compañías como la de ustedes.

_ Entonces, deja que por lo menos los ayudemos a salir de Paraguay, solo no podrán, sobre todo con la fuerte custodia militar que tiene el país en estos momentos.  Creo que somos la única forma de salir.

Respiré profundo, la verdad que confiar en personas así con grande influencia y que tiene en cierta medida de control, da mucho miedo, en este caso, él tenía razón, era la única forma de salir.