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RIHA

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Blurb

EDITANDO.

Peter Müller, es la perfecta sombra de Riha; conoce todo de ella, observándola, siguiéndola, anotando cada cosa que conoce y quiere conocer de ella, sabe desde cuantos pasos necesita para llegar de su casa a la universidad y también su rutina desde hace muchos años, su única razón de existir, es el objetivo de su vida, llevarla consigo.

Se enamoro de sus hermosos ojos color miel, luego de su piel color canela, su figura de preciosas curvas y, finalmente de su dulzura y desbordante inocencia.

Su inestable mente obsesionada con un ángel que, a su parecer era solo para él, que nadie más podía tenerlo, nadie más debía tenerlo, estaba decidido a que Riha tenía que ser siempre suya, por las buenas o por las malas.

Durante años uso somníferos en ella para treparse por su ventana y pasar el rato allí, observándola dormir por toda la noche, acariciando su cabello o solo soñando con secuestrarla sin dejar rastro de su inmaculada belleza.

La desencajada sonrisa de Peter al considerara cada punto, anotar cada posibilidad y concebir la idea del plan perfecto, la tendría consigo tarde o temprano, sabía todo de ella, de su vida, de su entorno, de sus padre.

Especialmente su padre, el mayor estorbo para concretar su plan, tenía que deshacerse de él, a como dé lugar, considero todo, pero nada le convencía finalmente.

Luego solo pasó.

La policía llego, las drogas, los registros falsos, el dinero en grandes cantidades.

Peter agrego más de lo normal del frasco de somníferos, amarro a su amada princesa y empezó a correr lejos con ella en su espalda perdiéndose en la larga carretera que se hundía en lo profundo del bosque. Días y noches Riha pasó encerrada en una habitación sin saber que sucedía o que hacer. Sentía el dolor de las fuertes ataduras y un dolor palpitante en su cabeza hecho en algún momento mientras dormía. Cada vez más el miedo se apodera de ella, pero eso no evita que cuando atreves de la puerta alguien le deja ya sea agua o comida ella acabo cayendo en miedo y la duda...

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sinopsis
Peter es la perfecta sombra de Riha, sabía desde los lugares que visitaba hasta cuántos pasos necesita para llegar, siempre estaba cerca, ya sea para bien o para mal, estaba a pocos metros siempre. Siempre trepado en su ventana valiéndose de que un árbol estaba cerca. La visible sonrisa en sus labios siempre estaba allí cuando la veía dormir. Era su razón de vivir. Miro decepcionado la luz del sol mañanero entrando por la ventana, acomodo su bufanda que cubría hasta su nariz y la capucha de su suéter para poder irse antes de ser notado por alguien. Miro por última vez a sus espaldas a su ángel rendido ante el sueño como dormía entre las sabanas blancas y respiraba lentamente. Suspiro resignado y se marcho saliendo por la ventana rápidamente y en sigilo como siempre. Las horas pasan y este ya no sabe que mas planear. Necesita el plan perfecto para traerla consigo. El trecho se hace largo mientras camina por entre los arboles mirando el cielo soleado. Desde su casa en medio del bosque, oculta de todo y todos, se queda en su estudio planeando todo, anotando lo que considera necesario y guardándolo en una agenda bajo algunas tablas sueltas. Respira profundamente y saca una cajetilla de cigarrillos del bolsillo de su suéter que está tirado en el suelo, lo enciende y se dedica a llenar sus pulmones con ese dichoso humo amargo que solo hace que se relaje mientras piensa en que hará. Escucha la pequeña alarma que le hace saber que alguien está en el muro externo de su residencia. Apaga el cigarrillo con la lengua y con indiferencia toma su celular que estaba en la mesa de dibujo junto a los planos y anotaciones desordenadas, camina apartando de su paso lápices cigarrillos al igual que papeles en el suelo con cosas tachadas y arrugados. Reconoció el auto que estaba esperando fuera y poniéndose el mismo suéter se acerco a la puerta de su estudio y salió. Con unos pocos tecleos en el celular abrió el portón del muro. Bajo las escaleras con planos en mano y algunas otras cosas. Salió de su casa y sin mediar muchas palabras entrego todo los tubos que contenían los planos. *almacén, edifico, fachada, oficinas, interior del almacén, estructura de edificio, sistema eléctrico, agua, distribución de los pisos y este es una referencia completa en papel cebolla.* Dijo serio y tras un ligero movimiento de su cabeza se marcho al igual que los hombres con los planos. Las notificaciones llegaron a su celular con rapidez y tras apagarlo siguió planeando su forma de traerla consigo. (….) Conducía rápidamente el auto n***o mientras maquinaba sus siguientes movimientos, trabajaba al lejos pero solo iba cuando tenía que hacerlo, en la empresa sabían perfectamente que no podían deshacerse de él, era prolijo en su trabajo, uno de los mejores arquitectos a nivel mundial, además que cualquier empresa que lo quisiera se llevaría también varios contratos, así que, darle gusto nunca fue mala idea. Cosa en detalle es que a Peter no le gustaba legarse de la zona cercana a donde estaba Riha, su amor, el ser que lo hacia sonreír con solo la simple mención de su nombre. Estaciono su auto en el sótano del edificio y con la misma elegancia de siempre bajo y se encamino al elevador principal mientras arreglaba su traje y con su rostro igual de serio que siempre, llego al último piso luciendo su palidez resaltada por el traje totalmente n***o. Los contratos caían como gotas de lluvia del cielo cuando la firma del arquitecto Peter Müller estaba en el papel, este no esperaba en lo absoluto. Quién diría que tenerlo todo era lo que menos le importaba cuando lo único que te daba la felicidad era lo que jamás podría tener. Este se propuso a tener todo a sus pies y lo que más desea es eso que lo tiene postrado en el suelo. Peter suspiro mientras centraba su atención en un solo punto mientras consideraba la opción de hacer todo alverez. Si no podía secuestrar a Riha en silencio. Haría que alguien más hiciera ruido para cubrirlo. ¿Quién haría tal tontería para ayudarlo? Sonrió ampliamente mientras consideraba que eso no era nada bueno para nadie. Descarto la idea. La reunión termino y por esa tonta sonrisa creyeron que le plan le parecía ideal. Este no tenía idea de nada pero igualmente asintió serio y relajado. Luego averiguaría que era. Este bajo hasta su auto y se sentó en el asiento del conductor y soltó un suspiro completamente dramático, quería con ansias volver, pero, le quedaba trabajo que hacer aun. Extrañaba pasar la noche dentro de la habitación de su ángel, observándola por su ingenua belleza, besando sus labios, acariciando su cabello, hablándole solo porque podía, indagando en la casa donde vivía con su horrible padre para encontrar algo para inculparlo de manera innegable. Pero Ese hombre era… muy cuidadoso. Demasiado para su gusto. Finalmente encendió su auto para dirigirse a su departamento en la ciudad y con el agotamiento de las tres semanas sin dormir bien apenas llego y salió del elevador en el piso de su departamento, cayó como inconsciente en la cama, por más de 39 horas, despertó casi dos días después sediento, hambriento y con algunos dolores de cuello. Se recupero del cansancio y se relajo con una botella de algún licor que no recordaba haber comprado mientras comía todo aquello que encontró en el refrigerador, cocinar no era lo suyo, tomo algunos tragos mientras respondía a sus dudas el mismo con respuestas algo toscas, sentía que sus planes eran complicados y tenía que guiarse por algo más. Sonrió ampliamente mientras una idea algo tonta estaba en su mente y le parecía un mal chiste pero, no era mala idea. Siempre se escondió detrás de una fachada opuesta al que era, alguien descuidado y con mala apariencia. Por ahora eso le funciono para poder seguirla espiando y acosando a su manera Pero, ¿Qué tal si hace lo contrario? ¿Qué tal si se hace completamente visible con otras intenciones? Ladeo la cabeza mirando a la nada, sonrió ligeramente mientras el vaso corto tintineaba con el hielo dentro, sabía que seria algo un poco tonto pero, ¿Quién dudaría de un millonario que quería un trabajador en su casa por una paga bastarte buena? Nadie, el dinero hacia que el 99% de las personas ignoran todo lo demás cuando la paga es buena, y alguien con su reputación seria un más provechoso, pero, eso le deja un problema. Apoyo los zapatos en la mesa estirándose, respirando hondo y siguió pensando ahora con mayor comodidad, quizás podría solo deshacerse de él. Apartarlo a un costado del camino. Pero, no sabia como para no levantar sospechas. respiró profundamente mientras acababa con su trago. miro al cielo raso y mordió su labio mientras realmente no encontraba una respuesta en concreto para el problema. considero simplemente ignorarlo, ese viejo no haría nada si solo se iba con ella y lo alejaba del camino rápidamente, podía solo no ponerle atención, pero, buscaría a Riha, pese a que ella es mayor de edad este igual podrá hacer un escándalo. necesitaba más tiempo, cosa que aparentemente tenía, Riha apenas iba empezando el semestre en la universidad, hay un trecho largo de tiempo para idear todo bien. necesita tiempo para todo y esto requería bastante planeación. (...) Necesitaba algo con que relajarse. dejo anotado su plan, estaba medianamente detallado con las cosas que haría, pero aún requería planeación. se metió al baño con una botella de licor de menta en mano y su celular mientras reproducía algunas canciones. *supongo que podría solo esperar a ver qué pasa.* dijo cerrando la puerta del baño mientras el agua de la ducha corría. salió con el cabello empapado y la botella vacía. tenía unos jeans oscuros a medio cerrar, se sentó en la cama a ponerse unas medias, encontró sus botas negras entre todos sus zapatos negros, ama el n***o, tomo un polo ajustado azul marino y una chaqueta negra, al no saber que elegir optó por un Rolex n***o con plateado y acabo por salir. no tenía intenciones de volver esa noche así que bajo por el elevador hasta el lobby del edificio y se fue caminando tranquilamente. Quedo de ver a unos amigos de su antiguo trabajo en una con casual pero, siempre terminan en cualquier otra cosa. está vez llegaron a un bar Casino, rodo los ojos apenas se vio dentro del lugar y a uno de ellos los sacaron por qué ya estaba ebrio de antes de llegar. Eran la una de la madrugada, esté estaba sentado junto a uno de sus amigos diciéndole a qué apostar, Peter siempre fue bueno en las matemáticas. era simplemente intocable por varias razones, pero esa noche estaba tocando sus límites, el Black Jack era su juego preferido. nunca pudieron probar que contaba cartas, pero tampoco podían meterse con él, tenían que déjalo pasar, debían sonreír y saludar, solo sonreír y saludar. sus amigos se fueron cayendo uno a uno y los mandaba en un taxi a sus casas uno a uno, el que mejor toma las bebidas alcohólicas es él. por eso siempre lo invitan, ellos no saben tomar ni agua. se dirigió a la sala de apuestas altas, pasó por la mesa de Black Jack para ver dónde pasaría la noche. si no podía estar con su ángel, se podría buscar algún demonio a quien molestar en el infierno. no le tomo mucho antes de que una dama que tenía apariencia elegante desde que la vio llegar con otras mujeres, se sienta a su lado en la mesa mientras juega cartas. este se recuesta en el espaldas de su silla y pasa de la siguiente mano. *veintiuno* dijo él al momento en que bajan las cartas. tenía exactamente 21. la dama habían perdido más de mil dólares, este había ganado cerca de un millón, se llevó consigo todo, incluso el anillo de compromiso de la dama, miró el aro interior encontrando que se casó hace más de 15 años. así que, posiblemente sea unos quince o veinte años mayor que él, no sabe su nombre pero si que no tardó en seguirlo, proponiéndole un trato cambio del anillo. no se negó pero si descubrió que se llamada Nora West, tenía cuarenta y ocho años y estaba casada. infelizmente. (....) está sentado en la barra de la cocina con una taza de cereal ya vestido para irse. deja el plato en el lavadero y se aleja has la puerta, miró una de las fotos que haría en la pared. arqueo una ceja mientras miraba divertido con una sonrisa ala pareja con un hijo. Era la esposa del jefe de la competencia, la otra empresa que competía con ellos. salió de la casa con una malvada sonrisa en sus labios, entro al taxi y se fue mientras el auto del marido iba llegando. este bajo apresurado y se quedó mirando, el taxi que se alejaba, Peter tiró el anillo por la ventanilla del auto el cual dio en el pecho del hombre, su largo cabello n***o no dejaba ver su rostro. estaba empapado así que difícilmente podía reconocerlo. *al edificio Golden thread, primera torre. te dió el doble si llegas rápido... en menos de 20 minutos.* dijo está mientras reía ligeramente. El taxista asintio feliz pisando a fondo el acelerador, mientras el esposo de la señora West gritaba cada maldición que conocía. Peter llegó a su departamento con ganas de dormir de nuevo. *esa cama arruina cualquier matrimonio, es muy incómoda*. dijo este sonando su espalda. *cualquiera se divorciaría luego de dormir en esa placa de hierro.* respiró hondo y se empezó a desvestir a medida que caminaba hasta su cuarto. se dió un baño con agua fría y salió solo pa volver a vestirse con un traje clásico de n***o, camisa blanca y corbata roja. tenia una reunión con algunos asociados de la empresa y querían una remodelación de pies a cabeza de una sede en quien sabe dónde, el plan que nunca escucho y hoy iban a explicárselo. se miró al espejo y tomo sus gafas de sol y las llaves de su Mazda blanco, bajo por el elevador de nuevo y su celular estaba sonando. * ¿quien?.* dijo directamente. * te tengo un trabajo simple, tú tienes muchos contactos.* *pregunte quién no que.* dijo con burla. la persona del otro lado de la línea gruño molesto, era una voz masculina muy nasal y molesta al oído. *Moriarty.* *¿que quieres Rodolfo el reno?* le burló caminando hasta su auto. * ¿tienes alguien que sepa de rastreo?.* encendí el auto y lo puso en marcha. *tal vez, no lo recuerdo bien, me gustan los número altos para recordar cosas, ¿cómo era?, 66735... o algo así .* escucho muchas quejas y gritos molestos. * ahora habla * su celular vibró. *eres un buen reno, está en tu oficina en diez, es un placer no escucharte más por un tiempo. hazme un favor, y paga mi cuenta cuando te la envié y estamos a mano.* colgó la llamada. llego al restaurante con un aire de superioridad que solo te lo puede dar, el saber que eres intocable y está seguro de ello. unos cuantos de sus compañeros se pegaron tras él, todos iban a ver a los inversionistas. Abrieron las puertas de restaurante para el y apenas entró las miradas se cerraron en el imponente hombre de cabello n***o y pálida piel que entró caminando y con un grupo de personas tras el mientras se quitaba las gafas de sol y sus ojos azul plateado congelaban a quien los miraran. encontraron de frente. los inversionistas que había escogido la mesa VIP de la parte baja del restaurante Peter sonrió arrogante y se cruzó de brazos. *hay una mejor vista en la parte superior, yo invitó.* no hace falta decir que el trato se amoldó alas preferencias de ambas partes mientras Peter movía sus piezas para poder ganar, mientras que nadie se daba cuenta de sus cambios evidente marcando y cambiando ciertas cosas que eran conveniente más para él que para ellos, pero tampoco perdían. * ¿les parece si acabamos esto luego del desayuno?.* las diecinueve personas en la mesa se miraron entre sí pero no se negaron, todo lo contrario, amaron la idea, ellos no pagarían de todo modos. nadie escatimó en lo que pidió, ni el mismo Peter, de todos modos, él tampoco pagaría. El trato no era malo, le gustaba como iba todo, un conjunto recidencial en la ciudad cerca de la costa era lo que quería, La mano de Midas, le gustaba mucho el nombre, además, era una ciudad para ricos allí, así tendría una jodida excusa para limpiar ese basurero sin quejarse. *me gusta el nombre de todos modos* siguió hablando y hablando mientras todos estaban casi inconscientes de todo lo que había comido, nada le impediría ser mayormente beneficiado en este trato. siguió agregando, cambiando, modificando y eliminando cosas del contrato, para poder ganar en su mayoría. debía mantener su reputación y ya sabía a quién usaria como proveedor de los materiales de la construcción. *¿Empire?* * yo solo trabajo con lo mejor y si quieres que diré, que sea calidad y de buen material, ¿quien mejor que la constructora Empire?, ¿que no son la excelencia en materiales de construcción ?, Obsidian Ring son únicamente lo mejor y por la cantidades excede el presupuesto, pero, ¿no es mejor que duren a tener que rehacerlas una y otra vez ya que están expuestas a la abrasión, erosión, lluvia, oxido, al daño que el agua pueda causar en ella, estarán en una pequeña área elevada de la costa pero eso igual es un riesgo peligroso ya que justo allí llega la marea cuando sube, podría causar daños estructurales a mediano plazo, hay que hacer refuerzos mayores a una casa que se encuentra en la ciudad.* sonrió tranquilamente. nadie lo contradijo y acordaron firmarlo en la noche. en una cena que los inversionistas invitarian. (...) Peter volvió al pueblo en menos de una semana mientras aún la sonrisa estaba en sus labios y veía felizmente como todo pasaba bien en su último día en la ciudad. se preparó esa misma mañana para poder está con su ángel en la noche. llego a su casa tranquilamente para descansar un rato. tomo los papeles de su escondite y empezó a tachar eliminar y quemas cosas, ya tenía el plan perfecto para atraer a Riha, atraerla como un pequeño Ruiseñor a su mano, amaba a su ángel. y se encargaría de cuidarla bien toda la vida. tomo su motocicleta de downhill y paso por entre los árboles en el atardecer hasta un punto cercano a la casa de su ángel. espero sentado cerca hasta que fueron las nueve. ella va llegando con apuro mientras su padre le grita que llegó muy tarde y que tuvo que pedir la comida. ella se disculpa pero igual la hace entra de manera muy brusca. básicamente tirándola dentro, escucho como caía al suelo y cerró la puerta de golpe. Peter busca entre sus cosas unos cuantos de esos parches que el usaba para el dolor. midió a contra luz el contenido de la botella del somnifero que tenía, era suficiente para esta noche. era viernes finalmente. espero unos cuantos minutos más antes de ver cómo se encendía la luz del cuarto de Riha, se trepó al árbol y observo dentro viendo cómo está se sentaba en el suelo a llorar. miro detenidamente a la luz del cuarto contiguo. pero está se apagó en segundos. *algún día colgaré tu cabeza en mi pared.* se quedó sentado en el árbol esperado a que se fuera a bañar. colocó el unas gotas en el agua del vaso sobre la mesa, y sonrió mientras esperaba a que hicieran efecto.

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