Capítulo Dos - Parte Uno

557 Words
Elizabeth Miller  No logro concentrarme en nada, ¿Por qué? Sencillo tiene nombre y apellido Liam Brown, ese estúpido es un patán, que cree que por el simple hecho de que tiene una mejor situación económica que otros, puede abusar de los mas vulnerables. Pero se equivoco conmigo, debí haberle dicho: Pues no no mi ciela conmigo no van esas. Toda la tarde eh tratado de centrarme en arreglar y ordenar todos los materiales para las clases que empiezan la semana que viene pero aquí estoy pensando en tonterías y gente que vale mi preciado tiempo, la buena noticia es que Kayle y yo conseguimos trabajos lo que significa que ya tenemos una preocupación menos.. - Vamos Liza tranquilizate, no pasó nada pusiste a ese hombre en su lugar. Y si intenta hacerte algo para eso me tienes - se sienta a mi lado y me abraza en forma de consuelo - Ambas uniremos fuerzas y si te hace algo le partimos las bolas, juntas - dice en tono perverso. - ¿Sabes que a veces das miedo Kayle? - digo y ambas reímos como locas. - Si es por cuidar de mi  hermana doy miedo a cualquier persona - pone una cara media rara y yo le lanzo un cojín que tengo al lado mio. - Gracias, pero me creo capaz de defenderme sola - sonrió y ella asiente como respuesta - Saldré a caminar un momento - informo levantándome del sofá, subo a cambiarme de ropa. Me coloco una falta que me llega unos cinco centímetros arriba dela rodilla, una blusa de tirantes rosa con una chaqueta color blanco y zapatos bajos. - Ten cuidado - dice preocupada y yo solo asiento - ¿Si sucede algo solo llámame, quieres? - Por supuesto, no te preocupes estaré bien, es un simple paseo... ¿Qué podría pasar? - digo encogiéndome de hombros - Bueno me voy. - Claro, adiós - me despido, salgo del departamento y comienzo a caminar sin rumbo alguno. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .  Es de noche y no sé como pero me encuentro en una especie de ¿bosque? Supongo que es unos de los bosques de California, si pues no recuerdo exactamente como llegue aquí, continuo caminando entre los frondosos arboles de los que se encuentra rodeando el bosque. Comienzo a sentirme perdida así que corro hasta cierto lugar donde veo algo de luz y por más peligroso que le podría parecer a cualquier persona normal, yo me sentía a gusto, como si estuviera en casa. Pero la tranquilidad que me profesaba este lugar duro poco puesto que ahora todo lo que siento de pies a cabeza es miedo, dirán Liza eres bipolar pero díganme ustedes ¿Qué harían si se ven rodiados de nada mas, ni menos que por lobos? No sé ustedes que Hubieran hecho pero yo, bueno mejor dicho mi cuerpo no se mueve para nada cosa que uno de los enormes lobos aprovecha, aproximándose a mi casi por reflejo retrocedo y el lobo de hermoso pelaje blanco gruñe por mi acción. Se abalanza encima mío y lo ultimo que recuerdo es ver todo de color n***o.
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